SEÑORITA TENTACIÓN.

(Leo)

DOS AÑOS DESPUÉS

A pesar de estár sin Anna, la vida nos ha sonreído, hemos tratado de vivir como si ella estuviera con nosotros y Yo se, que cualquiera podría decir, que para mi ha sido facil pues Anna no era mi familia, pero debemos recordar que también hay familias del corazón y del alma, pues muchas veces las de sangre no se comportan como tal, Yo decidí amar a Anna como si fuera mi Madre y así lo hice.

Por eso tengo solvencia para decir que la extraño igual que lo hace Matt y Bri.

La empresa va viento en popa, con Matt nos hemos esforzado tanto y como mencioné, yo no lo hago por el dinero, no me hace falta, pero sé que para Matt, esto es importante.

Ahora es mi cumpleaños número 26 y aunque no quiero fiesta sé que Matt y Bri siempre, hacen algo para hacerme entender lo importante que soy para ellos.

Papá me llamó por la mañana, mi cumpleaños fue una excelente excusa para hacerlo, aúnque yo hubiera preferido que me búscara, ya que tengo más de 6 meses de no verlo, pues no le he visitado, no lo hago por no ver a la escoria que tiene por mujer, ella siempre está con Él en todos lados, es su asistente en el trabajo así que, siempre está en la oficina y en la casa.

Escucho mi móvil, es La Traviesa.

—Hola Bri, dime Preciosa.—Le digo a la niña de mis ojos.

—Leo, a que horas estarás en casa, le pregunte a Matt y dice que fuiste a ver a un cliente, y que vendrás más tarde y que Él va a ir al matadero, después vendrá a casa. —Me dice un poco seria.

—Jajajajajaja ¿al Matadero?—Le respondo a modo de pregunta.

—Si, a ese apartamento que compraste y que ustedes dos ocupan para verse con sus dis que amigas; o que piensas que yo no sé que lo que hacen.—Me dice en forma de regaño.

—Preciosa, pensé que no sabías nada de ese apartamento, pero mira créeme que no lo ocupamos para nada malo, solo es un lugar donde tenemos un poco de privacidad.—Le digo y escucho silencio al otro lado...

—¡¡Y que!!, ¿van con sus amigas juntos, van los 4 o van solo ustedes dos.? —Su tono es sarcástico pero a la vez curioso.

—Bri ¿a que se deben esas preguntas? ¿que me quieres decir?—Le digo con serenidad.

—Contéstame Leo ¿Van juntos? porque no te he visto con ninguna mujer y a Matt tampoco.

—Bri, si lo que quieres saber, es si me gustan los hombres, o me gusta tu hermano y si por eso compre el apartamento, quiero decirte que...

—HABLA.. —Me grita, la niña desesperada por mi respuesta.

—Brianna, mira esas son cosas personales, sin embargo, te voy a responder.

No, no me gustan los hombres, tengo muy bien definida mi preferencia sexual, a mi me gustan las mujeres y mucho.

¿Como puedes pensar que me gusta tu hermano?, tú lo que estás es totalmente loca.

Matt es como mi hermano, Bri.—Le digo y mi Preciosa se queda en silencio.

—¿Yo también soy como tu hermana? ¿a mi también me quieres como si soy tu hermana?.—Me pregunta y me quedo callado, se me hace un nudo en mi garganta, mi corazón se comprime dentro de mi pecho y mi sudoración se hace notable.

—Mira Bri, por favor dejemos esta conversación.

Te recuerdas que el día, cuando nos fuimos a vivir a la casa que tu Madre compró, prometimos respetar cada quien su espacio.

Tú, ahora te estás metiendo en mi espacio.—Le digo, con mi garganta hecha un nudo.

— ¡¡Que me estoy metiendo en tu espacio, solo porque te pregunto, si también me ves como tu hermana!!, no entiendo por qué no puedes solo responderme y ya. —Me dice la preciosa.

—Bri, quieres dejar esta conversación aquí... por favor.

Sabes que yo, no me meto en tu vida personal, no te cuestiono por tus amigos, ni por tus noviecitos y eso que ya te conocí como 3 novios y apenas tienes 16 años, y Yo tampoco te pregunto si me ves como tu hermano, así que Brianna dejemos esto aquí, ¿de acuerdo?—Le digo hablándole en un tono más serio, y esto es algo que no me gusta hacer, nunca he sido grosero con Bri.

Nunca le he faltado al respeto, ella es una niña, tiene 16 años, es mi preciosa niña.

Yo soy un adulto y debo respetar su espacio...

Pero, tengo algo atravesado en mi pecho, algo que no puedo sobrellevar y que no me atrevo a decir y no debo decir...pero es doloroso.

Después de colcar el teléfono, me quedo sumergido en mis pensamientos, en estos pensamientos tan profundos, íntimos y secretos que jamás debo exteriorizar.

Pasados varios minutos y después de reunirme con un cliente, decido ir a tomarme un trago, este día ha sido difícil, y conversar con Bri lo ha hecho peor.

Así qué, llegar tarde a casa, me hará bien.

Me voy al bar más exclusivo de la gran manzana.

Y aunque no es mi estilo pido una botella de whisky, es mi cumpleaños y a pesar de que no le hago daño a nadie y mucho menos a alguien que quiero, me siento como un mal tipo.

Soy malo, esto no es nada bueno.

Yo debería morir...

Debo estár enloqueciendo.

Si eso es, estoy loco... Y nadie debe saber por qué lo digo, ni yo mismo lo puedo decir en voz alta.

Pero estoy seguro de que esto, no es bueno.

Me tomé toda la botella, ahora me voy a casa, dejo mi auto y me voy en taxi, pues en mi circunstancia no debo manejar.

En el camino me voy recordando, es mi cumpleaños, sé que debería estar feliz, tengo familia.

Tengo a Matt y a Bri.

No estoy solo, no lo estoy...

Debo estár feliz... me voy repitiendo lo mismo en el camino.

Al llegar a casa, las luces están apagadas, es bastante tarde y lo único que quiero es irme a mi habitación.

Subo las escaleras, y cuando voy a medio pasillo, se abre la puerta de la persona que menos quiero ver.

—Te estuvimos esperando, y no llegaste, son las 2 de la madrugada y vienes borracho Leo, te parece correcto.—Me dice la preciosa traviesa.

—Bri, tienes razón, pero hablamos al amanecer por favor. —Le digo y sigo mi camino; pero me detengo al escuchar de nuevo esa voz que es como una canción melódica para mi.

—Estaba preocupada por Ti y solo quiero recordarte algo, prometiste estár siempre a mi lado...—Mi Preciosa se da la vuelta y escucho el golpe de la puerta.

Mañana será otro día, será menos dramático, será más lógico, y más coherente.

Este día me descontrolé, pero mañana sabré que mi cuerpo no depende de mis pensamientos, que mi cuerpo no depende de las locuras de mi mente, soy una persona enferma, estoy desquiciado, estoy borracho y por eso es que estoy así...

Pero esto no puede seguir, debo poner un alto a esta locura.

Yo debo tomar una decisión radical, debo buscar un lugar para irme a vivir solo; debo vivir lejos de esta casa.

Yo soy una persona correcta y debo seguirlo siendo.

Siempre he detestado la gente sin escrúpulos, pero me siento malo e inescrupuloso y no quiero serlo.