VENDIDA.

Ambos suben al coche y salen rumbo a un espléndido salón.

Este está lleno de personas muy bien vestidas y muy elegantes.

Sienna se siente paralizada ante tal multitud, pero lo que más le aterra son esos incómodos zapatos.

__ Tranquila. Un paso a la vez.

Le susurra Emiliano al verla inmóvil junto a él.

Después de acomodarse, Emiliano la deja sola para ir a saludar a sus socios.

Dándole la oportunidad a todos esos buitres que observaban a la joven a la distancia.

Sienna se ve rodeada de personas curiosas, que le hacen un millón de preguntas a la vez.

Algunas ata murmuran que Sienna es muchísimo más hermosa que Anaís.

Que hasta entonces presumía sobre si increíble aspecto.

Esto hace que se lo ha furiosa y quiera ir a armar un escándalo.

Pero sabe que eso le es imposible, ya que su padre está presente.

Sabe que aunque este la ame y consienta en casi todo, no acepta tales escándalos y menos en público.

Así que Anaís se dispone a humillarla con sutileza.

Pero antes de poner en práctica su malvado plan, ve como Emiliano se lleva a Sienna consigo.

Si antes estaba furiosa ahora está que se la lleva el diablo.

__ Esa maldita mugrosa me robó el foco de atención y ahora asta se lleva a Emiliano con ella. Sienna no te dejaré escapar.

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Por otra parte, Emiliano que ya no soportaba ver como esos hombres codiciaban lo que le pertenecía.

No se resistió más y se llevó a Sienna del lugar.

De regreso en la mansión, Emiliano arrincona a Sienna contra la pared y la besa con ternura.

La joven no entendía lo que estaba pasando.

En los 3 años, jamás Emiliano la beso.

Pero presa de la sensación agradable se dejó llevar.

Emiliano la cargo con cuidado entre sus fuertes brazos asta la habitación, aún con sus labios unidos.

La acaricio con delicadeza, y despacio la despojó de su vestido.

Esa noche fue increíble.

Sienna nunca imagino que aquel acto podía ser tan placentero.

Emiliano la trato con tanto cuidado. Como si fuera una flor frágil que temía romper.

Beso, cada centímetro de mi piel.

¿Acaso esto es hacer el amor?

Por la mañana Sienna se despierta desconcertada.

Golpea sus mejillas para asegurarse de que lo sucedido no fue un simple sueño.

Siente el crujir de la cama y unos fuertes brazos rodean su cintura.

__ ¿Tan temprano y ya deseas volver a repetir?

¿Emiliano, porque aún está aquí?

Porque ese hombre todavía permanecía junto a ella era aún más sospechoso.

Siempre después de satisfacerse, Emiliano abandonaba la habitación sin mirar atras, sin importarle el estado en el que ella se encontraba.

¿Qué es lo que está pasando? ¿Acaso mori?

Sienna que observa como Emiliano solo hablaba entre sueños, se baja con cautela de la cama.

Para no perturbar el plácido sueño de aquel hombre.

Apresurada se da una ducha, para luego comenzar con sus quehaceres domésticos.

En su mente recuerda cada momento vivido de la noche anterior. Las caricias apasionadas, los suaves besos dejados en su piel.

Siente como de la nada sus bragas se mojan.

__ Oh que me está sucediendo este día.