La Trampa

Pese a ser la dueña de la casa Covarrubias, la madre de Aossi sigue trabajando como jefa de enfermeras en el Hospital Central de Galway, así que conoce a mucha gente, pero en especial le cae bien una paciente que le recuerda mucho a su propia madre.

Se trata de la señora Millis, es una adorable anciana que tanto ella como Aossi visitan cuando es internada, ya que sus familiares suelen dejarla sola. Así que en esta ocasión que llegó a la sala VIP, le avisó a su hija para que acuda a saludarla.

La conocieron cuando Margarita acababa de entrar al hospital como una enfermera regular y la vida de la anciana pendía de un hilo, rápidamente se dieron cuenta de que solía estar sola y triste, por lo que la pequeña Aossi se apegó a ella haciéndole compañía mientras aprendía lo necesario sobre el idioma y la forma de comportarse.

La señora rápidamente se sintió atraída por la pequeña que siempre le hacía bromas y preguntas sobre cómo funcionaba el mundo, aunque solía cometer muchos errores al hablar y necesitaba gran ayuda para conocer las reglas de comportamiento, no porque fuera mala, sino porque era exageradamente bien educada, como si su educación fuera de siglos atrás.

Además, le daba clases sobre historia y matemáticas, lo que la ayudaba a compensar la ausencia de su familia que nunca la visitaba.

Sra. Millis: Margarita, cómo has estado, dime, y mi futura nieta, ¿cómo le va en la escuela? ¿Está lista ya para casarse?

Margarita: Jajajajaja, señora Millis, usted siempre pensando en nosotras, pero lo importante es su salud. Como sabe ahora estoy casada y Aossi está estudiando en la Universidad, tiene un amiguito que la sigue a donde quiera que va, pero ya la conoce, una vez que se mete en sus asuntos, nadie hace que vea lo demás.

Sra. Millis: Hija, sabes que quiero mucho a tu niña, tengo muchas ganas de llamarla nieta, tengo muchos nietos, pero tres son los que tienen más posibilidades de gustarle, el mayor es jugador de Futbol y otro es un joven empresario, yo creo que ellos podrían ser los mejores candidatos, ¿qué me dices?

Margarita: Jajajaja, que ella nunca dejará que haga yo un compromiso en su nombre, es demasiado orgullosa, y voluntariosa. Ella ante todo desea vivir en libertad y hacer lo que le gusta, quiere hacer medicamentos y esas cosas.

Sra. Millis: No importa, mi otro nieto está en Francia, es piloto aviador, tal vez él podría ser un buen candidato, pero es demasiado mujeriego, no me gustaría que la pequeña Aossi viva con el alma en un hilo, jejejeje.

Margarita: No se preocupe, será mejor que eso lo hable directamente con ella, ya le avisé que está usted aquí en el hospital, así que no se preocupe, seguro al rato viene a verla.

Sra. Millis: Ah, qué bien, le traje un regalo de mi último viaje a Suiza, espero que le guste mucho, yo misma lo elegí.

Una vez que se hizo tarde, Aossi llegó al hospital acompañada de Fred, para saludar a la Sra. Millis, así que pasaron directamente al interrogatorio.

Sra. Millis: ¡¡Mi niña hermosa!! Cómo es que siempre luces más que maravillosa… y quién es este jovencito que te acompaña, no me digas que es tu novio…

Aossi: Jajajajaja, siempre tan directa abue, déjame presentarte a Fred, es mi mejor amigo en la Universidad y mi cómplice en travesuras, pero no te dejes engañar, no por ser amigos somos algo más, solo amiguitos… ¿verdad?

Fred: Frederic Hinojo, Fred para los amigos, así que con gusto puede llamarme así.

Sra. Millis: Mucho gusto Fred, ¿eres familiar de Horacio Hinojo?

Fred: Sí, es mi hermano mayor, ¿lo conoce?

Sra. Millis: Sí, es un excelente muchacho, me propuso un negocio que estamos revisando, pero no sé qué han dicho mis asesores… de todos modos, cuando lo veas, dile que le mando muchos saludos.

Fred: Claro señora Millis, y ¿por qué se encuentra aquí hoy? ¿Está usted enferma?

Aossi: Claro que no, la señora Millis es más fuerte que un roble, pero necesita que le hagan chequeos constantes, ¿verdad?

Sra. Millis: Jajajajaja, claro que sí, estoy en un chequeo de rutina, dejaré de venir cuando Aossi acepte ser mi nieta.

Aossi: Jajajajaja, no, ya sabe que eso sí que no… por lo que me ha contado sus nietos son excesivamente guapos y si los acepto capaz que me ponen los cuernos en la luna de miel… jajajajajaja, así que mejor no… ¡gracias!

Sra. Millis: Jajajajajaja, eso lo dices porque no los conoces… tengo nueve nietos y de ellos tres son los que considero mejores candidatos, así que prepárate querida, porque chicos guapos van a comenzar a cortejarte… jejejejeje.

Aossi: Ni lo diga viejita traviesa, porque entonces no les voy a hacer caso a ninguno. A decir verdad, yo quiero que me adopte como su hija y heredar toda su fortuna, jejejejeje

Sra. Millis: Bueno, si ninguno de mis nietos te convence te adoptaré…

Aossi: ¡¡Perfecto!! ¡¿Ya viste Fred?! Te dije que algún día sería millonaria… jejejejeje… por cierto, cómo va con su medicamento (tras revisar) se está terminando el suero… voy a decirle a mi mamá que necesita atención.

Sra. Millis: Claro nena, te lo agradezco mucho, yo me quedo aquí con Fred.

Luego de que la chica saliera de la habitación, le tocó al pobre de Fred.

Sra. Millis: Dime muchacho, ¿de verdad no estas enamorado de Aossi?

Fred: ¡No!, de verdad que no… solo somos buenos amigos, ella es extraordinaria, pero no es mi tipo.

Sra. Millis: (Mirándolo pícaramente) Mmmm, no me digas, tu tipo es más bien alguien, ¿con un equipo similar al tuyo?

Fred inmediatamente se puso colorado, y no supo qué decirle a la abuela Millis.

Sra. Millis: No te sonrojes, también para ti tengo un nieto que puede interesarte, ¿quieres que te lo presente?

Fred: (Dudoso) ¿Cree que sería posible?

Sra. Millis: Claro mi niño, ¿cuántos años tienes?

Fred: Ya tengo 21, los cumplí hace unos días.

Sra. Millis: Ah, entonces creo que eres un poco joven para él, pero estará todo bien. Ahorita mi nieto está soltero, (guiñándole el ojo) así que nada se pierde con intentar.

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