El Beso Del Nigromante

Me uni a los entrenamientos feliz de poder compartir mi día con Dereck, mi magia cosquilleaba en mis manos, pero no lograba hacerla salir, aunque sentía la luz brillante y purificadora burbujeando en mi interior, no la lograba hacer salir por mis manos, me desesperaba, mientras Jaden me explicaba lo hacía ver tan fácil que no encontraba la razón por la que para mí era tan difícil, mis hermanos tenían un control de su magia admirable, a mí me estaba costando bastante y no era la única, por qué la oscuridad que había comenzado a salir de a poco de Dereck parecía estarlo atormentando.

Esa noche mientras descansabamos recostados en el jardín del laberinto observé su rostro, sus ojos estaban cerrados y sus labios fruncidos, subí mis manos a su rostro y lo tomé de las mejillas, acaricie su ceño fruncido y una sonrisa suave se poso en sus labios.

.- Has estado con el ceño fruncido desde que llegaste... Te sucede algo?.- el soltó un suspiro suave y me miró.-

.- No se callan, Alexa... Están en mi mente y no se callan nunca, siempre están ahí, gritando y enloqueciendome, están torciendo mis emociones, me siento como un huésped en mi propio cuerpo, mientras más intento controlarlos... Siento que se llevan una parte de mi.- sus manos fueron a mi rostro y me acaricio.- No sé si pueda lograrlo, florecita... Y pensar en eso me aterra.- también me aterraba, el aire abandono mis pulmones y el miedo carcomió mi interior.- que sucederá si los dejos ganar?... Si pierdo la batalla, no quiero perderte... Pero me estoy perdiendo a mí mismo.

Las lágrimas se deslizaron de mis ojos, sus manos limpiaron mis lágrimas con cariño.- por favor no llores florecita, te prometo que seguiré luchando, lo haré por ti, florecita.- enterré mi rostro en su pecho y sollocé.

.- yo no puedo estar sin ti, no puedes dejarme... No te atrevas a dejarme, yo... No puedo... Por favor... No puedes rendirte.- estaba siendo egoísta, lo sabía... Pero que sería de mi vida si el no estuviera, si el se iba... Lo perseguiría, iría a cualquier lugar del mundo y fuera de él por conseguirlo.- Prometiste que te quedarías a mí lado, no te puedes ir.- Sus manos me tomaron del rostro y lo subió hacia el, me miró con lágrimas en sus ojos.

.- Incluso si algún día desaparezco, te prometo que encontrare la forma de volver a ti... Mi dulce florecita, voy a luchar... pero tienes que prometerme que si algún día desaparezco... Vas a esperarme, prométeme que vas a esperarme con una sonrisa en el rostro... Que vas a seguir viviendo hasta que yo pueda llegar a ti... Prometemelo Alexa.-

Porque??. Porque esto se sentía como una despedida?.

.- Necesito que lo prometas, florecita... Necesito escucharlo de tus labios.-

.- lo... Lo prometo... Voy a esperarte.- nos miramos a los ojos, con todo ese amor que nos teníamos, con el miedo al futuro que nos esperaba, a la oscuridad que nos acechaba.

Si el algún día faltaba, yo... Sería capaz de cumplir aquella promesa?...

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Las tardes en las prácticas dejaron de tener ese brillo que al principio tuvieron, estaban manchadas por el miedo y la desesperación, estaba desesperada intentando dejar salir mi magia, pero no podía concentrarme mientras veía a Dereck luchar para dejar salir su oscuridad, mis ojos no querían apartarse de él, temerosos de qué si dejaba de verlo por un segundo, el podía desaparecer, si tan solo yo pudiera controlar mi luz, talvez podría calmar su oscuridad, pero era inútil, no estaba funcionando y me estaba desesperando.

.- Lo estás haciendo mal, Lexa, por Dios te lo he explicado ya más de 5 veces, si dejaras de observar a Dereck como una tonta enamorada podrías lograrlo.- bufe cansada, lo estaba intentando, de verdad lo estaba intentando.

