DESEO IRRESISTIBLE

En la cocina, Nick volvía a probar la sopa una y otra vez… quería asegurarse de que estaba rica, que nada le faltaba para darle ese toque especial que suponía la haría irresistible al paladar...

.- Esta rica, yo la siento muy rica… pero no es para mí cierto, Bueno, esperemos que le guste a ella, un toque más de sal y listo... – Se decía con algo de preocupación ante la reacción que pudiera tener Dayanne, o su exquisito paladar…

Respirando profundo, buscó en los gabinetes un tazón y sirvió su litigada sopa, y casi que persignándose se encaminó a llevarla ante quien al final diría si estaba digna de comer o no…

. – Me tomé el atrevimiento de invadir su cocina y prepararle este humilde caldo – Soltó nada más entrar, con la vista de Dayanne fija en él “Carajos señorita, harás que se me caiga el tazón si me sigues mirando así”

Dayanne estaba más que sorprendida de ver a Nick Evans, su jefe, entrar con una taza llena de sopa, que aparentemente él mismo había preparado. Era un gesto que realmente la conmovió, y aunque tenía una lucha interna por no mostrar sus emociones frente él, lo agradeció de manera silenciosa.

. - ¿Usted preparó esto? – Preguntó tomando la sopa que él con cierta timidez también pretendió entregarle, pero en su intentó cayó en cuenta de que si ella tomaba la taza, obviamente no podría comer.

. – Obviamente no quedó como la de mi abuela, pero modestia aparte, está muy buena… muy sabrosa pues - “Eso creo y espero” – Dayanne ocultó una media sonrisa al captar su empeño por elogiar su preparación.

. - ¿Está tratando de convencerme o convencerse usted? Me da miedo…

. – Jajaja, no tiene porque, sé lo que le digo – Insistió – Permíteme…

. – No, claro que no, yo puedo sola… - Le dijo cuando él intentó llevar la cuchara a su boca… - Ya bastante hizo con cocinarla…

. – No es molestia para mí alimentarla y menos cuando claramente no puede hacerlo…

. - ¿Quién dice que no puedo? – Estiró su mano izquierda y le quitó el utensilio de la mano, entonces Nick le acercó el tazón, mirándola fijamente, la consideraba terca, y a menos que fuese ambidiestra, iba a dejarlo callado… Lo que obviamente dudaba, ya que ella demostraba tener un coeficiente intelectual muy alto, ósea que obviamente no era así…

. – Insisto, no me molesta para nada ayudarla, la idea es que se la coma usted… - Le dijo cuándo el líquido que ella trataba de llevar a su boca quedaba en el recorrido…

. – Okey… - Le tocó con renuencia aceptar a Dayanne y le entregó la cuchara mirándolo con reproche ante la sonrisa triunfal que él tenía. Sin embargo, debía aceptar que agradecía su sencillo pero significativo acto de amabilidad. – Gracias…

. – Es un placer para mí - Dayanne lo miró tratando de descifrar sus palabras y él ante su mirada inquisitiva, se apresuró a darle otro bocado - ¿Está rica verdad? – Preguntó sonriendo para desviar y aliviar un poco la tensión que se sentía. Pero su sonrisa tenía un efecto extraño en la chica, que algo perturbada, apartó la mirada antes de responder…

. – Si – Admitió, pero no le iba a dar el gusto de sentirse sobrado como obviamente lo hizo – Pero la de mi mamá lo es más… - Terminó, desinflándolo totalmente, y riendo ante la cara que puso… - ¡Deténgase! – Le pidió cuando él literalmente le quería embutir otra cucharada, pero la risa no la dejaba recibir…

. – La próxima vez, tendrá que esperar que su mamá llegue, si no se muere de hambre antes…

. – Pues no habrá una próxima vez – Sentenció Dayanne ya sería…

. – Jamás diga de esta agua no beberé… - Refutó Nick ofreciéndole otra cucharada… - Y menos andando en ese aparato en el que insiste viajar...

. – Ya no quiero más…

. – Por supuesto que sí – Le ordenó y ella lo miró sería – No me miré así, tome en cuenta, que en unos minutos debe tomarse todas esas pastillas, no puede hacerlo con el estómago vacío… - Le ofreció nuevamente…

. – Dije que no… - Repitió apartando la cara

. – Así deba embutírselo va a comer… - Le dijo con firmeza, y ella lo miró notando que efectivamente estaba molesto, sin embargo lo retó.

. – No sería capaz, además… - Iba a decirle que si se había molestado por lo que dijo de la sopa, era una broma – ¡No! – Lo detuvo cuando decidido lo vio ponerse de pie - ¿Qué pretende?

. – Alimentarla, es muy infantil lo que haces… - Continuó acercándose

. – Está bien… - Dimitió molesta cuando Nick se sentó en la cama – Y no soy infantil – Él la miró con burla en sus ojos - Usted es un chantajista…

. – Jajaja cómo cree… – Le dijo con sarcasmo, burlándose de que la fuerza de la amenaza que le hizo resultó efectiva… - Abra la boca – Le exigió con la cuchara llena frente a ella, que lo hizo de mala gana – Aquí viene el avioncito y Mmmm – Dayanne no pudo evitar sonreír y voltear los ojos ante la absurda actuación de Nick, aunque luego lo miró desafiante…

Nick suspiró, sabiendo que este divino huracán de amargura que tenía frente a él, no iba a ser nada fácil de cuidar, pero estaba claro que ya tenía el método para convencerla a cooperar…

. – Muy bien, buena chica – La halagó sonriendo y ofreciéndole agua… - Llevaré esto y vendré para que tome la medicina que le corresponde. – Cuando vio su gesto de desagrado y que cruzó su brazo libre encima de su brazo enyesado en señal de protesta intuyó que iba a hacer poco colaborativa…

. - Espero no tener que utilizar otro método de coacción para que coopere… - La quiso intimidar de una vez para prepararla…

. – Y yo espero que se vaya pronto, no me gusta que me obliguen a hacer algo que no quiero – Le respondió con tono desafiante.

. – Eso va a estar como difícil – Dijo Nick sonriendo por sus duras palabras – Yo soy un hombre de palabra, y le di mi palabra a su mamá, que está confiando que la estoy cuidando, y si usted no quiere que le diga que Sí fue culpa suya que este así, entonces será mejor que colabore y se comporte, especialmente, me trate bien…

Al escuchar esa última parte, Dayanne se preguntó, cuál sería la versión que él les dio a sus padres…

. – !Ah! pero es que va a seguir amenazándome? – Le preguntó altiva, pero luego quiso saber - ¿Qué les dijo? Y ¿Cómo lo tomaron?

. - ¿Especialmente su mamá? – Ella asintió, porque era su señora madre quien realmente le preocupaba por lo que implicaba para esta lo que pasó – Bueno, después de casi desmayarse del susto por lo que le pudiera haber pasado y luego verla así – Dayanne frunció el ceño – ¡Sí, me obligó a que le mostrara cómo, y dónde estaba, realmente estaban muy preocupados por usted!

A pesar de su actitud inicial, y su deseo de mantener su vulnerabilidad oculta, Dayanne no pudo evitar sentirse conmovida al imaginarse a sus fieles y amados padres en ese estado de intranquilidad por saber de su bienestar. Tragó seco y volteó el rostro, limpiando una lágrima que escapó cuando sintió la mirada firme de Nick sobre ella…