ETERNO AMOR DEL VILLANO

Elena se había convertido en una hermosa joven de ojos cafés y cabello negro como la misma noche, su bella sonrisa y su personalidad contagiaba de alegría a todos quienes la conocían, pues su padre se había ganado el aprecio de aquellos que lo acogieron años atrás cuando llego por primera vez a la zona norte con una pequeña en sus barazos. Ese tiempo no fue fácil, pero marco nuevo comienzo para sus vidas tanto para él como para su hija al adentrarse a un lugar desconocido, lleno de magia y encanto que se respiraba en el aire.

Cuando Adrian conoció a la reina de las hadas, esta se mostró sorprendida y un tanto preocupada al reconocer casi de inmediato a su pequeña sobrina, pues ella era la viva imagen de su hermana Isabel aunque la niña poseía al rededor de su pequeño cuerpo una aura de colo azul claro característico del legado de las hadas, también había rastro de una aura de color rojo en ella como si hubiera sido alcanzada desde mucho antes de nacer. No entendía a que se debía tal suceso, era como si esa energía no le perteneciera, pero a la vez su cuerpo la había asimilado como propia. ¡Esto no significaba nada bueno! se dice Aurora así misma mientras decide proteger a su sobrina.

El tiempo fue pasando y el día en el cual cumpliría su mayoría de edad llego. Esto emocionaba en gran medida a Elena ya que hoy tendrá su boleto de salida del encierro en el que se encontraba según ella, pues anhelaba salir del bosque donde creció, poder recorrer los pueblos, conocer más gente como lo hacía su padre que era comerciante y excursionista.

Todavía no entendía por qué su tía no le permite acercarse a los límites del bosque donde finalizada la barrera y comunicaba con el exterior. Su único consuelo era pasar tiempo en las ruinas de un antiguo castillo que se encontraba en la parte más profunda del bosque, esta allí se sentía segura, era como si ese lugar fuera parte de ella a pesar de lo tenebroso qué puede llegar a verse algunas veces, también le gustan las innumerables aventuras que su padre siempre le contaba cuando volvía de sus excursiones y la gente que conocía, creciendo más el deseo de salir y conocer el mundo.

El día de hoy no es diferente, Elena se Adentro sola nuevamente a ese lugar que tanto le gustaba.

¡Elena!..... Se escucha a lo lejos, el grito de una mujer.

¡Elena!... ¿Donde estas?... Condenada muchacha, por que eres tan rebelde, tu madre no me dio tantos problemas como tú. Murmura una mujer mayor que se acerca a prisa a las ruinas del antiguo castillo al percatarse de qué Elena nuevamente se adentro en el.

Donde estás muchacha, tu tía la reina solicita tu presencia, para dar inicio con el ritual y celebrar tu mayoría de edad. Dice con desesperación la mujer mientras se ha adentrado más a las ruinas bajando por una escalera hasta llegar a un pasaje secreto hecho de piedra qué es lo único que se ha mantenido en pie.

—Pero muchacha que haces aquí, no deberías venir a este lugar y menos sola, tú sabes que tu tía no le gusta este lugar y ami tampoco, es un poco tenebroso se dice a la vez que se abraza así misma, mientras observa las pocas telarañas qué hay allí.

Elena, por su parte sonríe al percatarse de la presencia de su nana Rosario y deja de contemplar su reflejo en el gran espejo que se encuentra incrustado en la roca con terminaciones en madera. Este espejo siempre le llamo la atención desde el primer momento que lo encontró, es como si fuera algún pasaje secreto a un mundo desconocido y en algunas ocaciones puede ver un destello de magia salir de el.

 Es simplemente magico y eso la tiene cautivada, pues ella supone que se trate de algún portal aunque todavía no sabe como funciona o a donde lleva.

No es para tanto nana dice Elena mientras vuelve a observar el espejo. M mm nana lo viste grita Elena emocionada.

