Capítulo 16

¿Y bien? – preguntó Ethan con los brazos cruzados y un tanto desesperado, el médico había estado mirando por mucho tiempo ese lugar, comenzaba a molestarse por el hecho de que alguien más pudiera ver lo que ahora era solo suyo.

- Todo perfecto, disculpe si mi indiscreción le afecto, es la primera vez que observo algo tan perfecto; el aroma que emite es bastante sutil, pero es perceptible, la sensación, la textura, es cómo si hubieran creado a un omega perfecto señor.

- Lo sé, pero no pregunté eso.

- Mis disculpas, ella es blanca, señor.

- Gran trabajo.

La sonrisa de Ethan adornó su rostro, Danna cerró las piernas y bajó su vestido, era la primera vez que se sentía tan humillada; las lágrimas de impotencia y rabia comenzaron a correr por sus mejillas.  Nadie, ni siquiera Marisa, merecían ser humillados de esta forma.

Danna salió llorando del cuarto, abrazándose a sí misma para poder sentirse segura, detrás Ethan sosteniendo sus hombros de una manera posesiva, estaba tan feliz que no podía esconder la emoción en sus pantalones.

Con la mercancía ya separada, Ethan no tuvo más que hacer por ese día con ellos, por lo que ordenó darles algo de comer antes de mandarlos a dormir, al día siguiente a primera hora después del desayuno y un buen baño comenzarían con las fotografías y vídeos para poder subastarlos, allí comenzaría la retribución del dinero invertido en ellos.

Realmente había tenido la suerte de poder poseer un espécimen realmente formidable, sin lugar a dudas, todos le tendrían envidia; esperaba que se llevara bien con el resto de su colección; después de todo, ser el único alfa con suficiente poder como para poseer los especímenes más raros era un privilegio que solo él podía merecerse.

Danna, por su parte, comenzaba a perder la esperanza de ser rescatados, ya había visto a Ethan hablar con varias personas por teléfono y alguna que otra ir al lugar para “echar un vistazo” y de esa manera apartar a cualquiera de sus compañeros.

- No te arrepentirás, sabes que siempre tengo objetos de calidad. – Ethan estrecha su mano con firmeza mientras regala una sonrisa llena de confianza.– Ethan estrecha su mano con gratitud.

- Eso lo tengo seguro… pero tengo curiosidad… esa niña que tienes detrás de ti, ¿Es nada más exhibición o podemos probar un poco? – preguntó lamiendo sus labios con avidez, el cuerpo de Danna después de la marca había cambiado un poco, a pesar de ello, Ethan jamás quitó sus gafas y sus vestidos tenían mucha más tela del que usualmente tenían los objetos en venta.

Danna dio un paso atrás cuando observó los ojos de Ethan y no pudo descifrar lo que pensaba.  El hombre la mirada de una manera tan incómoda; podía sentir todo lo que deseaba hacerle con únicamente mirar esos ojos brillantes, inconscientemente cubrió su pecho; estaba segura de que en cualquier momento tendría que acompañar al hombre.

- Lo lamento, pero ella no está a la venta, es parte de mi colección personal.

- Oh, vaya.  Es una lástima, una piel tan blanca y suave, unos ojos grandes e inocentes.  Es demasiado tentador.  – Danna pudo ver cómo aquel hombre relamía sus labios en una mueca que le pareció repugnante.

Ethan contuvo su molestia hasta que el invitado se marchó; no sin antes tocar los glúteos de Danna en un gesto grosero; la joven temía que en algún momento las cosas se saldrían de control, rogaba a cada santo que conocía que un milagro apareciera, pero no parecía que ese fuera a ser el caso.  Si solo hubiera tenido contemplado este tipo de situaciones en su mente, quizás Mario le habría ayudado a pensar en una contramedida.

Al paso con el que iban, toda la mercancía podría ser vendida antes de fin de mes; aun así, su equipo ya se encontraba buscando nueva mercancía, ya fuera en solitario o en grupos como el de Danna.

Las chicas que fueron catalogadas como “usadas” fueron colocadas en los antros locales, mismos que estaban bajo el control de Ethan; varios de sus compañeros no volverían a sus casas con sus padres.

El grupo de jóvenes omegas había bajado de manera considerable, ya había recuperado el dinero invertido en su captura, además de tener un buen porcentaje de ganancia; este grupo era sin lugar a dudas uno de los mejores que ha conseguido hasta el momento; no solo por una importante adquisición para su colección, sino por la calidad de los omegas adquiridos.

Sonia no tuvo oportunidad de hablar nuevamente con Ethan, estaban por llevarla a un bar local, Danna procuraba estar presente para poder despedirse de sus compañeros, esperaba que le dieran alguna pista para ir por ellos más tarde o quizás darle a alguien la información necesaria para ir por ellos algún día.

- Danna, ¿Podrías decirle al jefe que quieres que me quede contigo? – suplicó Sonia cuando los sacaron de su celda.

- No creo que me haga caso, pero le diré…

- A ti te trata como algo especial, te hará caso, estoy segura.

Danna no sabía si las palabras de Sonia eran ciertas; sin embargo, valía la pena intentarlo, temía las consecuencias de pedirle un favor a Ethan, ya que su comportamiento era algo irregular; podía ser dulce y tierno o un ser humano sin corazón capaz de dañar la integridad física y moral de otra persona.  No obstante, su amiga la necesitaba, Tania seguía en espera de una persona que quisiera adquirirla, por lo que aún tenía tiempo para salvarla.

- Ethan… - llamó en un susurro cuando estaban haciendo el conteo y colocando un collar rastreador a los omegas antes de meterlos en la camioneta rumbo a lo que sería su nuevo hogar.

- Dime querida.

- ¿Podría quedarme con Sonia y Tania? Por favor.

Ethan alzó una ceja, tomó la barbilla de Danna quien miraba apenada al suelo esperando el rechazo, tuvo que mantener contacto visual con Ethan durante un largo minuto; Ethan sonrió y le dio un beso en la frente.

- Parecen ser importantes para ti.

- Lo son, son mis únicas amigas, haría lo que fuera por protegerlas.

- ¿Cualquier cosa? – la mirada de Ethan escondía algo que Danna no supo interpretar.

- Lo que sea.

- JK dame a la número 69 y la subasta 84, desde hoy estarán bajo mi servicio.

- Como ordene, señor.

Danna no pudo evitar sonreír, realmente se sentía un poco aliviada, por lo menos había podido salvar de un destino horrible a sus amigas y podrían estar juntas nuevamente; no sabía el significado real de la sonrisa victoriosa de Ethan cuando trajeron a sus amigas.  Sonia sonrió ampliamente, ahora podría estar cerca del jefe y era muy probable que pudiera pedirle que borrara la marca.  Tania por su parte se sentía angustiada, la mirada que Ethan coloco sobre Danna no presagiaba nada bueno, sus sospechas se confirmaron cuando colocó la mano en su cintura de manera posesiva y la obligó a besarlo.

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