Cayendo en cuenta.

No entiendo la gracia de nadar en una piscina, eso es cosa de humanos, acaso ¿no siente el desespero por volver al mar? ¿No tiene miedo de transformarse frente a todos? No, definitivamente es un peligro... en esto pienso preocupado, cuando la mujer más hermosa que haya visto entra en traje de baño al jacuzzi del apartamento, todo se me olvida.

- Eres hermosa, le digo mientras la acerco a mí, para oler su cuello.

- Bueno, muchas gracias, tu también, responde con una sonrisa encantadora. No quise molestarte con lo de la natación, sólo... creí que te gustaría, duda.

- Tú me gustas, le digo sin pensarlo. Y podría hacer lo que tú quisieras, cielo.

- No se trata de eso, me regaña, no quiero que hagas lo que yo quiero sino lo que está en tu corazón, yo te apoyaré, así sea que tenga que hacerle pequeños cambios, para que me guste a mi también, cómo con está casa, dice mirando alrededor, unas flores y plantas verdes la van a rejuvenecer... quizás un perrito. Dice con emoción.

Nos reímos, no la conocía verdaderamente cuando la compré, solo quería tener un lugar cerca de ella que le gustara.

- Está bien, por ahora las plantas, cuando te mudes hablaremos de la mascota.

- ¿Quieres que mi papá nos mate, cierto?

- ¿O podríamos casarnos? Así, estaría más tranquilo.

- Te volviste loco y no avisaste, bromea.

Todo para ella es un juego de novios, para mí es lo que he esperado: pasar la vida con ella.

la abrazo desde atrás y recuesta su espalda en mi pecho. Estamos en el balcón y se ve el cielo claro y la luna brillando a lo alto, surcada por un par de nubes pasajeras.

- Dijiste más temprano que tú energía cambiaba con la luna. Le digo mientras nos relajamos en el agua tibia

- Si, fue en broma, he estado cansada, eso es todo.

- Pero te has puesto a pensar en que podría ser al revés? En qué quizás cambia porque tú le das energía a ella?

- Sería muy egocéntrica si pensara así, no es como si yo fuese el centro de la tierra, además en la luna de hoy, yo solo puedo ver la sonrisa del Gato Risón, a veces me da risa y otras mucho miedo, pero nada interesante.

Se gira y quedamos de frente, me mira con deseo.

- Y hoy te da risa o miedo? Le pregunto viendo sus labios.

- Por hoy, no quiero pensar en la luna. Dice y me besa. Además hay una sola cosa que me gustaría que cambiara cuando yo quiero...

No puedo resistir sus deseos, es como si estuviera diseñado para cumplirlos, lo único que quiero es estar a su lado, cuidarla y que sea feliz, aunque no puedo imaginar mi vida fuera del mar, de ahora en más, donde nos quedaremos será decisión de ella, no importa si descubre o no quien es, yo la acompañaré.

Esa noche fue mejor de lo que jamás soñé y nos unió para siempre.

En la mañana vamos juntos por la universidad tomados de las manos, cuando tres mujeres se acercan a Serena y ella nos presenta, por su olor se que no son humanas y con desagrado oigo que son sus compañeras de equipo. Hay una pelirroja que se presenta como Marina que me mira con ojos curiosos e interesados, más de lo que quiero y hasta intenta tocarme, pero sin éxito, otra de cabello castaño se llama Teles y parece que comparte cuarto con Serena. Estás dos huelen a agua salada, pero que raro, la otra que dice llamarse Pisínoe, luce más pequeña y joven, huele a agua dulce, puede ser? Los mayores decían que ya no existían.

- Disculpa, le pregunto, mientras Serena habla con la pelirroja y la castaña del entrenamiento. -¿De dónde eres?

- Bue bueno, tartamudea, de de no más lejos que ustedes, supongo, responde ella algo temerosa, no logro distinguir si está así por mí, o porque la oigan las demás. Porque claramente todos ahí sabemos lo que somos menos Serena.

- ¿Y que haces por aquí? pregunto seriamente, pienso que si una sirena de río está por una ciudad costera no debe ser por voluntad propia.

- No porque quiera, eso es seguro.

Lo sabía, algo está pasando para que estén confluyendo tantas sirenas en el mismo lugar, primero ví a la bruja y su secuaz, luego a la rubia de cabello largo, y ahora, estás 3. Las Sirenas no salen con frecuencia a la superficie, mucho menos las de río, son demasiado miedosas porque es demasiado arriesgado, y por eso las creen extintas. En cambio, estas mujeres discurren tranquilamente en esta universidad.

- ¿Hay algo en lo que pueda ayudarte? Le digo y me mira con esperanza, y por eso continúo. - Tal vez pueda llevarte con tu familia?

Sus ojos se iluminan, pero somos interrumpidos

- Puedo saber de qué hablan? Dice la pelirroja, poniendo sus manos sobre los dos.

- No, no de nada, contesta Pisínoe.

- Vámonos cielo, o llegaremos tarde a clases, le digo a Serena, que se despide con la mano animada.

En verdad no tiene idea de que son, ni quien es ella, eso la pone en peligro.

- ¿Serena, esas amigas tuyas estudian contigo?

- En sí conmigo no, aunque Teles está en la facultad de ciencias también, si te soy honesta, realmente somos solo compañeras de equipo, no tanto como amigas, la única que considero así es a Estella, el otro día te fuiste y no pude presentartela. Deberíamos invitarla a comer, ¿no crees? Es muy buena persona y si la vieras, es bellísima, aunque todas ellas lo son.

- Podemos ir a comer, pero que quede escrito en piedra que la más bella del mundo para mí eres tú.

- Eres un caramelo, me dice y me besa, con una sonrisa que para mí vale un millón.

- Bueno Cielo, entra a clases ya. ¿Nos vemos al salir?

Así quedamos, nos vemos en el almuerzo pero no veo nada raro, las sirenas no andan merodeando, será que si tiene que ver su reunión aquí con Serena?

En la tarde después de mis actividades voy a la piscina, aún es temprano y dice un portero que la práctica es cerrada, así que me quedo en el lugar de ayer esperándola, ésta vez más cerca de la entrada.

Cuando ya es la hora de salir, se desprende el desagradable olor a bruja, es nauseabundo y viene del recinto de la piscina, me dirijo a la puerta preocupado por Serena, cuando sale la maldita bruja, con su cabello negro como el alquitrán aún mojado, seguida nada más y nada menos que por las otras 4 sirenas y detrás de ellas sale Serena y una rubia que solo he visto de lejos. Quedo paralizado justo en frente de ellas, 7 sirenas juntas, esto es el equipo de natación de esta universidad? Un aquelarre de Sirenas?

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