SEGUNDA OPORTUNIDAD

ALVARO GRUBSTEIN

Una semana ha pasado desde que llevé la muestra para la prueba de ADN.

Le he escrito a Ari Pero no ha respondido mis mensajes. Algo que ella sabía hacer es retirarse y guardar silencio, un silencio que me entristece y a la vez me molesta. Aunque la entiendo. Voy a arreglar mi situación complicada y tratar de empezar de cero con Ari

Mi padre sigue en el hospital, ha dado una mejoría pero mi madre insistió en que debía quedarse un poco más que tenga los cuidados necesarios.

Una llamada del laboratorio entró a mi celular.

— Buenas tardes señor Grubstein, los resultados del ADN están listos. Puede pasar a retirarlo.

— Buenas tardes, iré ya mismo— colgué la llamada.

Salí de la empresa a eso de las dos de la tarde con rumbo a la clínica. Sentía un poco de miedo, le tenía mucho cariño a Matías y algo me decía que él no era mi hijo, era como un sentimiento raro que sentía.

Llegué al laboratorio y retiré el resultado. No quise abrir el sobre ahí mismo. Regresé a mi oficina.

Me senté en mi escritorio, abrí el sobre. Los resultados eran negativos. Matías no era mi hijo. Todo este tiempo me ha mentido, he sido engañado tan fácilmente. He sacrificado mi felicidad en vano. Decidí repetir la prueba de ADN en otro laboratorio para corroborar.

Fui a la casa a verlo. Anne no estaba. El niño estaba con la nana.

— ¿Sabes dónde está o anda Anne? — le pregunté a la Nana del niño.

— No lo sé joven. Ella tiene dos días de no venir a la casa. Creo que solo usted le ponía atención a Matías. Me disculpa por lo que le voy a decir, tienen abandonado a este niño y eso no es justo para él. Yo sé que me pagan por cuidarlo, pero él necesita el amor de su mamá y de su papá.

Ella tenía razón. Matías no tenía culpa de nada.

— Gracias por cuidarlo y tus palabras tienen la razón— tomé a Matías en mis brazos— voy a llevarlo a dar un paseo. Ya lo traigo de regreso.

Subí al auto con Matías. Y lo llevé a jugar a un parque que estaba cerca de la casa.

La vida no es justa. ¿Qué debo hacer contigo?, durante este tiempo has sido mi hijo y créeme que te amo. ¿Quién será tu verdadero papá, será el guardaespaldas o alguien más? Anne todo el tiempo está fuera de casa, no te cuida, no veo ese amor que toda madre tiene a sus hijos. Abracé a Matías. Sentí un dolor en mi pecho. Regresé a Matías a casa.

— Cuídalo. Vendré mañana a verlo.— le dije a la Nana.

Conduje un poco. Detuve el auto. Recapitulé mi vida. Me casé a las 17, en el primer aniversario viajé a Estocolmo cuando supe que Ari estaba allí, ahí tenía 18 años. Anne sale embarazada y demuestra con prueba de ADN que Matías es mi hijo biológico. Nace Matías cuando cumplía mis 19 años. Asumo la presidencia a mis actuales 20 años. Matías solo tiene un año y medio de edad. Regresa Ari al país. Me mueve de nuevo este amor que siento por ella. Le realizo prueba de ADN a Matías y no es mi hijo biológico.

...*Nota de la autora: Espero haber sacado bien la recapitulación, si me equivoqué me dicen para corregir...