Soy Gabriela y está es mi Historia:
"El nudo en mi garganta se hace cada vez más fuerte. Dejar a mi familia es una herida que nunca sanará por completo, pero la esperanza de un futuro mejor me impulsa hacia adelante. El Nuevo Mundo me ofrece un lienzo en blanco, una oportunidad para reinventarme. Sin embargo, el miedo a lo desconocido me acecha. ¿Podré adaptarme a una nueva cultura, construir una nueva vida? Y ¿qué lugar habrá en mi corazón para el amor cuando Edward, con su mundo de éxito y poder, se cruce en mi camino?"
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Capitulo VI El Sueño
Beatriz regresa al comedor donde la señora Julia y Edward están esperando noticias. Ambos la miran con expectación.
Beatriz: Señora Julia, señor Edward, hablé con Gabriela. Me dijo que consiguió un modesto hotel para quedarse esta noche. Mañana buscará un sitio más permanente.
Señora Julia: Me alegra escuchar eso. Al menos tiene un lugar seguro para esta noche.
Edward: (con preocupación) ¿Está bien? ¿Dijo algo más?
Beatriz: (tranquilizándolo) Sí, está bien. Está cansada, pero agradecida. Mañana es su día libre, así que aprovechará para buscar un lugar donde quedarse de forma más permanente.
Señora Julia: (con una sonrisa) Es bueno saber que está tomando medidas para estabilizarse.
Edward: (asintiendo) Sí, espero que así sea. Si necesita algo más, no dudes en decírmelo, Beatriz.
Beatriz: (agradecida) Gracias, señor Edward. Se lo haré saber.
La señora Julia y Edward intercambian una mirada de comprensión. Ambos saben que Gabriela está en una situación difícil, pero confían en que encontrará su rumbo.
La señora Julia y Edward están sentados en la sala, conversando después de la cena. Beatriz ya se ha retirado.
Señora Julia: (mirando a su hijo) Hijo, si después de que vuelva de mi viaje Gabriela no tiene trabajo, la emplearé. Sabes que pasaré tres meses con tu hermano fuera del país.
Edward: (pensativo) Sí, madre, lo sé.
Señora Julia: (con una sonrisa) O, hijo, ¿por qué no le das trabajo en tu empresa? Tú eres el CEO y accionista, y ella ha estudiado.
Edward se queda pensativo, considerando la sugerencia de su madre.
Edward: (finalmente) Mamá, vamos a esperar. Si ella no encuentra nada, le ofreceré un puesto.
Señora Julia: (asintiendo) Me parece bien. Gabriela es una chica trabajadora y merece una oportunidad.
Edward: (con una sonrisa) Sí, lo es. Veremos cómo se desarrollan las cosas.
La señora Julia asiente, satisfecha con la respuesta de su hijo.
...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...
Edward se encuentra en un lugar etéreo, rodeado de una suave luz dorada. De repente, ve a Gabriela acercándose. Su corazón se acelera al verla tan cerca. Gabriela tiene el cabello castaño claro, muy largo, que cae en suaves ondas sobre sus hombros. Sus ojos avellanados brillan con una calidez que lo hipnotiza. Su piel blanca y hermosa resplandece bajo la luz.
Edward extiende la mano y acaricia suavemente la mejilla de Gabriela. Su corazón se exalta solo con su toque. Ella sonríe y se acerca más, permitiendo que él la abrace. Gabriela, siendo más pequeña, queda perfectamente entre sus brazos, encajando como si siempre hubiera pertenecido allí.
Edward la gira lentamente, mirándola a los ojos. Sus manos tiemblan ligeramente mientras le toca las mejillas, acercándose para besarla. Sus labios están a punto de rozarse cuando, de repente, Edward se despierta agitado.
Se sienta en la cama, respirando con dificultad. Se queda pensativo, tratando de comprender qué fue todo eso, tan intenso. Agitado y con el corazón latiendo con fuerza. Se sienta en la cama, tratando de calmar su respiración. La habitación está en penumbra, iluminada solo por la tenue luz de la luna que entra por la ventana.
Edward: (pensando) ¿Por qué solo con Gabriela me siento así? No entiendo qué me pasa.
Se pasa una mano por el cabello, todavía sintiendo el toque de Gabriela en sus sueños. Su mente está llena de imágenes de su cabello castaño claro, sus ojos avellanados y su piel blanca y hermosa.
Edward: (susurrando) ¿Por qué ella?
Se queda sentado en la cama, mirando al vacío, tratando de encontrar una explicación para sus sentimientos. No puede dejar de pensar en el abrazo, en cómo encajaba perfectamente entre sus brazos, y en el beso que casi compartieron.
Edward: (pensando) ¿Qué significa todo esto?
Finalmente, se recuesta de nuevo, aunque sabe que le costará volver a dormir. Sus pensamientos siguen girando en torno a Gabriela.
...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...
Edward está sentado en su espaciosa oficina, revisando algunos documentos importantes. La familia Thompson ha estado en el negocio de la construcción durante mucho tiempo El esposo de la señora Julia luchó mucho para llevar a su familia a un buen estatus, se retiro hace algún tiempo y luego se le presentó una enfermedad que terminó con su vida hace 5 años y ahora Edward ha heredado la parte de su familia, siendo CEO desde hace tres años.
Edward ha sido un líder excelente, llevando la empresa a nuevos niveles de éxito. Sin embargo, su mente sigue volviendo a Gabriela y al sueño que tuvo la noche anterior. Ha tenido varias relaciones que no han prosperado por falta de interés de su parte.
Edward se levanta y camina hacia la ventana, mirando la ciudad que su familia ha ayudado a construir. Sabe que su vida ha sido privilegiada en comparación con la de Gabriela.
Decide dejar de pensar en esa Chica. espera que mejores su situación y el continuar con su vida