Shopia estudiante de enfermería es engañada por su gran amor, sin querer conoce a un familiar de su ex, con quien conocerá la otra cara del amor.
NovelToon tiene autorización de Lilian Ortega para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Chiste
Nuestras miradas se cruzaron, dicen que las miradas dicen más que mil palabras, pero nuestras miradas no decían nada, era momento de decir palabras para encontrarle sentido a nuestras miradas.
— ¿Cuánto más me harás esperar?, de una vez dime lo que tengas que decirme — dijo Derek algo serio tomando un sorbo de su café.
—Estoy embarazada— se lo solté.
Derek no sabía si había escuchado bien, o estaba alucinando, la noche anterior estaba de guardia y llevaba cansancio acumulado, su mente se nubló, con la noticia, su vista se puso incómoda, sus labios no podían articular ninguna palabra, hasta que tomó aire profundo y luego preguntó.
— ¿Escuche mal o dijiste que estás embarazada?
— Escuchaste bien, estoy embarazada y el hijo que llevo es tuyo.
Derek se muestra algo confuso, me mira muy serio,, pero no dice ninguna palabra.
— ¿No vas a decir nada?— interrumpí su pensamiento.
— ¿Estás segura de lo que dijiste?
Saque de mi bolso una copia de los resultados y se la apoyé en su frente. Él miró atentamente esos papeles y efectivamente vio que estaba embarazada. No había un bello panorama a nuestro alrededor, la magia de su sonrisa había terminado.
— ¿ Qué has pensado en hacer?— me pregunta.
— Quiero que nos casemos.
—Ja, ja, ja... No tienes otro chiste mejor— se burla de mi petición.
— ¿Crees que quiero arruinar tu futuro?
— Estás arruinando mi futuro, puedo darte todo el dinero que desees y seguir con tu vida.
— ¿Crees que porque estudio enfermería y me visto así me falta el dinero?, estás muy equivocado. En este momento puedo levantarme eh irme, pero no te la voy a hacer fácil Derek, se ve que no sabes nada de mi, si no te casas conmigo a las buenas, a las malas será. Creí que tú eras el maduro porque me llevas más de edad, pero me equivoque— dije muy enojada.
— ¿Qué piensas hacer?— preguntó algo nervioso al imaginarse un sin fin de cosas.
— ¿Realmente quieres averiguarlo?
— ¿Por qué quieres casarte conmigo?
— Es obvio que por amor no, pero si por el amor que siento por el bebé que crece dentro de mí. En mis planes tampoco estaba de la noche a la mañana formar una familia, pero las cosas se dieron así, solo quiero que mi hijo nazca dentro del matrimonio, no tienes que querernos, solo quiero algo de tiempo para recuperarme y pensar en un futuro mejor, pero quiero salir de casa bien, no quiero huir de mis padres y de esta realidad, solo te estoy pidiendo un favor. Una vez que nazca el bebé, tú y yo nos divorciamos, y ambos seguimos con nuestros caminos.
— ¿Me estás pudiendo que tengamos un trato?
— Si quieres llamarlo así, no hay problema. Estaremos casados, pero tú puedes seguir con tu vida normal, no voy a interferir en eso, sigue con tus planes a futuro que yo haré lo mismo. Compartiremos techo, pero no pensamientos.
— Tengo una vida sexual activa.
— Has con tu vida sexual lo que tú quieras, no me voy a meter en nada, es más ni nos vamos a ver. Como te dije solo quiero algo de tiempo fuera de presiones de mis padres.
— No creí que una noche lluviosa de aventura me costaría tanto.
— Para que te des cuenta de que las aventuras vienen con un papel de envoltura.
— Ezequiel con la noticia va a enloquecer. ¿Aún lo amas?
— Cuando se entere me va a odiar, y ya no importará si lo amo o no. No me importa lo que los demás digan, solo quiero que mi hijo nazca bien y cuidar de él.
— Está bien, hagamos esto, me casaré contigo.
Sentí un gran alivió cuando acepto, sabíamos que nos estábamos encaminando a un callejón difícil de cruzar, pero correr el riesgo haría que mi hijo tenga una vida feliz.
Hables con mis padres para tranquilizarnos, ellos querían que el padre de mi hijo se haga responsable de sus actos, ya no importaba quien fuera, porque el destino a veces es así con muchos, te pone en su camino personas que no imaginabas y te quita otras. Hay cosas que no están planeadas, solo suceden como en mi caso. Con el tiempo seguro descubriré porque se dieron las cosas así.
Derek, después de la conversación que tuvimos, llegó muy afligido a su casa, su vida no había sido fácil, la madre de Ezequiel era su media hermana, habían roto un lazo, porque el padre de ambos decidió heredar toda su fortuna a Derek antes de su muerte, dejando de lado a la madre de Ezequiel, esto ocasionó que ella lo odié.
Derek era alguien solitario, la única familia que tenía era su hermana que no lo quería, su madre murió en un accidente, y por eso decidió ser médico. Ahora que me había conocido sabía que su hermana le odiara más al enterarse de que yo su futura nuera ahora sería su cuñada.
Se acordó una fecha para la boda, decidimos que fuera algo familiar, era momento de dar la cara. Cite a Ezequiel en una plaza, aún sentía muchas cosas por él, mi corazón aún lo quería, pero mi mente amaba a mi hijo. Sabía que le rompería el corazón a mi ex, pero ya nada podía hacer, a él no le correspondía asumir responsabilidades ajenas, y también se merecía saber la verdad.
Cuando nos vimos corrió directamente hacia mí atravesando velozmente las barreras de su alrededor, me abrazo como solía gustarme, sentí su calor, realmente lo extrañaba, disfrute de este pequeño momento, porque después sabía que se venía una gran tormenta. El cielo se vestía de inicio de otoño, se venía mi temporada favorita, pero con grandes expectativas y desafíos.
— Shopia, mi amor, no sabes cuanto te extrañe— susurro a mis oídos.
— Ezequiel, tenemos que hablar— le dije apartando mi cuerpo del suyo.
— Dime, ¿de qué quieres hablar?— nos sentamos en una banca.
— Estoy embarazada.
Ezequiel se dio un tiempo para analizar la situación, no sabía si estaba escuchando bien, o solo era parte de su imaginación.
— ¿Qué?— se desató una gran tristeza en su rostro.