El MAFIOSO ITALIANO.

En el cuarto negro…

Ya habían pasado dos horas desde que esos 5 hombres empezaron a hacer su trabajo, las cosas estaban muy tensas en el ambiente,nadie decía o hacia algo solo se dedicaban a mirar en el despojo en el que se ha convertido la persona colgando en el techo.

Alessandro: Ya es suficiente, pueden retirarse.

Los hombres salieron tan rápido como pudieron del lugar.

Ahora será mi turno de divertirme.

Dijo Alessandro con una sonrisa macabra levantándose de su

silla.

Leonardo sabía lo que vendría asi que sin que se lo pidieran

fue por el juego de cuchillos de Alessandro.

Hombre #2: Por favor señor, le suplico su perdón.

Alessandro con una sonrisa en los labios se le acercó a su

oído y le dijo algo, el hombre se quedó quieto después de lo que le dijo Alessandro.

Alessandro: Si me dices lo que quiero prometo ser misericordioso con tu miserable vida.

El hombre se quedó callado.

Bueno si es lo que quieres esta bien, no pienso preguntarlo

una vez más, de alguna manera lo sabre.

Alessandro comenzó a hacer cortes por todo el cuerpo y los

gritos fueron el centro de todo el lugar y no se detuvo hasta que el hombre dejo de gritar porque ya no tenia fuerzas para hacerlo, había sangre por todos lados y para finalizar saco su arma y le dio un tiro en la cabeza.

Alessandro: Esto es para que les quede claro a todos lo que

pasa si me traicionan o se meten con personas que no deben, saquen a esta basura y quiero que se lo den de comer a los perros.

Hombres: Si señor.

Después de terminar salió del lugar para darse cuenta de que

ya se estaba oscureciendo.

Leonardo: ¿Qué fue lo que le dijiste?

Alessandro: El fue quien drogo a Martin y durante el viaje

me di cuenta como veía a Alice por eso fue mi advertencia por eso fue que cuando lo vi en la habitación de Alice ya sabia cual iba a ser su destino, ese hombre tenia 2 años trabajando en nuestra organización, le dije que si me decía quien lo había enviado le daría una muerte rápida, pero aun asi no quiso y

bueno ya ves como termino.

Quiero que investigues a todos los hombres de la organización,

usa a tus hombres de mayor confianza para eso, no quiero errores Leonardo

quieren meterse en mi organización y no lo vamos a permitir, esos bastardos van a caer y sufrirán las consecuencias de meterse con la camorra.

Leonardo: No te preocupes amigo, vamos a acabar con esos

bastardos y le tendrán más miedo a la camorra.

Ahora ve a bañarte parece que vienes de un apocalipsis

zombie.

Alessandro: Mi mama me dijo algo similar, a veces pienso que

eres más hijo de ella que yo.

Leonardo: Fuimos criados juntos y tambien fuimos regañados

juntos, por eso más que tu mano derecha me siento tu hermano.

Alessandro: Y lo eres, eres una de las personas a la que le confiaría

mi vida.

Leonardo: Creo que voy a llorar.

Alessandro: Llora para saber si esos ojos pueden llorar.

Leonardo: No lo sabrás nunca, me voy a hacer lo que me pediste, tenemos que acabar con esa fuga lo más rápido posible.

Alessandro: Esta bien.

Cada uno se fue por su lado, Alessandro al entrar a la casa

fue directo a su habitación y se dio una ducha, al salir se puso un pantalón de pijama y asi bajo al comedor pues ya era la hora de la cena.

Al llegar al comedor se encontró con que Alice estaba

hablando con su mama, pero al verlo dejaron de conversar.

Alessandro: ¿Hablaban de mí que dejaron de hablar?

Mama de Alessandro: Por

favor, no eres tan interesante le decía a Alice que la voy a cambiar de habitación por que la puerta esta rota y no es bueno que duerma asi, pero hay un problema.

Alessandro: ¿Que ocurre? ¿No hay más habitaciones?

Mama de Alessandro: Claro que hay más habitaciones, pero en

el tercer piso.

Alessandro: ¿Que paso con las otras dos del segundo piso?

Mama de Alessandro: Después que te fuiste en tu último viaje

estaba aburrida aquí en casa asi que hice de esas habitaciones mi closet.

Alessandro no dijo nada mas, pero no tenia buena cara.

Alice: Si es mucho problema, no hay algún lugar afuera yo me

puedo acomodar en cualquier parte no quiero ser una carga para nadie.

Alessandro: No, esta bien que duermas en el tercer piso.

Tranquila no molestas, es solo que en ese piso solo duermo yo.

Mama de Alessandro: Daré la orden para que pasen tus cosas Alice.

