Un Hombre Sin Alma

NARRADOR

En estos dos meses Amelia ha regresado a la escuela Pero aún no tiene ningún amigo, ya que solo se centra en sus estudios y volver rápido a su casa no ha podido superar la perdida de sus padres y tampoco habla con nadie solo habla cuando es necesario Pero no más, su abuela está preocupada por qué se guarda todo su dolor y sabe que tarde o temprano explotara aun cuando ella le da todo el amor y cariño sabe que jamás será suficiente y si antes Amelia tenía un gran autoestima ahora ya no queda nada y sufre de bullying en su escuela Pero no dice nada hasta un día al abrir su locker encuentra la foto de sus padres cortada en pedacitos mientras se reían de ella.

- Que ahora sí hablaras.

- Ja ja Se reían todos.

- Por qué, por qué hacen esto yo jamás les he hecho nada.

- Eso te pasa por ser una mustia te crees mejor por venir de otro país.

- Yo no me creo, está era una de las pocas fotos que me quedo de mis padres, por qué hacen esto por qué son tan crueles.

Decía Amelia llorando de rabia e impotencia, ya que no quería meterse en problemas y causarle molestias a su abuela, lo único que hizo fue salir corriendo mientras que sus compañeros se quedaron en silencio, ya que no sabían que sus padres estaban muertos y solo pensaron que era una minada, al salir corriendo sin importarle que estaba llorando solo corría y corría sin rumbo fijo hasta que de pronto se dejó caer en medio de la calle desolada.

- PORQUEEEEEEEEEE.- Grito.

- Ya no puedo massss, de verdad ya no puedooo papitos por favor vengan por mí, este mundo sin ustedes no es nada, solo quiero estar a su lado.

Amelia dejó salir todo lo que por mucho tiempo se había reprimido para no molestar a su abuela Pero ver la foto de sus padres destruida no aguanto más, el dolor que llevaba era demasiado grande ya no podía ver la luz al final del camino sentía que estaba muriendo lentamente aun cuando siente amor por su abuela ya no puede seguir fingiendo estar bien mientras todo su ser se carcome día con día por tanto dolor al final decide que llegó a su límite se levanta y camina sin mirar atrás hasta llegar a un puente donde ya nadie cruza, decidida a terminar con su vida y alcanzar a sus padres para poder estar juntos.

- Perdón papitos Pero ya no puedo más, ya no puedo seguir adelante sin ustedes, este dolor me está matando día a día, es un sufrimiento que me quema cada parte de mi ser por favor Dios permíteme estar con ellos, sé que para ti llegar a esta no es permitido Pero entiéndeme te lo suplico, solo quiero estar junto a ellos, solo quiero poder volver abrazarlos y decirles cuánto los amo y cuánto me han echo falta, permíteme llegar a ellos y nunca más separarme de su lado, quiero escuchar la dulce voz de mi madre que me diga que me ama y que me regañe sin importar por qué sea, quiero sentir el calor de mi padre, que me abrace como siempre y me deje sin poder respirar, que me diga sus aventuras cuando era estudiante, que me dé los consejos que tanto me aburrían y que ahora solo quiero escuchar, te lo pido permíteme tan siquiera estar un tiempo con ellos y después revivir tu castigo Pero no me dejes sin verlos porque está alma solo anhela estar junto a ellos.

Decía Amelia mientras lloraba con todo su ser, mirando al cielo suplicando poder llegar junto a sus padres, ella sabía que lo que haría estaba mal Pero ya no podía con tanto dolor es algo que no soportaba aun cuando prometió volver a visitarlos no podía seguir, pero antes de dejarse caer su teléfono empezó a sonar y vio que era su abuela quien le marcaba dudo Pero al final contesto.

LLAMADA

📲 Mi niña, a que hora vas a llegar te estoy esperando hoy hice tu comida favorita no tardes para que comamos juntas.

Amelia empezó a llorar aún más pues estaba a punto de acabar con su vida y ahora su abuela la estaba esperando para comer, es algo que le dolía aún más, ya que estaba a punto de dejar sola a su abuelita quien siempre le ha dado su apoyo y amor a pesar que ella también había perdido a su hija y un yerno que quería como un hijo, entendió que tal vez y sus padres le estaban dando una señal y sin más respondía a su abuela.

📲 Pronto llegaré abuelita, solo tardaré un poco.

📲 Está bien mi niña aquí te espero.

Sin más colgó, guardo su teléfono y empezó a caminar para una parada de autobuses para llegar rápido con su abuelita necesita estar junto a ella, al llegar espero un poco y se subió mirando el paisaje que le regalaba viendo las personas caminar, otras jugar y otros solo estar esperando su transporte, hasta que llegó a la parte donde solo se miraban los árboles mientras escuchaba la música que amaban sus padres.

Al llegar a la puerta de su casa y entrar pudo ver a su abuela en la sala mientras miraba su novela y al mirarla solo corrió a ella tirándose de rodillas y dejando caer su cabeza en las piernas de su abuela.

- Que te pasa mi niña.

- Perdóname abuelita.- Decía mientras empezaba a llorar.

- Por qué te debería de perdonar si no haz hecho nada.

- Ase un momento estuve a punto de tirarme de un puente para irme con mis padres.

