Te Regalo Tu Libertad -

Lily:

La noche apenas comienza, Clara luce un hermoso vestido negro con escote en la espalda, y tacones altos, su cabello suelto queda perfecto.

Yo tengo puesto un vestido rojo con abertura en una pierna, escote que llega hasta mi ombligo y mi cabello ondulado que cae sobre mi espalda, mis tacones son algo altos, me siento increíble, todos mis amigos de la facultad están aquí, pensamos en movernos a una de las salas VIP, Antoni es sobrino del dueño de este centro nocturno, así que nos vamos a una de ellas, todo está increíble, el lugar está decorado con luces LED en tonos rojos, los sillones son bastante cómodos, en el centro de la mesa tiene un tubo, pero no hay bailarinas, todo es ambiente puro aquí hay demasiada gente e los alrededores, en las salas VIP, solo hay gente de estatus más elevado.

- ¿Te gusta?- pregunta Clara quién trae una copa en su mano.

- Claro, está muy cómodo- respondo mientras me siento acomodando una de mis zapatillas.

- Por fin terminaron los exámenes, estaba asqueado de tanto estudiar- Dice uno de los amigos - No hablamos más del tema, suficiente tengo con haberme trasnochado, por tanto, repasar, mejor vamos a bailar-

Grita Clara tomándome del brazo, empezamos a brindar todos, algunos de los chicos se me acercan para invitarme a bailar, Clara baila con Antoni, y yo salgo con alguien más.

Pasa alrededor de una hora.

- Acompáñame al baño, quiero re tocarme el maquillaje- le digo a Clara quién ya está algo tomada.

En el baño ambas nos pintamos los labios y acomodamos nuestro cabello, al cabo de un rato salimos, había más personas en el lugar, pronto llegamos a dónde estaban nuestros amigos y tomamos shorts de vodka, todos bailábamos alcano de un rato Clara se fue con uno de los chicos a bailar y yo ya poseída por el alcohol me subí a la mesa y empecé a bailar al ritmo de la música que estaba en ese momento, era demasiado provocativa, todos me gritaban, y aplaudían yo me movía y bailaba alrededor del tubo metálico que ya asía en la mesa, esto empezaba a subir de tono pasaba mis manos por todo mi cuerpo, por mis senos, luego bajaba a mis piernas y cuando estaba a punto de agacharme, sentí como me tocaron una de mis piernas.

-¡HIJO DE PUTA!- escuché un grito lleno de enojo, yo grité cuando vi como a Antoni le daban un puñetazo en el rostro y caía al suelo.

- ¡¿TÚ QUE MIERDA VES?!- escuché nuevamente la voz -¡¿Y TÚ QUE HACES AHÍ BAILANDO COMO UNA CUALQUIERA?!- Me grito Axel mientras me jalaba de brazo.

-¡Auch! ¡MI TOBILLO!- grité cuando caí de la mesa al suelo ¡¿QUÉ TE PASA?! ¡QUIEN TE CREES QUE ERES?! - Respondí gritando, pero no recibí respuesta alguna, solo un intenso dolor en mi brazo.

-¿QUÉ PASA?- Escuché la voz agitada de Clara -Oye suéltala, ella no te conoce, yo no te conozco y la estás lastimando- Dijo clara tratando de calmar las cosas.

- ¡ANTONI! ¡¿DIOS MÍO QUE TE PASO?!- Clara corrió al ver qué Antoni tenía sangre en su nariz

- Tranquila, no es nada- Respondió sin quitarle la vista de encima a Axel y su acompañante, un joven de su misma estatura y complexión.

- ¿A no es nada? ¿Quieres más?- volvió a responder Axel, soltando mi brazo de su agarre.

-¡NO! ¡ALTO, YA BASTA! Grito uno de los amigos con los que también íbamos.

- Vámonos- ordenó Axel a su acompañante y a mí.

- Oye, espera yo no voy con ustedes- dije sin dar un solo pasó.

-Ella no va a ningún lado, ella se queda aquí- volvió a decir Clara, pero fue ignorada por los dos hombres.