—Que cosa mi niña Elena. Pregunta a mujer mayor confundida tratando de limpiar algunas telarañas qué se habían quedado en su cabello después de ingresar a este sitio.

Nana el destello qué emitió el diamante qué se encuentre en la parte superior del espejo , tu lo viste cierto, yo no lo imagine pregunta algo desanimada, pues nadie más se a percatado de ello y esta es la segunda vez que lo ve.

—La verdad es que no... Mejor apúrate que llegaremos tarde y tu tía no le gusta que la dejen esperando.

Sí, contesta Elena con un tono triste, pero rápidamente su rostro se ilumina por una sonrisa al recordar que su padre vuelve hoy de sus viajes.dejando a un lado lo que cree que presencio, pero en realidad ese espejo esconde más de lo que ella imagina.

—Espera muchacha no corras, yo ya no soy tan joven dice la nana Rosario a la vez que sube las escaleras lentamente. Pero de un momento a otro comienza a sentir un aire escalofriante que la hace caminar rápidamente y prometa jamás volver, pues su miedo es mayor, que la curiosidad de su querida Elena siente, por estos lugares cargados de misterio.

Elena corre emocionada por el bosque hasta llegar a un hermoso jardín donde todos sus amigos están reunidos, pero ella solo tiene ojos para su padre y tía quienes platican a una corta distancia, de inmediato sonríe y se acerca, los saluda con un fuerte abrazo, para después abrir los regalos que le tenían preparados.

—Gracias a todos por venir el día de hoy al cumpleaños de mi sobrina, como bien saben cuando una de nosotros cumple la mayoría de edad, se realiza un ritual para despertar sus dones y conocer si son portadores de nuestro legado. Como lo hicieron nuestras anteriores cumpleañeras el año pasado, Mariana y Angela quienes se convirtieron en hadas de las plantas y de los animales. Habla la reina de las hadas Aurora.

Todos aplauden dando así inicio con la ceremonia.

Elena camina muy nerviosa, pero feliz al lado de su tía, quien le ofrece una bebida especial y comienza a recitar un hechizo a la vez que camina alrededor de ella.

El poder de la reina hace aparición rodeando su propio cuerpo con destellos de luz los cuales hacen florecer de inmediato todas las flores y envia una onda de magia que refuerza la barrera del bosque.

 Por su parte Elena, se sorprende al ver que no puede despertar ningún don de la magia de las hadas y esto la desanima un poco, pero decide concentrar toda su energía en un punto específico de su cuerpo como le había dicho su tía. En ese instante Ella tiene una especie de visión de su futuro donde se ve al lado de una hermosa dama que le dice "Búscame cuando me necesites, yo soy Ana Paula, descendiente del gran hechicero y tú te convertirás en mi discípula". En otra parte de la visión se encuentra en una habitación completamente oscura y a medida que comienza a caminar siente como pierde movilidad de su cuerpo a la vez que no puede respirar mientras escucha una voz aguda que le dice ayúdame. De inmediato Elena abre sus ojos encontrandose con la mirada extraña de los que la rodeaban y es cuando se percata de las lágrimas que se deslizan por sus megillas a la ves que un dolor se almacena en su pecho.

—Por que lloras Elena, pregunta Adrián y procede a abrazarla para darle ánimo ya que esta preocupado por su amada hija.

Ella permanece en silencio tratando de asimilar lo que observó a través de esa visión.

La reina Aurora sé acerca y abraza también a su sobrina mientras le dice en un susurro tu no estas sola, Debes buscar y encontrar cuál es tu propósito inicial de tú existencia, debes reconocer tu esencia.Por tal motivo te enviare con lord Antonio quien es un guerrero, para que inicies tu entrenamiento es lo único que puedo hacer por ti, para tu propia seguridad.

Elena Asiente mientras se dibuja una sonrisa en sus labios y se limpia sus lágrimas.