9. Yu

Habían pasado semanas desde que Daoming empezó en el club de atletismo. A veces iba a observarlo correr, mientras que otras sólo lo esperaba en el auto después de sus prácticas.

Yo había cancelado todas mis aventuras con Jin y las otras chicas. Sabía que Daoming también había dejado atrás sus propios encuentros casuales, pues casi no tenía tiempo libre entre sus clases universitarias, actividades del club y regresar a casa.

Nuestra relación se había vuelto más cercana en este tiempo. Pasábamos las tardes juntos en casa, ayudándonos con tareas o simplemente charlando de todo un poco. Era un cambio agradable a la distancia que solía haber entre nosotros.

Aunque nunca hablábamos directamente de eso, ambos entendíamos que estábamos cultivando una conexión más profunda. Las miradas prolongadas y roces ocasionales entre nosotros lo dejaban claro.

Una tarde, después de recoger a Daoming de su práctica, noté que cojeaba ligeramente al caminar.

—¿Estás bien? Te ves adolorido,— le pregunté con genuina preocupación.

—Sí, no es nada. Sólo un mal estiramiento,— respondió restándole importancia.

Ya en casa lo convencí de que me dejara masajearle la pierna lastimada. Quería ayudarlo, y secretamente ansiaba una excusa para tocar su cuerpo.

Con delicadeza fui presionando su pierna, sintiendo el firme músculo bajo mis manos. Daoming se quejaba suavemente, pero no me pidió que me detuviera.

Eventualmente mi masaje se volvió una suave caricia que subió por su muslo. Daoming exhaló entrecortadamente pero no opuso resistencia.

En mi teléfono sonó con un mensaje del grupo familiar. Decía que este fin de semana nos reuniríamos para celebrar el cumpleaños de una de mis tías.

Le comenté la noticia a Daoming cuando nos separamos para recuperar el aliento.

—Deberíamos ir al centro comercial a comprar algo de ropa nueva para la reunión—.

Pero Daoming frunció el ceño y pareció reticente. Recordé entonces que él y mi tío, nunca asistían a eventos familiares. No estaba seguro por qué, pero parecían ser los únicos excluidos de nuestro extenso clan.

—No estoy seguro si debería ir...— respondió Daoming evasivamente.

—Vamos, será divertido. Hace tiempo que no veo a todos, te gustaría la comida— insistí, aunque sabía que algo ocurría entre ellos y el resto de la familia.

Daoming permaneció en silencio, claramente debatiendo qué hacer.

Finalmente dijo:

—Está bien, vamos de compras. Pero si las cosas se ponen incómodas en la reunión, no dudaré en irme.

Asentí, satisfecho de haberlo convencido. Tal vez esta fuera una oportunidad para limar asperezas y unirnos más como familia. Lo quedé mirando por un segundo y después negué con la cabeza, estaba cruzando los límites de nuevo.

—Iré a preparar el auto para que podamos ir al centro comercial—.

Daoming me miró confundido pero no dijo nada. Me sentí como un cobarde por retirarme así, pero era lo mejor. Tenía que poner distancia entre nosotros antes de cometer una locura.

Acomodé el auto en silencio, reprendiéndome mentalmente por casi cruzar esa delicada línea con mi propio primo. También debía buscar un buen regalo de cumpleaños para mi tía.

Una vez dentro del vehículo, dejé caer mi cabeza sobre el volante, liberando toda la frustración y tensión sexual que sentía.

—Contrólate, Yu. Daoming es tu familia, tu sangre,— me dije a mi mismo. No podía permitir que este enfermizo deseo arruinara la relación con una de las personas más importantes en mi vida.

Respiré hondo varias veces hasta calmarme. Luego le grité a Daoming que ya era hora de irnos. Lo mejor sería distraerme eligiendo algo bonito para mi tía y fingir que este momento de debilidad nunca ocurrió.

***

En el centro comercial, Daoming y yo nos pusimos a buscar un buen regalo para mi tía Xing. Pero noté que Daoming se veía incómodo y distraído.

—Oye, ¿te pasa algo?— le pregunté.

Daoming dudó un momento antes de responder. —La verdad es que no conozco tanto a la familia. Apenas la vi un par de veces cuando era niño y visitábamos la granja familiar.

Eso me sorprendió. Sabía que mi tía Xing era una mujer muy agradable y cariñosa. Pero tenía sentido que Daoming no la conociera bien, ahora que lo pensaba.

—Es raro que no hayan tenido más contacto todos estos años.

Me explicó que de vez en cuando iban mis abuelos y mi padre a la granja, pero ninguno de mis otros tíos. Era como si hubiera una separación entre las dos ramas de la familia.

—¿Ustedes nunca recibieron otras visitas en la granja cuando eras pequeño?— pregunté con curiosidad.

Daoming negó con la cabeza.

—No, casi siempre estuviste mi padre y yo en la granja. El resto de la familia parecía mantener las distancias. También fue una sorpresa cuando mi padre dijo que me mudaria contigo, apenas te recordaba.

Era extraño. Se suponía que éramos una gran familia unida, pero claramente había grietas entre nosotros que no comprendía.

Seguimos buscando un obsequio adecuado, pero una creciente incomodidad se había instalado. Esa reunión familiar probablemente destaparía tensiones ocultas desde hace mucho.

Tras pensar en las divisiones familiares, traté de tranquilizar a Daoming.

—No te preocupes, ya verás que todos en la reunión son bastante agradables. Nos la pasaremos bien—.

Para reconfortarlo, pasé mi brazo alrededor de su hombro en un semi-abrazo. Pero al cruzar mi mirada con la suya, la cercanía de nuestros cuerpos me puso nervioso.

Podía sentir el calor que irradiaba y el suave aroma de su piel. Tuve que luchar contra el impulso creciente de acercarme más y probar el dulce néctar de sus labios.

Aparté mi brazo rápidamente, fingiendo interés en un estante cercano. No podía permitirme tener estos pensamientos, por muy fuerte que fuera la atracción.

Éramos primos y cruzar esa línea sería un error. Un error tentador, prohibido, pero error al fin y al cabo.

—Eh...creo que ya encontré el regalo perfecto para mi tía,— dije para cambiar de tema, señalando un bonito brazalete.

Daoming asintió en silencio. Ambos comprendíamos sin palabras lo complicada que se estaba volviendo nuestra relación. Pero mientras existiera algún lazo de familia entre nosotros, tendríamos que conformarnos con la amistad y nada más.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***