- Tú que.- Dijo alarmada.

- Sí, perdóname Pero ya no podía más con este dolor, me está comiendo viva, ya no puedo con este sufrimiento, ya no puedo abuelita.

- Llora mi niña, llora todo lo que quieras y saca todo ese dolor que tenías guardado, yo estaré aquí para consolarte y cuidarte siempre.

Amelia dejó salir todo el sufrimiento que sentía no podía dejar de llorar sus lágrimas salían una tras otra por primera vez Desde que sus padres murieron realmente dejo salir todo el dolor que estaba sintiendo mientras su abuela la consoló asta que ella se sintiera segura, su abuela igual le dolía la perdida de su hija Pero sentía consuelo de tener a su nieta Pero al escuchar que estuvo a punto de acabar con su viva entendió que su nieta no estaba bien y que necesita recibir ayuda para poder superar la perdida de sus padres, ya que estaba sobrepasando sus fuerzas y si seguía así llegaría un día donde ella si terminaría con su propia vida.

(POR OTRO LADO, EN ESTADOS UNIDOS)

Había un hombre sobre los 50 años buscando una panadería que era de su mejor amigo que por algunos años perdió comunicación con el y un día que volvía de un viaje de negocios encontró en el aeropuerto y acordaron volver a verse invitando a su panadería para que conociera a su esposa eh hija, Pero al llegar vio que ya no estaba la panadería solo estaba un local cerrado con un letrero que decía (SE RENTA).

- Disculpe, por casualidad sabrá dónde está la ubicación de la panadería que había aquí.- Pregunto a una persona que pasaba.

- No sé enteró, la panadería cerró hace más de 2 meses.

- Que, no sabía Pero sabrá dónde fue la familia que la atendía.

- Mm mm.

- No se preocupe, lo que pasa que el dueño es mi amigo y quedamos que lo vendría a ver Pero por desgracia tuve algunos problemas y no pude venir antes, me podría dar su dirección.

El hombre se le quedó viendo por un rato, ya que al verlo bien vestido y con guardaespaldas pensó que era alguien malo Pero en su cara se veía que era sincero por lo que no dudo más y le empezó a contar.

- Pues lo siento si era su amigo Pero el señor Ernesto y señora fallecieron hace más de 2 meses en un accidente de avión.

- QUE!, COMO QUE MURIERON.- Dijo alarmado alzando su voz.

- Calma casi me deja sordo.

- Disculpe Pero como que murieron y su hija también murió.- Dijo aún más alarmado.

- Pues si, desgraciadamente ellos murieron mientras volvían de México Pero su hija no, ya que ella estaba aquí.

- Y que paso con ella, diga por favor dónde la enviaron para ir por ella, no puede estar sola.

- Pues ella se fue a México con su abuela que vino por la niña.

- Pero sus abuelos están muertos como e…

- Es su abuela materna, al parecer seguía con vida y ella se hizo cargo de la pequeña Amelia.

- Gracias y disculpe las molestias.

- De nada.- Dice el hombre mientras se va.

- Señor que hacemos.

- Vámonos ya no tengo nada que hacer aquí.

Sin más se sube a su auto y se marcha, tiene pensado buscar a la hija de su mejor amigo jamás pensó que aquel encuentro sería el último que lo volvería a ver, estaba tan feliz de volver a encontrarlo y ahora resulta que había muerto meses atrás y su hija ya no estaba en Estados Unidos si la busca sabe que tardará, ya que México es un país que no conoce Pero ahora todo para poder dar con ella, puesto que Desde que Amelia era pequeña el la conocía pues el fue su padrino de bautizo y juro que siempre cuidaría de ella Pero por motivos médicos tuvo que irse del país y perdió contacto con su amigo.

- Vamos al cementerio.

- Si señor.

El chófer cambió de rumbo yendo al cementerio donde se imaginó que su patrón visitaría a su amigo, ya que al ser su chófer pudo conocer a Ernesto y su jefe le contó historias que vivió con el, al llegar se bajó yendo directo a la tumba de su amigo y se preguntarán como sabe dónde está, pues Desde que se casaron los dos escogieron el cementerio donde descansarían y estarían uno al lado del otro, ya que ambas parejas eran muy unidas a pesar de ser de distinta clase social.

- Hola amigos, compadres y hermanos, no saben el dolor que me causa saber que ustedes están aquí, al fin nos habíamos encontrado y ahora resulta que ya se fueron antes espero donde estén sean felices y estén unidos como siempre lo estuvieron en vida algún día espero volvernos a encontrar, prometo buscar a mi ahijada y cuidarla como a mi propia hija siempre la quise así y no dejaré de quererla aun cuando ella no se acuerde de mí, los visitaré cada que pueda y siempre les traeré las flores que tanto te gustaron Louise.

Sin más deja un beso en la tumba y se marcha, al llegar al auto se sube y pide irse a su empresa mientras piensa en su ahijada la cual tuba que dejar y ahora está sola y agradece que aún su abuela estuviera Pero que estuviera con un familiar Pero no dejara de buscarla para tenerla y cumplir con la promesa que le hizo un día a sus amigos en la iglesia, de cuidar a su niña como una hija más y nunca dejarla sola.

- Te encontraré mi pequeña Amelia...