LO QUE DIGA EL DESTINO

******* CRISTINA

Luego de una larga espera de dos horas de retraso del viaje, veo salir de la zona de embarque a mi hermana Noelia, ella se encuentra jalando su maleta, ella me ve y corre para saludarme con lágrimas en los ojos, desde que di a luz mi querida Noelia no se movió de mi lado, me cuido como si fuera su tesoro más preciado,, luego de un mes tuvo que regresar muy triste a terminar sus estudios para trabajar en el consorcio y por supuesto casarse con Fausto.

Mientras corre sin mirar a los lados choca contra un hombre que lo hace caer. - Lo siento mucho dice ella al hombre y continúa su marcha dejando al hombre en el piso.

- ¡Cristina te extrañé mucho! - Me abraza fuerte y ambas lloramos de la emisión, es un año que estuvimos alejadas, pero de pronto se escuchó un carraspeó.

- Solo lo siento, no calma el dolor y la vergüenza cuando me hiciste caer al piso señorita. - Dice aquel hombre con una voz muy varonil.

- Señor, ya me disculpé con usted, ahora que desea que me arrodille y suplique su perdón, además usted también tiene la culpa, si me vio correr porque no se detuvo para no chocar conmigo. - Contesta Noelia, pero su respuesta me da risa y no sé cómo aguantarlo para no reír a carcajadas.

- Señorita usted si es bien fresca, cómo puede echarme la culpa por no detenerme, cuando usted corría sin mirar a quien se llevaba por delante, me hizo caer y pasar la vergüenza y....

- Aquel hombre que es muy guapo, se me queda mirando muy impresionado, se me acerca coge mi mano y se presenta dando un beso húmedo en mi mano.

- Mucho gusto mi nombre es Enrique Russo. - Me dice aquel hombre, no sé por qué cuando besa mi mano, no me molesto más bien sentí una descarga eléctrica y sentí mariposas en mi estómago y eso solo lo llegué a sentir con mi Darío.

- Bueno señor Enrique ya todo está solucionado, ahora si me disculpa debo irme con mi hermana a casa, estoy muy cansada por el viaje, así que Chayito. - Es Noelia que nos saca del trance en el que estábamos ambos.

- Ella coge mi mano y me jala para irnos, adiós Enrique mucho gusto en conocerte.

Él me queda mirando con una linda sonrisa en sus labios, pero de un momento a otro siento una gran operación en mi corazón, no debo ser débil, todos los hombres seducen y lastiman, no creo que encuentre un hombre como lo era mi Darío, hombres como él ya no existen.

- Cristina hermana, dónde están mis ahijados. - Me pregunta Noelia.

- Lo deje en recepción, ahí es una zona segura no creo que se metan en problemas.

- Bueno entonces vamos por ellos, no sabes cuántas ganas tengo de abrazar a mis ahijados, hace un año que nos los veo.

- Si, ellos también están felices de volver a verte, pero te advierto algo, no deseo que seas tapadera de sus travesuras.

- Hay, Cristina no seas aguafiestas, dónde has visto a niños que no hagan travesuras y sobre todo a esos dos angelitos que no creo que sean traviesos. - Dice Noelia, parpadeando sus pestañas y es la señal que la estadía de Noelia será un dolor de cabeza.

Nos dirigimos al área de espera y no puedo creer lo que ven mis ojos, el mismo tipo que choco con Noelia se encuentra conversando muy amenamente con mis hijos.

Me acerco muy rápidamente hasta donde están ellos, pero una persona muy alterada me gana en reclamar por acercarse a sus ahijados.

- Oiga usted, con que intenciones se acerca a mis ahijados. - El hombre que lleva de nombre Enrique se queda sorprendido por nuestra presencia.

- ¡Madrina Noelia! - Mis hijos corren, para abrazar y saludar a su madrina.

- Hola mis amores, no saben cuánto les extrañe, pero debo de preguntarles algo a ustedes ¿Su mamá no le hablo de no acercarse a personas desconocidas?

- Si nos habló, pero el señor Enrique es muy buena persona y nos cae bien, además no es un extraño, yo le conocí fuera de los baños, pero cuando él entró para hacer sus necesidades, olvidó su laptop y un sujeto feo lo sustrajo para robarlo y yo me puse, le dije que era el laptop de mi padre y amenace de gritar si no me lo entregaba.

- Dice Ángela, que nos deja sorprendidos por su actitud, ya que ella es una niña muy desconfiada e incluso desconfía de nuestros colaboradores y eso que ellos trabajan años en la casa.

- Si mamá, yo salí del baño cuando vi a mi hermana discutir con un hombre feo, ella amenazó gritar si no le entregaba la laptop, el tipo al verse sorprendido, lo entrego y salió huyendo.

- Niños, no deben exponerse al peligro, está vez no les pasó nada, que me hubiera hecho si les pasaba algo y si el tipo estaba armado y los lastima.

- Si mamita, lo siento mucho. - Ángela agacha su cabecita muy triste, ella pensó que había hecho algo bueno, por el hombre que gusta que sea su padre.

- Por favor señora no regañe a los niños, yo soy el culpable por ser descuidado con mis pertenencias, incluso la pequeña Ángela es muy hábil con los sistemas de seguridad, desbloqueo muy rápido mi contraseña de seguridad. - Dice Enrique embobado por los dos niños y de su madre, ahora ruega que esté soltera, par poder conquistarla, pero teniendo como comadre a la tal Noelia, siente que será una piedra en el zapato.

- Bueno señor Enrique, que bueno que sabe reconocer su negligencia en abandonar su herramienta de trabajo irresponsablemente, si sigue así puede que en el futuro pueda perder hasta la cabeza. - Dice Noelia, muy seria.

- Madrina, por favor no grites al señor bonito, él es mi amigo y no me gusta como lo hablas. - Dice Ángela muy molesta.

- Si madrina, creo que se está pasando de la raya, el señor Enrique es buena persona y no se molestó que trajimos la laptop en la sala de espera.

- Niños, se están poniendo de lado de una persona que recién conocen y me dan la espalda a su madrina que cuido de ustedes cuando eran más pequeños. - Dice Noelia, muy triste.

- Mamá, por favor puede pagar por mis cuidados a mi madrina, porque si no acepta mi decisión de amistad con el señor Enrique, entonces no deseo estar junto a ella.

- Mi amor, no lo tomes a mal, tu madrina solo se preocupa por ustedes, hay personas buenas, como lo hay malas, hoy tuvieron suerte y su amigo Enrique es una persona buena y no les hizo daño, pero no siempre personas ajenas se acercan a niños solo para entablar una amistad, hay personas malas que se acercan para lastimar.

- Su mamá tiene razón, hay personas malas que gustan de lastimar a niños indefensos, por eso no deben acercarse a personas ajenas.

- Si señor Enrique, no volverá a pasar.

- Dice Ángela sonriendo.

- Miro a Noelia y ella me mira a mí, levantamos los hombros en señal de rendimiento.

NOTA:

Les dejo un capítulo más de mi novela ,espero que les guste y me regalen sus link.

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