Un hombre que muere y se arrepiente de no haber amado a nadie, aunque eso significaba perder a sus cercanos por ser homosexual, pero renació en un bebé en un mundo similar al nuestro pero con subgénero.
Entonces la pregunta es, el personaje principal de esta historia podrá encontrar el amor, averigua eso leyendo esta historia.
Advertencia: El contenido de esta obra está destinado exclusivamente a una audiencia mayor de 18 años. Incluye temas y lenguaje que pueden ser inadecuados para público menor de edad. Se recomienda discreción y el cumplimiento de las normativas sobre edad y contenido en su jurisdicción.
NovelToon tiene autorización de Enieth Loria Marín para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
24. Inicio del cortejo.
Al final de su presentación Cian recibió el cariño y apoyo de los Rossi que lograron viajar a París y cuando volvió a Londres tuvo un tiempo de descanso para recuperase del viaje, luego fue la graduación de la universidad que celebro con aquellos que consideraba su familia, además la primera presentación con la filarmónica luego de su estadía en París pudo ver a Alexander en el público por lo que había cumplido su parte del acuerdo para la siguiente cita
Por otra parte, Alexander era un hombre metódico, acostumbrado a controlar cada aspecto de su vida, pero desde que había conocido a Cian todo parecía fluir de una manera natural casi inesperada, además no quería presionarlo, no deseaba asustarlo, pero había algo en ese joven pianista que lo fascinaba.
Después de varias salidas y cenas, Alexander decidió dar un paso más allá en su cortejo: utilizaría sus días libres para pasarlos exclusivamente con Cian, pues sabía que el tiempo juntos era la clave para que su relación creciera, y quería que fuera en un ambiente donde Cian pudiera sentirse cómodo, relajado y libre de cualquier presión.
A través de algunos conocidos, Alexander logró informarse discretamente de los días en que Cian tenía menos compromisos, y ajustó su apretada agenda de empresario para coincidir con esos momentos de calma en la vida de Cian. Lo primero que hizo fue planear una serie de visitas a sus cafeterías favoritas en Londres, pequeños lugares apartados del bullicio donde podían sentarse, conversar y disfrutar del ambiente sin prisas.
Así es como el primer lugar que visitaron juntos fue una pequeña cafetería escondida en las calles de Londres, en un rincón íntimo donde la luz tenue y el suave aroma a café los envolvía, donde se sentaron junto a una ventana, ambos miraban el paisaje Londinense, mientras el mundo exterior parecía moverse más lento. Cian, acostumbrado a la soledad de sus pensamientos, comenzó a sentirse más abierto en la compañía de Alexander.
-Es un lugar perfecto para escapar de todo, Comentó Cian, con una ligera sonrisa mientras tomaba un sorbo de su café y continuó diciendo.
-No me había dado cuenta de cuánto necesitaba algo así.
Por eso Alexander, siempre observador, notó el cambio en su tono. Era como si algo en Cian hubiera cedido, como si por fin estuviera dispuesto a compartir más de sí mismo.
-Me alegra que lo pienses. Dijo Alexander, inclinándose ligeramente hacia él para seguir hablando más cómodamente.
-La idea es que puedas relajarte. No solo quiero conocerte como músico, Cian. Quiero conocerte como persona, sin filtros.
Al escucharlo Cian lo miró, sus ojos mostrando un destello de vulnerabilidad, durante años había guardado sus emociones más profundas para sí mismo, pero algo en la honestidad de Alexander lo hacía sentir que tal vez podía confiar en él.
-Mi madre… ella tiene expectativas que nunca he podido cumplir. Siempre he estado en segundo plano, especialmente en comparación con Declan mi hermano menor. Dijo Cian, la frustración en su voz palpable y continuó.
-Por eso mi familia es… complicada. Empezó diciendo, mirando por la ventana como si buscara las palabras para seguir hablando
Por eso Alexander escuchaba atentamente, cada palabra revelando un poco más sobre el interior de Cian. No interrumpió, dejándolo hablar a su ritmo y cuando Cian terminó, le respondió con sinceridad.
-No tienes que cumplir con ninguna expectativa, Cian. Lo importante es que estés feliz y fiel a ti mismo.
Las palabras de Alexander resonaron en Cian, y se sintió más conectado con él que nunca y le respondió.
