Alessandra creía que estaba sola en el mundo, pero nunca se dio cuenta de que siempre estuvo rodeada de personas que la amaban. Ahora, como Diana, debe averiguar como llegó a este mundo, y en el camino aprender a expresar y defender el amor que siente por los que la rodean.
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Una competencia que no lo es
Esta es la primera vez que William ve sonreír de manera tan franca a Diana, vaya, luce muy hermosa así… pero ¿quién la está ayudando a subir al carruaje? Nunca había visto antes a ese tipo… debe ser un mozo del Duque… sí… sólo un mozo… ese tipo no es nadie importante, ella sólo tiene ojos para él… jamás pondría sus ojos en alguien tan insignificante como ese mozo.
Poco a poco, vio cómo se alejaba el carruaje que llevaba a Diana de regreso a su casa, pero ¿por qué se quedó mirando al carruaje partir? Se preguntaba William, ella no es importante, no es nadie… será mejor regresar al Palacio, seguramente su padre lo buscará para preguntarle su avance con esa chica, pero qué reportará, si al final no la vio sino hasta la salida… hey, un momento… ¿por qué sólo la vio al partir? ¿Dónde estuvo todo el día?
En ese momento, su cochero llegó y, sin dudarlo, se subió… tiene mucho qué pensar… ¿Por qué no se acercó a él en todo el día? El semestre pasado, cuando inició el ciclo escolar, ella lo esperó por más de una hora para conocer su horario y se aseguró de tomar las mismas clases… entonces… ¿dónde se metió hoy? Acaso ¿sobornó a los maestros? ¡¡¡Aaaagghh, nooooo…!!! ¡¿por qué estuvo pensando en ella todo el día?! Se recriminó el Príncipe.
En el Palacio
Isabel de Ares: (Inquieta y curiosa) Hola hijo, ¿la viste hoy? ¿Cómo está Diana? Yo no he podido verla y el Duque me pidió que no la mandara llamar hasta su regreso a la escuela… estoy muy preocupada por esa niña…
William Ares: (Molesto) Mamá, no la vi en todo el día… no acudió a clases, no sé dónde se metió y tampoco hablé nada con ella. Sólo la vi de lejos cuando se fue… (cerró fuertemente su puño sólo de recordar la sonrisa que le dedicó al mozo que la acompañaba… y se preguntaba ¿por qué nunca le sonrió a él así?)
Isabel de Ares: En serio… ¿no están en el mismo grupo? A lo mejor estuvo todo el día en exámenes. Hoy hablé con el Duque y me comentó que tras reportar en la escuela lo de su memoria, le recomendaron hacerle una serie de pruebas para determinar si sigue en el curso o si mejor se reincorpora el próximo año. Él dice que ha estudiado mucho porque no recuerda nada, inclusive le puso nuevamente profesores para que la guiaran.
William Ares: (Suspiró sin darse cuenta) Claro… debía ser uno de los profesores… seguramente es tan tonta que no la dejaron regresar a la escuela y por eso esperó hasta verme salir… como siempre… aunque no entiendo por qué no se acercó a saludarme (hablaba William más para él mismo que con su madre, lo cual ella notó de inmediato).
Isabel de Ares: Bueno, resuelto el misterio, si te pregunta tu padre dile lo que me comentaste, que no la viste en todo el día, y no hagas suposiciones de que la niña no tiene el nivel para quedarse a estudiar en la academia… sólo dile los hechos, no las historias que te haces en la cabeza…
En el Ducado Donnelly
El Duque esperaba en la puerta a Diana para recibirla y saber cómo le fue en su primer día en la escuela, estaba especialmente ansioso por saber si ella se había encontrado con el Príncipe.
Diana: Hola papacito (ella determinó decirle así con el doble sentido de que le gusta y es, literalmente, el padre del cuerpo que habita) no esperaba verte al llegar.
Duque: Siempre que estoy aquí te espero para saber cómo te fue en el día y hoy era muy especial, mi bella princesa. ¿Cómo estuviste? ¿Tuviste algún problema? ¿Qué tal los exámenes?
Diana: Ah, qué bueno que lo mencionas. Te mandaron esto de la dirección y dijeron que quieren vernos mañana a ambos a primera hora.
El Duque leyó el documento mientras entraban a su casa y se dirigían al salón. Al terminar, solo alzó la cabeza y miró más que orgulloso a su nueva hija.
