La Omega más deseada

Mi expresión al irse Dante debió ser evidente para mi madre, los padres de él y mis amigos.

Tenía una sensación de inquietud y opresión que me decía lo injusta que había sido con él, erróneamente di por hecho que él no me escucharía, que trataría el asunto con parcialidad, escogiendo por encima de todo a sus compañeros.

- Tranquila Hada, quizás deberías disculparte con el alfa_ comentó mi madre

- Tú alfa es bueno amiga, y demasiado guapo_decia en broma Sandra

- Vah no me parece que sea tan guapo. Yo soy más apuesto_ decía Jason

Las palabras de mis seres queridos hizo que mi tensión se fuera suavizando. Tenía razón mi madre, debía hablar con Dante y ofrecer una disculpa, jamás le permitía explicar las cosas.

- Cariño, no te angusties. Necesitamos que mi esposo sepa de una vez que ustedes tuvieron sus razones reales para irse_ agregó la ex luna mientras me tomaba la mano y me llevaba a dónde vivía Dante.

- Queridos ustedes pueden esperar en mi casa_ les indicó mi madre a Sandra y Jason

- Gracias señora_ respondieron

Mi madre también creyó que era lo mejor, aclarar todo ya que acompaño a la sra Laura, yo solo sentía que el corazón se me saldría del pecho.

- Espere, sra Laura. ¿Cree que eso sea necesario?_ balbucie nerviosa

- Eso podrá ayudar en su relación_ terminó de decir

- Yo no tengo una relación con Dante. Es que él..._ no me dejaban hablar

- Es evidente que ustedes dos se gustan_ volvió a decir

Pero ¿qué estaba hablando? Es claro que fui injusta con Dante con respecto al asunto con Mike y Derek, pero afirmar que le gustó es ir demasiado lejos. Dante no estaba interesado en mí y su evidente distancia, sus palabras con Brando me habían dejado claro que no iba a tener una relación seria conmigo.

Llegamos a la puerta de su casa, escuchamos las voces de Dante y su padre; era evidente que había una discusión.

Mi madre también estaba detrás de todo, porque no dijo nada cuando la ex luna me traía con ella hasta acá.

- Esperen aquí_ dijo la mamá de Dante

Oímos de pronto las palabras: " Hijo no deberías seguir tratando con esa clase de mujer, solo pretende utilizarte eso dicen que hace".

Luego la voz de Dante: Cállate de una vez! Tú no sabes nada de Hada. Yo soy soy el alfa y no tratare así con ella.

Estaba aturdida de lo que oímos. No sabía si debíamos seguir, cuando mi madre me sostenía la mano con fuerza.

- Laura dijo que esperemos_ susurró mi madre

- No puedo creerlo, has caído también en su trampa. ¡hijo por favor! Ella solo te quiere usar, así son las de su clase_ respondió el padre de Dante

Luego siguió un sonido de cachetada. Por la reacción de ambos nos dimos cuenta de que intervino la Sra Laura.

Ella comenzó a decir cosas que me hicieron poner roja, como que Dante siempre me ha amado y que desde que estaba en el vientre de mi madre él buscaba mi cercanía.

La Sra. Laura abrió la puerta y nos hizo pasar porque tanto mi madre como la ex luna le van a revelar al antiguo alfa la verdad sobre nuestro escape.

Dante tenía una expresión que nunca había visto, se veía confundido y nervioso. No dejaba de mirarme y yo me sentía muy avergonzada.

- Bueno después de la cachetada que me diste espero que me expliques todo y la razón del porque tú lo sabes y yo no_ agregó molesto el padre de Dante

- Bueno cariño la razón es simple, por tú bienestar era mejor que no supieras. Está involucrado el rey y la reina en este asunto_ afirmó la madre de Dante

- ¡¡¿Qué?!! ¿Es en serio?_ dijo nervioso

- Ashley fue la compañera elegida por la luna del rey Lican_ comentó la mamá de Dante

Mi madre con mucho respeto, le explicó los sucesos al ex alfa. Podía oírla decir todo y ya no había ese miedo que antes tenía cuando converso conmigo la primera vez. Dante al igual que él estaba asombrado escuchando todo.

- Tú entonces eres la hija del rey_ afirmó asombrado

- Eso explica la razón del porque Hada es más fuerte que otros miembros de la manada_ decía analizando Dante

- No debí haber dicho esas cosas_ dijo avergonzado el antiguo alfa

- Bueno eso te debería enseñar a no juzgar a nadie. Ni tratar en menos a otros miembros independiente de su nivel_ respondió la ex luna

El antiguo alfa se sentía evidentemente incómodo. No sabía si era porque había cambiado su perspectiva de los niveles o porque resultó que yo era descendiente de la realeza en los lobos. Seguía siendo hija de una Omega, aunque mi padre fuera el rey de los clanes.

- Hada, puedo hablar un momento contigo_ me dijo Dante cuando se terminó la historia de mi madre

Su padre parecía que iba a decir algo, pero la mirada de Dante, hizo que se mantuviera en silencio.

Afuera lo primero que mencionó Dante fue lo que pasó con su padre.

- Supongo que ser el alfa ahora, tiene sus ventajas_ comentó

- Ha pasado un tiempo desde la última vez que nos vimos. Escuché que has hecho un buen trabajo como el alfa_ quise decir para aligerar el ambiente

- Es un trabajo de la manada también. Me alegra saber que oíste algo positivo de mi. Sentí que no querías verme cuando hace un año decidiste no volver a la comunidad_ respondió Dante y me miró de frente

- Bueno tu conversación con Brando me hizo ver cómo me veías_ dije sería

Y ahora tu madre dijo muchas cosas hace un momento, escuché algunas de ellas_ me sentía un poco nerviosa

- Bueno... lo que oíste... es de lo que venía a hablar_ decía el inquieto

Alfa y todo, pero se ponía muy nervioso, me parecía una situación poco común. No quería pensar que me diría algo malo está vez.

- La verdad Hada es que tú me has gustado desde hace mucho tiempo. Más del que me atreví a decirte, y no pretendía jugar contigo, supongo que soy... un idiota_ comentó mirando mis ojos, mientras tocaba con suavidad mi cabello

- Tú estás confirmando las palabras de tu madre_ dije perpleja, no sabía qué decir

- Lo que ella mencionó era cierto. Siempre te he amado mi Hada hermosa_ puntualizó

Temía una cosa, que no fueras mi compañera destinada por lo mucho que me gustabas_ me miró con inquietud

- Yo aún no sé eso Dante. Aunque no negaré que me gustas mucho_ comenté de pronto, una parte de mi siempre sintió esa atracción fuerte por él.

Debía esperar hasta los 21 años para saber, si seríamos compañeros destinados.

- Me gustaría descubrir que la atracción tan fuerte que sentí por ti sea por qué eres mi mate. Te esperaré mi Hada_ dijo él, luego se acercó como pidiendo permiso para besarme.

Estos dos años me aleje por lo que había llegado a sentir por él. Me colgué de su cuello y fui yo quien inicio el beso, extrañe sus labios. Extrañe a Dante...