Me Quedo Con El Harén

Luego de que mandara a preparar las habitaciones y todo lo que se necesitaba para recibir a mi familia me tiré en la cama agotada, no quise cenar estaba ansiosa, no recordaba nada de ellos.

Antonia- Merlín por favor, te lo ruego, ayúdame. Necesito saber quién es quien, se supone que es la familia que me faltaba en mi otra vida y tú me la diste.

Si, le hablaba al aire. Porque este Merlín trucho no me escuchó. Me dormí después de que me doliera la cabeza tanto pensar y tratar de recordar, en un cómodo camisón arriba de la cama, pero tuve sueños más bien recuerdos toda la noche unos buenos y otros malos. En donde Antonia era la pequeña de la casa, cuidada por sus cuatro hermanos. Su mamá era igual a ella con esos ojos verdes brillantes y estaba embarazada, Anto le acariciaba la pansa, pero luego de eso su papá le dijo que mamá y hermanito se habían ido al cielo, sentía lágrimas en mi rostro quería despertarme pero no podía. Vi como los hermanos y el padre le sonreían solo a ella y nadie más. Luego de eso papá se ocupaba de Antonia y de los hermanos, todos corrían a verla todo el tiempo, cuando llegaban de algún lado. Vi a papá juntarse con hombre igual a Marcos, pero mayor, su papá y el nuestro son amigos. Luego vi muchas cosas con las cuales lloré y reí o asimile. Vi todo como Antonia se fue enamorando de Marcos, como él amaba a una chica, pero esa chica murió de enfermedad, fue obligado a casarse con Antonia, a que sea gentil, todo hasta la noche de boda cuando le dejo en claro que no la amaba y que nunca la iba a tocar como su mujer. Fue triste ver las expresiones de Anto mientras él la rechazaba en todo momento hasta la noche que ella comía gustosa el postre. Él no sé preocupo por ella. Creo que he sido muy buena con Marcos, se lo debo Antonia vengarme un poco en nombre de ella... Pero luego Antonia me vio, me sonrió y me dijo:

Antonia verdadera- Bienvenida a mi cuerpo Estefani, te lo dejo todo, para mí ya es tarde. Solo te pido que no cometa mis errores, no dejes todo por un hombre mejor déjalo todo por varios je, je, je 🤭 Cuidate mucho y deja de decir que somos distintas porque ahora solo eres tú. Tú eres Antonia Estefani Del Castillo. Cuida a tu familia. Y no te vengues de Marcos, déjalo ser feliz. Adiós, sé feliz…

Cuando desperté apenas estaba aclarando, estaba llorosa y entumida de frío. Me arropé, pero no dormí, tenía todos los recuerdos de mi nueva vida, no sabía como sentirme, aún sentía emociones que no eran mías, pero luego me di cuenta de que ambas no llamábamos Estefani, esto es tan raro, seguro alguna treta de este Merlín loquito.

Gracias Merlín, sonreí hasta que me sacan de mis pensamientos las manos de mis doncellas que las tenía enfrente y me tocaban y me hacían señas de que vuelva de mi nube de pensamientos y recuerdos.

Petrona- Su majestad ¿Está usted bien?

Simona- Mi señora ¿Está enferma?.

Aurora- ¿Llamo al médico? Señora no nos asuste...

Antonia- Estoy bien. Solo que recordé todo y es mucho que asimilar. No pude dormir bien.

Petrona- Entiendo. ¿Necesita algo mi señora?

Antonia- Un café doble. No quiero comer. ¿Ya está todo listo para la llegada de mi padre?.

Aurora fue por mi café. Petrona por mi ropa.

Simona- Todo su majestad… ¿Necesita algo más?.

Antonia- Sí. Quiero el palacio limpio de suciedad y de las concubinas de mi esposo. Avísenle que hoy viene su suegro y sus cuñados.

Mientras me tomaba mi café miraba para afuera por la ventana, Simona me peinaba el cabello larguísimo. Tengo un poco de nostalgia hoy, tenía paz hasta que entro Marcos.

Antonia- Podrías golpear.

Marcos- ¿Cómo es eso que viene tu familia y yo recién me entero?.

Antonia- Buen día para ti también. ¿Cuál es el problema?. Vienen a verme a mí, no a ti.

