Mariana una mujer que se casó llena de ilusiones, creyendo en el amor eterno. Se da cuenta de que los cuentos de hadas y las historias románticas están muy lejos... Su esposo Hernán, la engaña con cuanta mujer se le pone por delante. hasta que aparece en su vida un chico de 38 años. ¿Mariana estará dispuesta a darse una segunda oportunidad con Fernando? ¿O segura en un mundo de mentiras, casada con Hernán?
NovelToon tiene autorización de Lorena Carapia para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Aceptar
Pronto llegué a la dirección. Por lo que puedo ver, el edificio está ubicado en una de las zonas más privilegiadas de la ciudad. Eso quiere decir que Mariana todavía tiene acceso a su dinero.
Eso es bueno, ya que ella todavía puede acceder a lo que por derecho le corresponde. Caminó a donde está el conserje del edificio, nadie mejor que él, para darme la ubicación exacta de cuál de todo estos departamentos es el de Mariana Escobar.
________ Buen día, amable hombre. Me puede informar cuál es el departamento de la señ... ____ Antes de terminar de hablar, la veo, bajar del ascensor.
Mariana Escobar se miraba mucho más bella en persona que en las fotos. Era tímida al caminar, como si fuera una adolescente, su rostro, era de los más hermosos que he visto. Aunque era una mujer madura, su hermosura sigue intacta.
_______ Señor; disculpé, ¿qué me iba a preguntar?
_______ Ya no importa... Es ella... _____ Caminé de prisa a donde estaba ella.
Mariana estaba por salir del edificio, cuando comencé a llamarla por su nombre.
_______ ¡Señora Mariana Escobar!
Al escuchar mi voz llamándola, ella voltea con miedo. Miré ese pánico en sus ojos. Puedo entender que en este momento sienta mucho miedo, por todo lo que ha vivido a lado de su esposo.
Trato de acelerar el paso y huir de mí, era algo que no iba a permitir.
_______ Mi nombre es Fernando del Río, fui enviado por Armando del Río.
De golpe Mariana se detuvo, justo en la entrada. Ella lentamente voltea a verme, y temerosa gira su cuerpo por completo. Veo como aprieta sus puños, y forzá, una sonrisa tensa.
______ ¿Vienes por parte de Armando? _____ Me pregunta en voz muy baja.
_______ Sí. Es mi padre, y ahora seré yo quien lleve tu trámite de divorcio contra Hernán Ferrer. ______ Contesté, mientras observó la actitud de Mariana.
Ella baja la cabeza, como pensando en algo, luego endereza su espalda y me dice.
______ Al otro extremo de la calle hay una cafetería, podemos ir ahí y hablar con más calma.
_______ Me parece bien. Vamos.
Mariana es la primera en salir, camina de prisa al otro lado de la calle, sin embargo, antes mira a todas partes. Se estaba asegurando de que no hubiera peligro cerca. Era la actitud de toda mujer que ha sido maltratada.
Al llegar a la cafetería, Mariana escoge la mesa más escondida del lugar, la que está cerca de la ventana.
Antes de que ella recorra la silla para sentarse, soy más rápido, y le ayudo a recorrerla...
_______ Gracias, eres muy amable, joven del Río.
______ No es nada, señora Escobar. Para mí es un placer. _____ Contesté.
_______ Señores, ¿les traigo algo? ______ La mesera nos pregunta.
______ Una taza de café sin azúcar. ¿Y, usted, señora Mariana? _____ Me dirigí a ella.
______ Un capuchino, por favor; señorita.
_______ Te gustan las bebidas dulces, ahora entiendo por qué continúas siendo una mujer tan hermosa.
________ Joven del Río, no estamos aquí para hablar de mis gustos ni de los suyos. Estamos aquí para hablar de los trámites de mi divorcio con Hernán Ferrer.
De una manera fría y cortante, Mariana corta cualquier charla de halagos conmigo. Dejo de sonreír, y hablo con mucha seriedad.
_______ Antes que nada, le pido una disculpa si he cometido una discreción o un error con usted. Solo he querido ser amable, y ya.
______ Pasando al tema de su divorcio con el señor Ferrer. Le advierto que será muy sencillo, solo es cuestión de que usted quiera divorciarse, pero, lo difícil es dejar a su marido en la calle, y que sea él quien le dé todo lo que ahora maneja.
_______ Pero si todo es mío, no he firmado ni un solo documento en donde yo le ceda la mitad de mi fortuna. También al casarnos lo hice por bienes separados. ______ Me dice de inmediato.
_________ Entiendo su descontento, señora Escobar. Pero hay que tomar en cuenta que su esposo ha trabajado 35 años en las empresas y las ha hecho crecer. Cualquier juez le va a otorgar el 50% de las empresas.
_______ ¡Eso no es justo! ______ Exclamó con descontento.
_______ Tranquila, señora. Debemos pensar con mente fría. Por ahora, debe regresar a la mansión Escobar y mantenerse ahí hasta que los papeles del divorcio salgan.
Mariana se levanta de la mesa muy alterada. Como asustada, pero en este momento no hay otra opción, debe mantenerse en esa casa, o de lo contrario, Hernán Ferrer la puede acusar de abandono de hogar, y de infidelidad.
_______ ¡No, entiendes!
_______ Yo no puedo regresar a lado de Hernán y de la bruja de su madre. Gracias a David, he podido escapar de ese infierno. No tengo las fuerzas necesarias para volver a lo mismo, si lo hago terminaré por volverme loca, y suicidarme...
El daño sicológico que Mariana tenía era enorme. Me puedo dar cuenta de su desesperación, de su miedo hacia Hernán.
________ Eh; traigo las tazas de café. _____ Dice la mesera sin dejar de ver a Mariana.
_______ Cambie la taza de café capuchino por un té de tila. ______ Le ordeno.
_______ Enseguida, señor.
Al ver a la mesera irse, me pongo de pie, agarró las manos heladas de Mariana y les doy un poco de calor...
_______ Tranquila, hablemos de este tema. _____ Usé un tono de voz dulce.
Mariana soltó suavemente sus manos de las mías. Tomando asiento, ella se llevó sus manos a su rostro.
Era frustrante para mí, verla así y no poder hacer nada. La mesera no tardó en llegar, dejando la taza de té a un lado de Mariana.
________ Es muy difícil para mí, aceptar regresar a la mansión Escobar. Tengo mucho miedo de volver a ser lastimado.
_______ Nadie sabe el infierno que he pasado desde que me casé con Hernán. Lo único que deseo ahora es divorciarme y vivir una vida en paz, lejos de todos ellos. Si para eso debo darle la mitad de todo se la doy... ______ Me dice Mariana dejando caer sus lágrimas.
_________ Entiendo tu dolor, y desesperación. Pero no creo justo que después que te causo tanto daño, él se quede con la mitad de todo lo que por derecho te corresponde.