Perdoname Por Que He Pecado

Un fuerte dolor en el estómago me despertó de mi sueño, la luz era tenue y poco a poco mis ojos se adaptaban al entorno, me, limpie un par de veces los ojos, no era exactamente el lugar oscuro y fúnebre en el que me encontraba.

La cama era suave y olía todo a flores, había una chica moda y una televisión en la pared, un librero y varios adornos, no podía creer lo que estaba mirando o acaso estoy soñando.

...___ Has despertado ¿Qué es lo que necesitas?--...

Dijo aquella voz a mi espalda, podía conocerla entre un millón el sonido de su voz erizaba mi piel y causaba reacciones prohibidas.

¿Cómo llegué hasta aquí? ¿Cuánto tiempo estuve dormida? Dominic dime una cosa ¿Por qué estoy aquí?

...----Perdoname, por mi culpa paso todo esto, no podía dejarte en ese lugar tan horrible, solo dime qué quieres hacer y te juro que respetaré tu decisión....

¿por qué me ayudas? por lástima, gracias por sacarme de ese lugar, pero no quiero seguir rompiendo tu matrimonio.

...---No puedo ofrecerte una vida siendo la señora, pero si tú me lo permites puedo estar a tu lado y protegerte de todos y de todo, causas un efecto en mi que no puedo comprender Anna...

Lo miré sorprendida me estaba ofreciendo ser su casa chica, va en contra de todo lo que se supone una mujer decente debe hacer, va en contra de lo que una hija de dios debe hacer.

......---Creo que fui muy directo, pero a mí no me gusta decir las cosas a medias, no me respondas ahora, tomate el tiempo que necesites para pensarlo, puedes quedarte aquí el tiempo que gustes, yo vendré después a traerte algunas cosas descansa.......

¡Por favor no! Lo, tome del brazo, las palabras se quedaron atoradas en mi pecho, no quería que se fuera, era egoísta sabía que no era mío y esto era prohibido, pero solo quería un poco más de tiempo con el.

...---Anna, mírame (acaricia mi rostro) jamás debes bajar la mirada ante nadie, tu lo mereces todo...

Dominic, tome el valor y me lance en sus brazos, su boca se encontró con la mía, su lengua se abrió paso, sus besos eran cargados de deseo, pasión sentía como nuestros cuerpos querían fundirse en uno mismo.

...---Anna, mi Anna me vuelves loco, que me has hecho, me tienes rendido a tus pies....

Estábamos comiéndonos a besos, cuando de repente él detuvo el acto ¿Qué sucede? Pregunté confundida, ¿acaso algo hice mal?

El solo beso mi frente --Tranquila tu nunca harías algo mal-- me dijo al oído ¿Entonces por qué te despides?

...---Es mejor que descanses, quiero que pienses muy detenidamente lo que hoy te he dicho y no quiero que tomes esto a la ligera...

Se fue, dejándome sola y con unas ganas inmensas de comerlo por completo, de sentirlo dentro de mi, se que es un pecado que quiero cometer.

La noche fue un poco tranquila entre momentos, me desperté agitada y sudorosa, ya que regresaba a ese horrible lugar, sentir esa sensación de impotencia y miedo a un paralizan mi cuerpo.

La mañana llegó y los primeros rayos del sol entran por mi ventana, mi hábito se encuentra en un perchero junto a la ventana, lo acaricio un poco y no puedo evitar lamentarme, de como terminó todo.