- ¡Camina! Dijo Axel enojado - No, no te conozco- Respondí y eso fue suficiente para qué me alzará en su hombro y me sacará a rastras del lugar, todo mi pataleo y manotazos no fue suficiente, nadie me pudo ayudar, ni los guardias de seguridad, en este lugar todos parecían conocerlo y tenerle miedo, mi grupo de amigos salieron de tras de nosotros.

Pero no pudieron hacer nada.

Axel y su acompañante me metieron en su Lamborghini.

-¡AYUDE LA! - gritaba mi amiga Clara con desesperación, - ¡CLARA!- Mis lágrimas empezaron a salir de mis ojos al darme cuenta de que ya me habían descubierto.

-Tranquilos, les pido una disculpa en nombre del señor Colombo, el solo vino por su prometida, entiendan su enojo al verla bailar para otros hombres- Dijo con una sonrisa en su rostro.

-¿Su prometida? Lily nunca menciono que tenía novio, mucho menos prometido.

- Disculpe señorita ¿Usted es su amiga?-

-Su mejor amiga- escuché decir a Clara.

- Que pena, pensé que las mejores amigas siempre se contaban todo, con permiso que disfruten el resto de su noche.- El tipo se alejo y subio a otro auto.

Axel tomó su teléfono - Por hoy no te necesitaré, te veo mañana, iré a mi departamento- termino su llamada y arranco su auto, dejando a tras a mi grupo de amigos, yo lloraba y no era capaz de voltear a ver a Axel, él no dijo nada en todo el camino, su mandíbula estaba tensa, su enojo era notable, podía darme cuenta de que se estaba conteniendo.

Llegamos a una zona exclusiva de lujosos departamentos, apenas y eran las 12:00 pm, cuando llegamos al estacionamiento Axel bajo del auto y abrió la puerta de mi lado.

-Bájate- ordenó - No quiero - respondí con mi voz quebrantada.

- ¡QUÉ TE BAJES, NO TE ESTOY PREGUNTANDO!- Respondió jalando de mi brazo, - Camina- dijo mientras me jalaba, subimos por el elevador hasta un décimo piso, en el transcurso mantuve mi mirada viendo al piso, pero notaba como Axel quien estaba delante de mí, no apartaba la vista de mí, él estaba recargado con las manos en los bolsillos y su mirada era pesada.

-¿Y ahora que pasará? ¿Tendré que casarme? ¿qué ocurrirá con Cristian? ¿qué me va a hacer este troglodita?- pensaba una y otra vez hasta que las puertas se abrieron.

-Sal- Lo escuché decir, por mi bien salí, ya tenía suficiente con los moretones que se me harían en los brazos por sus apretones.

Camine de tras de él, no podía correr en ese momento porque era más que obvio que me atraparía y esto podría ponerse peor, así que obedecí, entramos al lugar, y era enorme.

-Camina- dijo con la poca paciencia que aún le quedaba -¿A dónde? Si ya estoy dentro ¿Qué más quieres?.-

- A mi habitación - cuando dijo esto mi corazón empezó a latir muy fuerte y rápido -¿Para qué? Dije asustada.

- A jugar si quieres- respondió -camina- volvió a decir.

Camine hacia esa puerta negra y el la abrió, la cama era enorme, tenía un edredón gris claro, había un gran ventanal con cortinas azules, un espejo frente a la cama, estaba la puerta del gran closet como el que teníamos antes, en casa de mis padres.

Axel se quitó el saco y entro a su closet yo me quedé de pie esperando, me sentía extraña estando en ese lugar, luego de casi 20 minutos Axel salió de ese lugar echo una fiera.

-¡ERES UNA ZORRA!- grito mientras me tomo de mis brazos y me voto en la enorme cama -¡HA!- grité

- TE METISTE CON EL IDIOTA DE IVANOV- de sus ojos parecía salir lumbre.

-¡NO! YO NO HICE ESO- grité asustada, apreté mis ojos tan fuerte como pude, esperando alguna bofetada, pero cuando abrí mis ojos vi a Cristian semi desnudo delante de mí, -¿Que haces? Pregunte.

- ¿Tú que crees? Esta noche te voy a dar tan fuerte que vas a olvidarte de ese cabrón de mierda- dijo caminando hacia donde yo estaba, mi corazón latió tan fuerte por el miedo y esa sensación rara de verlo así.

-

-