El Niño Riko Y La Ramera

**Capítulo 7: La Propuesta**

La semana siguiente a su profunda conversación, Fernando despertó con una sensación de determinación que nunca antes había experimentado. Había pasado los últimos días reflexionando sobre lo que realmente quería en su vida, y había llegado a la conclusión de que su felicidad estaba intrínsecamente ligada a Fabiola. La conexión que habían forjado era más fuerte que cualquier expectativa familiar o presión social, y estaba preparado para dar un paso más en su relación.

Mientras se preparaba para su encuentro semanal, Fernando sintió una mezcla de nervios y emoción. Había decidido que era el momento adecuado para hacerle una propuesta a Fabiola, algo que no solo cambiaría su vida, sino que también podría transformar la de ella. Quería que supiera que estaba comprometido con su futuro juntos, sin importar las dificultades que pudieran enfrentar.

Al llegar al bar, la familiaridad del lugar lo envolvió, pero esta vez había un aire de expectativa en el ambiente. La música sonaba con un ritmo vibrante, y la multitud se movía al compás de la energía del lugar. Fernando buscó a Fabiola, y cuando la vio, su corazón se aceleró. Ella estaba detrás de la barra, sonriendo mientras servía tragos, y su belleza iluminaba el espacio.

"¡Hola, hermosa!", exclamó Fernando al acercarse, sintiendo que la emoción lo invadía.

"¡Fernando! ¡Qué bueno verte!", respondió Fabiola, su sonrisa radiante. "Me alegra que hayas venido. ¿Cómo ha sido tu semana?"

"Ha sido buena, pero ha pasado bastante tiempo desde que hablamos de lo que realmente queremos", dijo él, sintiendo que la seriedad de sus palabras era necesaria. "Hay algo importante que quiero discutir contigo esta noche".

Fabiola lo miró, intrigada. "Claro, cuéntame. Estoy aquí para escucharte".

Se sentaron en su mesa habitual, y Fernando sintió que la atmósfera se llenaba de una mezcla de tensión y emoción. "Fabiola, desde que te conocí, mi vida ha cambiado de maneras que nunca imaginé. Me has mostrado lo que significa ser auténtico, y eso es algo que valoro profundamente".

Ella sonrió, sus ojos brillando de comprensión. "Lo mismo siento, Fernando. Nunca pensé que encontraría a alguien con quien pudiera ser tan abierta y vulnerable".

Fernando tomó un respiro profundo, sintiendo que era el momento de dar el siguiente paso. "He estado pensando en nuestra relación y en lo que realmente quiero para el futuro. Quiero que sepas que estoy comprometido contigo. Quiero que seas parte de mi vida de una manera más significativa".

Fabiola lo miró, sorprendida. "¿A qué te refieres exactamente?"

Fernando se sintió un poco nervioso, pero continuó. "Quiero que consideres la posibilidad de salir de este lugar, de dejar atrás la vida que llevas ahora. Sé que suena complicado, pero creo que juntos podríamos construir algo increíble".

Fabiola frunció el ceño, su expresión cambiando a una mezcla de sorpresa y confusión. "Fernando, eso es… mucho. No sé si estoy lista para dejar todo atrás. Esta es mi vida, mi trabajo".

"Lo sé", respondió él, sintiéndose un poco ansioso. "Pero quiero que sepas que estoy aquí para apoyarte. No quiero que sientas que tienes que hacerlo sola. Podemos enfrentar esto juntos. Te prometo que haré todo lo posible para ayudarte a encontrar un camino diferente".

Los ojos de Fabiola se llenaron de lágrimas, y Fernando sintió una oleada de emoción. "Nunca pensé que alguien pudiera ofrecerme algo así. He luchado tanto por salir de esta vida, pero siempre he tenido miedo de dar el siguiente paso".

Fernando tomó su mano suavemente, sintiendo la conexión palpable entre ellos. "No tienes que tener miedo. Estoy aquí, y creo en ti. Creo en nosotros".

Fabiola lo miró, sus ojos reflejando una mezcla de emociones. "Es solo que… dejar este trabajo significa renunciar a muchas cosas. No sé si estoy lista para eso".

"Entiendo tus dudas", dijo Fernando, sintiendo que el peso de la conversación era abrumador. "Pero también creo que esta es una oportunidad para que ambos seamos felices. Quiero que explores tus sueños, que encuentres tu verdadera pasión. Juntos, podríamos crear una vida llena de amor y autenticidad".

