En el mundo del crimen, Aurora De Luca era un nombre temido. Como líder de la organización mafiosa más grande de Europa, era conocida como una mujer sin miedo, fría y despiadada. Sin embargo, en una traición brutal, fue asesinada por alguien en quien confiaba.
Al abrir los ojos, Aurora descubre que está en el cuerpo de una estudiante de 17 años llamada Elena Zhao, una joven débil que siempre ha sido víctima de abusos. Elena proviene de una familia adinerada, pero es tratada como basura por su padre, que solo quería un hijo varón, por su cruel madrastra y por sus hermanastros llenos de odio. En la escuela, es constantemente acosada por sus compañeros, mientras que su prometido, quien debería protegerla, la humilla públicamente.
Pero Elena ya no es la chica débil y fácil de pisotear. Con el alma de la Reina de la Mafia dentro de su cuerpo, jura vengarse de todos los que le han causado daño.
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Capítulo 10
Después de un largo día en la escuela, Aurora regresó a la casa de la familia Zhao. La enorme mansión parecía majestuosa por fuera, pero para ella, este lugar no era más que una jaula dorada llena de serpientes venenosas.
Antes, Elena Zhao siempre entraba con la cabeza gacha, esperando que nadie la notara.
¿Pero ahora?
Aurora entró con la cabeza en alto.
Tan pronto como cruzó la puerta principal, la voz de Liu Mei sonó bruscamente.
"¡Elena, ven aquí!"
Aurora se giró y vio a su madrastra sentada en la sala de estar, acompañada por Zhao Ren.
Las expresiones de ambos no eran amigables.
¿Pero no era eso lo habitual?
Sin dudarlo, Aurora se acercó y se sentó despreocupadamente en el sofá.
"¿Qué pasa?", preguntó sin rodeos.
Liu Mei chasqueó la lengua. "Tu actitud es cada vez más irrespetuosa".
Aurora solo la miró fijamente. "Solo estoy aprendiendo de ustedes".
El rostro de Liu Mei se endureció.
Zhao Ren, que estaba sentado a su lado, sonrió con cinismo. "¿Crees que después de ser un poco valiente, puedes enfrentarte a nosotros? No olvides que sigues viva gracias a la misericordia de la familia Zhao".
Aurora soltó una risita. "¿Misericordia?" Lo miró fijamente. "¿Estás seguro de que quieres llamarlo misericordia?"
Zhao Ren se encogió de hombros. "Lo que sea que pienses. Pero una cosa es segura: no voy a permitir que actúes como quieras en esta casa".
Aurora se recostó en el sofá. "¿Y cómo vas a detenerme?"
Zhao Ren apretó el puño. "No me desafíes, Elena. Sabes las consecuencias".
Aurora solo sonrió levemente.
Zhao Ren a menudo usaba amenazas de violencia para reprimir a Elena en el pasado.
¿Pero ahora?
Aurora no se quedaría callada.
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La prueba de Liu Mei
Después de un momento tenso, Liu Mei finalmente volvió a hablar.
"Ya has causado suficiente revuelo en la escuela", dijo bruscamente. "¿Quieres avergonzar aún más a esta familia?"
Aurora la miró sin expresión. "¿Te importa la reputación de la familia Zhao?"
Liu Mei levantó la barbilla. "Por supuesto".
Aurora sonrió torcidamente. "Qué gracioso".
Liu Mei entrecerró los ojos. "¿Qué quieres decir?"
Aurora se encogió de hombros. "No te importó cuando tu hijo me torturaba. No te importó cuando la gente en la escuela insultaba a la 'hija' de la familia Zhao. Pero ahora, después de que empiezo a defenderme, ¿de repente te importa?"
Liu Mei se quedó en silencio por un momento, pero luego su rostro se volvió cínico.
"¿Crees que solo porque puedes hablar un poco más bruscamente, puedes cambiarlo todo?"
Aurora se cruzó de brazos. "No necesito cambiarlo todo. Solo necesito controlar lo que tengo delante".
Liu Mei entrecerró los ojos. "Bien, entonces veremos hasta dónde puedes llegar".
Aurora pudo adivinar que esta mujer estaba planeando algo.
Pero eso no importaba.
Lo que sea que Liu Mei planeara, ella estaba lista para enfrentarlo.
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Una cena llena de tensión
Cuando llegó la hora de la cena, el ambiente en la mesa era mucho más silencioso de lo habitual.
Zhao Lian, el cabeza de familia Zhao, estaba sentado en la cabecera de la mesa con una expresión neutral.
A su lado, Liu Mei mostraba un rostro tranquilo, pero sus ojos estaban llenos de cálculos.
Zhao Ren solo guardaba silencio, pero de vez en cuando miraba a Aurora con una mirada llena de odio.
Aurora se sentó en su lugar habitual, disfrutando de su comida sin verse perturbada por el ambiente tenso que la rodeaba.
Sin embargo, sabía que la estaban observando.
Después de un rato, Zhao Lian finalmente abrió la boca.
"Elena".
Aurora arqueó una ceja. "¿Sí?"
Zhao Lian la miró fijamente. "He oído que estás causando problemas en la escuela".
Aurora sonrió levemente. "¿Problemas?"
Liu Mei intervino: "Hizo que Shen Yue fuera humillada. Toda la escuela está hablando de ese incidente".
Aurora no negó ni confirmó.
Solo miró a Zhao Lian con calma.
Zhao Lian suspiró. "¿Qué estabas haciendo?"
Aurora dejó sus palillos. "Solo estaba haciendo lo que tenía que hacer".
Zhao Lian la miró profundamente. "¿Y crees que fue una decisión sabia?"
Aurora se recostó en su silla. "Estoy aprendiendo de los mejores".
Zhao Lian no dijo nada durante un rato.
Aurora pudo ver que el hombre la estaba evaluando.
Al final, Zhao Lian solo asintió levemente. "Bien. Estaré vigilando lo que haces".
Liu Mei parecía disgustada con la respuesta, pero no pudo rebatirla.
Mientras tanto, Aurora solo sonrió para sus adentros.
Zhao Lian no era una persona fácil de convencer, pero tampoco era un tonto.
Si veía que Aurora podía ser un activo, no una carga, entonces podría reconsiderar su forma de tratar a su 'hija'.
Y ese era el objetivo de Aurora.
No solo vengarse, sino también controlar la situación en esta casa.
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Desafíos por venir
Después de la cena, Aurora regresó a su habitación.
Sin embargo, antes de que pudiera cerrar la puerta, Zhao Ren entró de repente.
Su rostro estaba lleno de ira.
"¿Crees que puedes jugar con nosotros?", dijo en voz baja.
Aurora lo miró fijamente. "No estoy jugando. Solo estoy haciendo lo que tengo que hacer".
Zhao Ren apretó los dientes. "Te arrepentirás".
Aurora sonrió fríamente. "Sigues amenazando, pero nunca haces nada. Es gracioso".
Zhao Ren apretó el puño, pero no pudo hacer nada.
Porque ahora, ya no tenía control sobre Elena Zhao.
Y él lo sabía.
Aurora cerró la puerta con calma, dejando a Zhao Ren de pie con una expresión frustrada.
Ella sabía que esto no había terminado.
Pero eso no importaba.
Porque Aurora estaba lista para el próximo desafío.