-Lo sé, cuando dejé ese lugar lo hice con el propósito de ser feliz. Dijo Cian y continuó.
-No fue fácil tomar la decisión de mudarme a Londres, pues sabía que significaba distanciarme de las personas que amaba, los Rossi, pero también sabía que era la única manera de ser realmente libre, sin embargo, a veces pienso que fue un error, luego recuerdo por qué lo hice —continuó Cian, su voz suave pero llena de determinación.
-Hiciste lo correcto, Cian. Respondió Alexander finalmente y siguió hablando.
-A veces, la libertad tiene un precio, pero vale la pena si eso significa ser fiel a ti mismo. Dijo Alexander con una expresión de apoyo.
Cian asintió, agradecido por la comprensión de Alexander y a medida que las horas pasaban, ambos comenzaron a compartir más sobre sus vidas, por un lado, Alexander, habló del amor y el apoyo incondicional que siempre había recibido de su familia, aunque su vida parecía perfecta desde fuera, también tenía sus propios desafíos, por eso le habló a Cian sobre su hermano menor, Ivan Duvua, un omega al que sus padres sobre protegían constantemente.
-Mis padres siempre han sido amorosos, pero a veces siento que sofocan a Ivan… no lo dejan crecer por su cuenta, siempre están ahí para todo, aunque sé que lo hacen por amor, creo que Ian se siente atrapado, aunque no lo diga. Explicó Alexander.
Entonces Cian lo miró, viendo en Alexander una nueva faceta, una que mostraba que incluso las personas más poderosas y seguras también lidian con problemas familiares, por ello se dio cuenta de que, a pesar de sus diferencias, ambos compartían experiencias de vida que los conectaban a un nivel más profundo.
A medida que los días pasaban, Alexander continuó llevando a Cian a diferentes lugares de Londres, no solo para conversar, sino también para divertirse.
Un día, mientras paseaban por una feria local, ambos se detuvieron frente a un puesto de arte donde vendían pequeñas figuras talladas a mano. Cian, con una sonrisa nostálgica, eligió una pequeña escultura de un piano, mientras que Alexander seleccionó un caballo de madera.
-Siempre me han fascinado los caballos… mi familia solía llevarme a montar cuando era pequeño. Eran momentos tranquilos, lejos de todo el caos del mundo. Dijo Alexander.
Cian, por su parte, habló de su amor por la música, de cómo cada figura que elegía tenía algún significado relacionado con su pasión, por eso ambos comenzaron a compartir más sobre sus gustos, sus intereses, creando un vínculo que iba más allá de la atracción inicial.
Pero fue en una salida a una actividad de paintball donde Cian sorprendió a Alexander.
Habían decidido ir por diversión, pero pronto se dieron cuenta de que el juego se tornaría competitivo, desde el primer momento, Cian mostró una habilidad estratégica que Alexander no había anticipado, porque se movía con agilidad y precisión, Cian lideró a su equipo con una mezcla de calma y determinación, creando planes que los llevaron a la victoria.
Por ello Alexander estaba impresionado, no pudo evitar sonreír mientras lo veía en acción, al final de la partida, varias personas se acercaron a felicitarlos.
-¡Excelente trabajo en equipo!... no vemos a menudo una sincronización tan perfecta entre dos personas. Dijo uno de los organizadores, claramente impresionado
Al escuchar eso Alexander miró a Cian, sintiendo una conexión más profunda, no solo había una atracción física y emocional entre ellos, pues había una química natural cuando trabajaban juntos.
-Debo decir que no esperaba que fueras tan bueno en esto… me has impresionado, Cian. Bromeó Alexander, con una sonrisa
Por el comentario y el tono de voz del alfa Cian se rio suavemente, disfrutando del momento.
-Tú tampoco lo hiciste mal. Respondió, su tono lleno de complicidad.
A medida que el sol comenzaba a caer sobre Londres, ambos sabían que su relación estaba evolucionando. Lo que había comenzado como un simple cortejo se estaba convirtiendo en algo más. Algo que ambos estaban dispuestos a explorar
Me encanta como el protagonista fue desarrollando su personalidad y como aprendió el valor de la familia y a quererse a si mismo. Amo a Alexander, yo quiero un esposo así /Grin//Joyful//Joyful/