Alice: No por favor yo misma lo hare ya han hecho mucho, yo

misma puedo mover mis cosas solo díganme cual es la habitación y listo.

Mama de Alessandro: Esta bien querida después de comer Alessandro te dirá donde dormirás, ese piso es solo de él asi que yo no puedo decidir.

Alessandro se dio cuenta de lo que su madre quería hacer,

pero no le iba a dar el gusto de hacer sentir mal a Alice creyendo que le incomoda.

Alessandro: Claro, yo te diré donde vas a dormir asi que no

tienes nada de qué preocuparte, después de la cena te indicare cual será tu nueva habitación.

Alice: Muchas gracias señor Alessandro.

Alessandro: Por favor no me digas señor no soy un viejo.

Alice: Pero es por respeto.

Alessandro: Vamos a hacer algo aquí en casa me llamas Alessandro

y fuera me llamas señor, ¿te parece?

Alice: Si.

Alessandro: Bueno ahora vamos a comer.

La comida fue muy tranquila y la conversación muy amena al

terminar de comer la mamá de Alessandro se fue primero con excusa de que estaba cansada.

Alessandro: Vamos para mostrarte tu nueva habitación.

Alice asintió y lo siguió obedientemente, al llegar al tercer

piso se dio cuenta que no había tantas puertas solo habían 3.

Alessandro: Esta será tu habitación, la habitación que tienes

al lado es la mía, los balcones están conectados por una reja.

Y por que la curiosidad te puede ganar, en el otro cuarto

guardo armas en caso de una emergencia en medio de la noche.

Alice: Muchas gracias, voy por mis cosas.

Alessandro: Te ayudo para que no hagas tantos viajes por las

escaleras puede ser muy cansado.

Alice acepto la ayuda de Alessandro y ciertamente con su ayuda subir las cosas fue muy rápido solo faltaba subir a Alex.

Ella bajo por el minino y al regresar ya todo estaba en su habitación.

Alice: Gracias señor, acabe mucho más rápido con su ayuda.

Alessandro: ¿Que te dije Alice?

Alice: Gracias Alessandro.

Es que se siente raro nada más de

llamarlo por su nombre, será cuestión de acostumbrarme.

Alessandro: Ya te acostumbraras, cualquier cosa me tocas la puerta no te preocupes por la hora.

¿Sí?

Alice: Gracias.

Ella entro a su habitación y el

entro a la suya, ella se puso a ordenar algunas cosas en su closet mientras que Alex la veía desde la cama.

Alice: No puedo creer lo que ha

cambiado nuestra vida Alex, tenemos un cuarto acogedor en donde no tenemos que preocuparnos por qué entren a mitad de la noche.

La brisa se volvió mucho más

fuerte y al salir al balcón pudo ver que el cielo estaba repleto de nubes y los truenos empezaron a hacerse presentes.

Mejor cierro la puerta para que se

escuche menos, espero que no sea una noche tenebrosa Alex, que bueno que te tengo así no me siento sola.

Ella se acostó en la cama y dejo la

luz de la mesita de noche encendida, los truenos no la dejaban dormir tenia miedo, pero tenia que ser fuerte y obligarse a dormir, el pequeño gato le hacía compañía, pero aun asi no lograba dormir.

Mientras tanto Alessandro estaba

dando vueltas en su cama y no precisamente porque les tuviera miedo a los truenos.

Alessandro: Alice ¿estará bien? Tendrá miedo con estos truenos que parecen que van a acabar con el cielo.

De pronto se fue la luz después que

un rayo cayo muy cerca, Alessandro tomo su arma de la mesa de noche y salió de su habitación y sin tocar entro a la habitación de Alice.

Alessandro: Alice, ¿estas bien?

Alessandro prendió la linterna de

su celular y alumbro toda la habitación para ver como la pobre de Alice estaba echa bolita en la cama.

Alice: ¿Puede definir bien?

Alessandro: Ya no importa, ¿quieres

que me quede aquí contigo?

Alessandro sabia que hacer esas

preguntas eran un arma de doble filo, él sabía que tenía un sentimiento por Alice desde la primera vez que vio esos hermosos ojos color café claros, sentía que

se perdía en otro mundo al verla a los ojos, pero la parte masoquista decía que no merecía ser feliz y mucho menos con Alice que es un haz de luz en medio de su oscuridad.

Alice: Si, por favor.

Y ahí iba Alessandro a acostarse en

ls cama con una mujer que lo atraía más allá de lo sexual y que solo quería protegerla.

En su mente solo había una

pregunta que, aunque sabia la respuesta no quería responderse asi mismo.

¿Estoy enamorado de Alice?