El sonido del timbre me despierta después de un tiempo. Me froto la cara y me levanto, mientras que el timbre vuelve a sonar.
-Ya voy- respondo, aunque sé que no pueden escucharme del otro lado.
Mierda, me quedé dormido con el uniforme puesto. Pienso, mientras abro la puerta, sabiendo que del otro lado probablemente esté Ángel.
-Te demoraste- acusa, haciendo un mohín.
-Estaba dormido- respondo, dejándola pasar.
-¿En serio? Pensé que habías llegado recién- dice, tomando asiento en el sofá.
-Salimos temprano. ¿Quieres algo de tomar?- pregunto, tomando un jugo desde el refrigerador para mí.
-No, gracias. ¿Quieres que ponga una película?- pregunta, jugando con el control.
A veces me dan ganas de decirle que simplemente vea películas en su propia casa. Sin embargo, me callo una vez más.
-No quiero- respondo honestamente. No tengo ganas de ver malas películas de terror.
Me siento en el sillón, arrepentido de haber abierto la puerta para empezar, cuando no estoy de buen humor. Si no fuera porque acababa de despertar y estaba aún medio dormido, no lo hubiera hecho.
-¿Qué quieres hacer entonces? ¿Quieres jugar a algo?- pregunta Ángel, mientras se saca su suéter y queda en un apretado top que deja al descubierto todo su estómago y marca su gran delantera.
Suspiro, internamente sin sorprenderme. Acostumbrado a sus intenciones no tan sutiles.
-Me sé un juego muy entretenido que podríamos jugar tú y yo- dice, parándose y acercándose a mi sillón.
-No estoy de buen humor hoy Ángel, quizás deberías volver mañana- empiezo, tratando de parar esto y pensando en que debí hacer dicho que sí a la película después de todo.
-¿Qué sucede? Por qué no me cuentas que te pasa. Sabes que yo estoy aquí para ti y me puedes contar tus problemas, así como yo te cuento los míos- ofrece, poniendo una expresión comprensiva, mientras llega frente a mí.
-No es nada importante, simplemente no me encuentro bien hoy.
Me pregunto que expresión pondría si le digo que estoy enamorado de alguien más.
-Pobre, pero no te preocupes, yo te haré sentir mejor- declara y se sube a horcajadas sobre mis piernas, sorprendiendome.
Qué…
-Ángel…- empiezo, intentando no reaccionar al sentirla tan cerca o por el contrario, no tirarla al suelo. -Creo que deberías bajarte.
-Te dije que te ayudaría a sentirte mejor- repite y descaradamente se remueve sobre mis piernas. Luego se abraza a mi cuello y cuando intenta ir por un beso, a duras penas logro esquivarlo.
-Ángel- llamo más duramente, con los dientes apretados. Pero ella haciéndose la desentendida, me besa el costado del cuello.
Mierda. Qué es esta manera de probar a un adolescente.
-Te quiero- dice, mirándome con expresión exitada.
¿Debería simplemente rendirme? ¿Si estoy con ella me sentiré menos solo?
Esos pensamientos patéticos corren en mi mente, mientras Ángel vuelve a besar mi cuello, esta vez, sin embargo, siendo su beso demasiado baboso, lo que me hace despertar.
Mierda.
Tomo a Ángel y la levanto de mis piernas, mientras yo también me levanto del sillón.
-Paremos aquí- ordeno.
-Pero…- empieza a protestar, cuando el timbre de la casa empieza a sonar. Ambos miramos hacia la puerta, yo con alivio, ella con molestia.
Voy al sofá, tomo su suéter y se lo doy. -Colócate eso- ordeno, mientras el timbre vuelve a sonar.
-Pero…- intenta protestar nuevamente, pero en lugar de ir a la puerta y atender a la persona que suena insistentemente el timbre por tercera vez, espero que ella se lo ponga. Una vez que lo hace, voy a la puerta, preguntándome quién puede estar tan ansioso.
-¿Si?- pregunto abriendo la puerta, pero al ver a la persona que está al otro lado, me congelo.
-Sí, hola- saluda Lina, viéndose extremadamente nerviosa.
-Hola- devuelvo como un idiota, extasiado con su presencia tan cercana. Es cierto que durante los años nos cruzamos muchas veces en los pasillos, pero nunca estuvo quieta y mirándome de frente como ahora, mucho menos hablándome.
-Esto… Mi tío da clases en un gimnasio, ya sabes, clases de autodefensa y eso… ¿Él me pidió si podía promocionar sus clases?
Que linda. Nunca conocí a alguien que mienta tan mal.
-Así que estás aquí para promocionar las clases de tu tío- digo, examinando detenidamente su cara y expresiones. No muy seguro de si tendré nuevamente una oportunidad como esta.
Parece que llegó corriendo. Pienso, al ver el sudor de su cara.
-Sí, estoy aquí para hacer eso- afirma, esta vez más segura.
-¿Tienes un folleto?- pregunta la voz molesta de Ángel a mi lado.
Oh Dios. Por qué justo tiene que aparecer ahora.
-Las clases son, por ahora, sólo para hombres y no, no tengo, ya que es sólo un favor que me pidieron- responde Lina con expresión y tono sombrío. ¿Qué la hizo cambiar de actitud? ¿Ángel?
-Ya escuchamos, puedes irte ahora- declara Ángel, mientras tienen un duelo de miradas.
-Ángel. Ella está hablando conmigo- digo, molesto. No puedo permitir que la persona por la que suspiro cada día, sea despachada de esa manera. - Además, creo que es hora de que regreses a tu casa.
-Alex, nosotros tenemos que hablar- dice, tomando mi brazo.
-Bueno, tengo que seguir visitando otras casas…- se despide Lina con un movimiento, mientras se da la vuelta, casi huyendo ahora.
-Li…- estoy a punto de llamarla por su nombre, pero me detengo a tiempo. Idiota, casi lo arruinas. -Gracias por la invitación- grito en su lugar. Dándome cuenta de que ella ni siquiera dio el nombre del lugar donde se imparten las clases o cualquier otra información de contacto. Sacudo mi cabeza, sonriendo por lo mala que fue su excusa. Pero entonces, ¿Por qué vino?
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Updated 82 Episodes
Comments
Patty Molina
está enamorada también
2024-06-23
1
indira avila
🤭🤭🤭🤗🤗🤗
2024-05-14
1