Fabiola se quedó en silencio, reflexionando sobre sus palabras. Fernando sintió que el tiempo se detuvo mientras esperaban la respuesta. Su corazón latía con fuerza, y la tensión en el aire era palpable. Finalmente, Fabiola rompió el silencio.

"Fernando, esto es mucho para procesar. Nunca había considerado dejar todo atrás. Pero al mismo tiempo, la idea de una vida diferente me llama", admitió, su voz temblando ligeramente. "Quiero creer que podemos tener un futuro juntos, pero también necesito tiempo para pensarlo".

Fernando asintió, comprendiendo su lucha interna. "Tómate el tiempo que necesites. Pero quiero que sepas que estaré aquí para apoyarte en cada paso del camino. No tienes que tomar esta decisión sola".

A medida que la noche avanzaba, la conversación continuó fluyendo entre ellos. Fabiola compartió sus miedos sobre dejar su trabajo y cómo había aprendido a sobrevivir en un mundo que a menudo era cruel. Fernando la escuchó atentamente, sintiendo que cada palabra la acercaba más a su corazón.

Mientras hablaban, Fernando se dio cuenta de que su amor por Fabiola se había profundizado aún más. Ella era una mujer fuerte y valiente, y admiraba su determinación por sobrevivir en circunstancias difíciles. A pesar de sus miedos, la idea de un futuro juntos se sentía cada vez más posible.

La noche llegó a su fin, y cuando se despidieron, Fernando sintió una mezcla de esperanza y ansiedad. Había hecho una propuesta que podría cambiar sus vidas, y aunque Fabiola necesitaba tiempo para reflexionar, sabía que había plantado una semilla de posibilidad en su corazón.

A medida que se alejaba del bar, Fernando se sintió más decidido que nunca. La vida que había imaginado con Fabiola era un sueño que estaba dispuesto a perseguir, sin importar los obstáculos que pudieran surgir. Sabía que enfrentaría desafíos, pero estaba preparado para luchar por su amor y por un futuro lleno de autenticidad y felicidad.

Durante los días siguientes, Fernando se mantuvo en contacto con Fabiola, pero respetó su necesidad de tiempo. La espera se convirtió en un ejercicio de paciencia, y cada vez que pensaba en ella, su corazón se llenaba de esperanza. Sabía que su propuesta había sido un paso importante, y no podía esperar a ver cómo respondería ella.

Finalmente, llegó el viernes de la semana siguiente, y Fernando se sintió ansioso mientras se preparaba para su encuentro. La incertidumbre lo invadía, pero también había un rayo de esperanza que iluminaba su corazón. Al llegar al bar, la familiaridad del lugar lo envolvió, pero esta vez había un aire de expectativa en el ambiente.

Cuando vio a Fabiola, su corazón dio un vuelco. Ella estaba allí, esperando, y su mirada reflejaba una mezcla de emociones. Fernando se acercó, sintiendo que cada paso lo acercaba a la respuesta que tanto anhelaba.

"Hola, Fabiola", dijo él, tratando de ocultar su ansiedad.

"Hola, Fernando", respondió ella, su voz suave. "He estado pensando mucho en lo que hablamos la semana pasada".

Fernando contuvo el aliento, sintiendo que el momento que había estado esperando había llegado. "¿Y qué has decidido?"

Fabiola lo miró con atención, y Fernando sintió que el tiempo se detenía. "He reflexionado sobre tus palabras y sobre lo que significa para mí. La idea de dejar atrás mi vida actual me asusta, pero también me emociona. Quiero creer que podemos construir algo juntos, algo real".

El corazón de Fernando se llenó de alegría al escuchar sus palabras. "¿Entonces estás dispuesta a considerarlo?"

Fabiola asintió, una sonrisa iluminando su rostro. "Sí, estoy dispuesta a intentarlo. Quiero explorar esta oportunidad contigo, pero también necesito tu apoyo en este proceso".

Fernando sintió que una ola de emoción lo inundaba. "Estaré contigo en cada paso del camino, Fabiola. Juntos, podemos enfrentar cualquier desafío".

Mientras la música resonaba de fondo, Fernando y Fabiola compartieron un momento de conexión profunda. Era un nuevo comienzo, una propuesta que había cambiado sus vidas y que prometía llevarlos hacia un futuro lleno de amor y autenticidad.

A medida que la noche avanzaba, Fernando se dio cuenta de que había encontrado en Fabiola no solo a una pareja, sino a una compañera de vida. Estaba emocionado por el viaje que tenían por delante, y con cada paso que daban, sabían que su amor era más fuerte que cualquier obstáculo que pudieran enfrentar.