La Venganza De La Novia Traicionada

Nathan:

Christopher tiene razón, no solo estoy enamorado de Maya, la amo. En cuanto posé mis ojos en ella descubrí que había encontrado a la mujer que quería para el resto de mi vida, pero con qué sentimientos, si ella todavía amaba al maldito de Josh no podría arriesgarme a salir más herido de lo que ya podría salir de esta relación, lo importante es la felicidad de mi abuela, que ella pueda partir tranquila. Claro que me extrañó que Maya me pidiera una gran cantidad de dinero, tenía miedo de que se lo diera a Josh e incluso que se escapara con él, pero preferí confiar en ella. Si ella dijo que lo necesitaba, no puedo estar pidiendo explicaciones, tengo que confiar en la mujer con la que me casé. El trabajo estaba aburrido, no veía la hora de llegar a casa y en cuanto llegué me sorprendió la sorpresa de que mi abuela hubiera recibido el alta y que incluso hubiera preparado la cena, lo que dudé fue que ella hubiera hecho un plato para cada uno, ya estaba con mis antenas conectadas, conozco muy bien a Amber Ford y mis sospechas solo se confirmaron cuando ella, la hermana y la amiga de Maya comieron rápidamente y se fueron a la habitación, Maya y yo terminamos nuestra comida y ella ya es llamada para ayudar a mi abuela, pero en cuanto sube las escaleras Lia dice que me necesita y en cuanto entro en la habitación que era en la que mi abuela se quedaba no encuentro a ninguna de las dos, pero Maya estaba saliendo del baño y cuando pensé en salir de la habitación porque ya estaba sudando por el efecto del estimulante que mi abuela puso en la comida me sorprendí con la puerta cerrada, la señora Amber tiene sus artimañas, mientras pensaba en darme un baño me sorprendí con Maya decidiéndose a entregarse a mí, sí, hice el amor con mi esposa por primera vez y juntos nos declaramos, ella estaba acostada en mi pecho entrelazando sus dedos con los míos con sus piernas enroscadas en las mías

- ¿Y ahora qué va a pasar con nosotros, Nathan?

- Acabamos de consumar nuestro matrimonio, Maya, somos un matrimonio y vamos a actuar como tal. No quiero volver a escuchar de tus maravillosos y deliciosos labios las palabras matrimonio falso y divorcio.

- Eres perfecto, Nathan, un verdadero príncipe.

- No soy tan perfecto, ya que he destruido tu sueño.

- Sueño adolescente en un cuerpo de mujer, me has convertido en mujer hoy, señor Ford.

- No en cualquier mujer, te he convertido en mi mujer.

- No hay manera de no amarte, Nathan, no sé cómo estabas solo hasta el día que te conocí.

- Estaba esperando a mi princesa, y entonces te encontré.

Y de nuevo pude hacer el amor con ella, apenas la señora Amber volvió a casa y ya transformó mi vida, cómo me gustaría que viviera más tiempo a mi lado y viera nacer a mis hijos, que pudiera acompañarme a la iglesia el día que me case con Maya, y pensando en eso fue que la miré.

- Amor, ¿qué te parece que después de desenmascarar a los falsos y que recuperes todo lo que es tuyo nos casemos de verdad en una iglesia con una fiesta para todos aquellos que amamos y que son nuestros verdaderos amigos?

- Sabes Nathan, antes de conocerte era muy importante para mí casarme por la iglesia, hacer una gran fiesta, que todo saliera perfecto, ¿pero sabes qué fue perfecto? nuestra boda en Las Vegas, solo tú y yo, después fuimos a celebrarlo al casino, eso para mí fue perfecto porque todo se hizo con amor, si no sabía que era amor verdadero pensé que era amor de amigo, pero nos casamos por amor, claro que me casaría contigo donde quisieras, pero si estás pensando en casarte solo para realizar mi sueño ya no es tan importante para mí.

- ¿Dónde estabas todo este tiempo que yo pasé solo sin encontrarte?

- Estaba consiguiendo por caminos equivocados nuestro destino, pero finalmente nos encontramos y ahora vamos a vivir juntos para siempre, amor.

Esa fue nuestra noche de amor, llena de promesas de un futuro feliz, claro que todavía tenemos que hablar de formar una familia, tener a nuestros hijos, pero ya no me veo solo, he encontrado a la mujer de mis sueños.

- Nathan, en cuanto recupere mi herencia quiero que descuentes el valor que me diste para ser yo misma, pagar los gastos médicos de la abuela.

- Entonces fue para eso que necesitabas tanto dinero, fue un error mío no proporcionarte tarjetas de crédito y mucho menos una cuenta conjunta, pero en cuanto lleguen te las pasaré, si antes debería haberlo hecho por estar casado ahora es mi obligación porque realmente no eres solo mi esposa sino mi mujer, nos hicimos uno esta noche amor, lo que es mío es tuyo, pero si te parece una tranquilidad que desees que coja ese valor lo haré por ti.

- ¿Habremos sido liberados de nuestro cautiverio? ¿Podremos bajar a desayunar?

- Una idea mejor sería que nuestro desayuno viniera hasta nosotros, así aprovecho la mañana entera a tu lado.

- ¿No vamos a la empresa?

- Hoy no, quiero disfrutar del día al lado de mi mujer y de mi abuela y aprovechar este momento de felicidad que no tenía desde hace años...