.- Solo admite que eres un mal maestro, tus explicaciónes son una mierda, hasta un bebé podría hacerlo mejor.- las palabras salieron de mis labios y inmediatamente sentí culpa, estaba drenando mi molestia donde no era y con quien no era.

Jaden me miró ofendido y bufo.- entonces anda y pídele a un bebé que te enseñe.- Jaden se dio la vuelta dispuesto a irse y lo tomé de la muñeca rápidamente.

.- No, no te vayas, solo estaba jugando contigo, ya no aguantas nada jay, te estás volviendo viejo.-

.- Viejo yo? Tengo la misma edad que tú tonta.- lo miré con una sonrisa nerviosa en los labios, Jaden no tenía la culpa de mí inexperiencia, de mi falta de concentración, de ninguno de los sentimientos que estaban atormentandome por dentro.

.- Ya dejen la pelea y sigan entrenando.- la voz de celeste nos hizo pararnos derechos en nuestros lugares, el Lycan de mi hermana era serio y terrorífico, su voz ponía tu corazón a latir con fuerza en tu pecho, los dos volteamos hacia ella y bajamos la cabeza en una reverencia.

.- como lo ordene, Reina.- volvimos al entrenamiento, pero mis ojos se fueron hacia Dea, la miré ponerse delante de Dereck, juntar sus manos con las suyas, todos nos quedamos observándolos, me acerque a ellos sin poder evitarlo.

.- Las escuchas?.- las palabras de Dea me hicieron voltear hacia Dereck y un suspiro de sorpresa salió de mis labios, el miedo carcomiendo mi interior, sus ojos se abrieron y aquellos ojos felinos que tanto amaba, se habían vuelto dos profundos pozos negros, la oscuridad comenzó a salir descontrolada de sus manos rodeándolos, abrió los labios y un líquido negro espeso comenzó a salir de sus labios, se esparció por el suelo rodeándolos, di un paso hacia ellos y Jaden me tomo del brazo.

.- Alexa, no... No te acerques.- mi corazón latía con fuerza en mi pecho, el miedo carcomiendo mi interior, los gritos de desesperacion comenzaron a escucharse aturdiendonos, la oscuridad los rodeo por completo y sus figuras desaparecieron entre la oscuridad, nos miramos a los ojos atemorizados.

.- Dea.- Alex y Jaden gritaron su nombre, estaba paralizada, con el terror carcomiendo mi interior, cuando de repente el comenzó a gritar.

- Ya cállense, déjenme en paz, no lo soporto... tómalos, te pertenecen, por favor... llevatelos.- podía sentir su dolor y su desesperación calando en mi interior.

.- Dea, por favor.- grite su nombre desesperada, Dea podría quitárselo, Dea podia llevarse su oscuridad.- Dea.- grite su nombre desesperada, esperando que me escuchara.

Los escuchaba hablar, escuchaba sus gritos, pero los gritos de las almas que los rodeaban se hacían cada vez más fuerte, haciendo imposible poder escucharlos, de repente un grito fuerte se escuchó y aquellas voces se callaron, el silencio inundó el lugar y la oscuridad comenzó a desaparecer, mire hacia ellos desesperada, miré a Dea caer al suelo como en cámara lenta... Pero el no estaba, mire hacia los lados desesperada buscándolo cuando lo sentí...

La muerte beso mis labios y un frío calo en lo profundo de mi interior, sentí mi magia fluir con fuerza en mi interior, despertando, serpenteando a mí alrededor, los escuché llamar mi nombre, La oscuridad había despertado, algo nuevo, algo sádico y enfermizo despertó dentro de mi, el mundo de colores que había vislumbrando toda mi vida se fundió en una oscuridad atemorizante y la verdad se estrelló en mi pecho.

El había desaparecido.