Marcos- ¿Como que cual es el problema? No somos ni de cerca un matrimonio y yo vivo en un lado del palacio con mis mujeres y vos en el otro.

Antonia- ¿Cuál es el dormitorio principal?.

Marcos- Este.

Antonia- ¿Entonces no te preocupes?. Trae tus cosas para acá y duermes en el sillón. Que quede claro que yo no fui la que no quiso que este matrimonio sea prosperó. Saca a tus mujeres y ponlas en su mansión, advierte les que los Del Castillo no las van a tolerar ni de broma. Otra cosa amanecí descompuesta, no me molesten ni un poquito porque no estoy para estupideces. Si ya terminaste puedes irte.

Marcos me miró y se retiró sin decir nada. Clarooo ¿Faltaba más que le moleste que mi familia venga a verme? Estupido. Recordar como rechazo una y mil veces a Anto duele, ella solo se enamoro de su prometido que eran prometidos desde antes de nacer, luego se hizo conforme a que ellos crecían juntos y se veían interesados uno en el otro, hasta que Marcos rescató a la plebeya y se enamoró. Duele que no le haya importado que Antonia vivía y se desvivia por el, que le rompió el corazón una y otra vez. Tal vez no me venge de él mucho tiempo, pero si en mínimas cosas como estas donde lo ponga en su lugar y nadie me va a venir a humillar más siendo yo la máxima autoridad después de los emperadores padres.

Luego de ir a mi despacho a trabajar y organizar mejores las cosas, ya que ahora cuento con recuerdos de Antonia de como hacía las cosas, me organicé mejor. Estaba tomando un café a media mañana con un pastel mientras leía unos documentos donde piden ayuda para solucionar un pequeño pueblito que vive inundado por las lluvias, las casas son precarias y toda la gente es plebeya y nadie los ayuda. Estaba Concentrada en buscar una solución hasta que mi puerta se habré de par en par y entran dos concubinas del emperador la primera y la tercera concubina, Lucero y Catalina.

Lucero- ¿Quién carajos te crees que eres para echarnos del palacio imperial?.

Catalina- Mandaron a sacar todas nuestras cosas y dijeron que eran órdenes de la emperatriz desafortunada.

¿Acoso tienes celos porque somos las favoritas del emperador?.

Estas zorras estúpidas.

Antonia- Miren par de ignorantes. En primer lugar, no me creo nada, soy la emperatriz, por lo tanto, este es mi palacio, hasta que yo así lo quiera. Y si quiero que ustedes se vallan de él, lo van a hacer. Tengo entendido que cuentan con su palacio de zorras, perdón de concubinas. Que el mismísimo emperador les mandó hacer, entonces no vengan a quitar mi preciado tiempo y pídanle explicaciones a él. Porque yo si trabajo, Alguien tiene que hacerlo porque con todos los gastos que tienen ustedes este imperio pronto irá a la ruina. Si ya terminaron con su reclamo absurdo lárguense de mi palacio. Pero para ayer es tarde.

Catalina- No nos vamos a ir. Vamos a quedarnos acá hasta que el emperador regrese.

Lucero- Recuerde emperatriz que nuestras familias son influyentes. No sé las puede ofender.

Antonia- Lo siento. Las quiero fuera del palacio, se lo pedí amablemente y ustedes no quisieron cooperar. No me culpen por ser grosera. ¡Guardias saquen las del palacio!.

Los guardias entraron y las sacaron, todas sus cosas estaban en maletas ya listas en un carruaje para llevarlas al palacio de las concubinas no quedaba lejos, ya que quedaba dentro de las mismas tierras del palacio imperial. De las 6 concubinas que son, porque eran 7, pero la quinta fue desterrada solo una se había marchado sin decir nada, ella misma empacó sus cosas y se fue. Las otras cinco tenían un escándalo en la entrada del palacio junto con sus doncellas.

Pasado una hora seguían igual, es más, la situación era peor, ya que muchas de ellas mandaron a llamar a sus familias, todos reclamaban yo seguí con mi trabajo. Pero ya se hacía la hora de que llegara mi familia y no quería que vieran esto y Marcos vaya a saber Dios donde se metió.

Salgo con mis doncellas, para tratar de arreglar esta revolución que se hizo, veo llegar a Marcos y me mira furioso. Pegue la vuelta y regrese a trabajar.

Aurora- Emperatriz ¿No va a ayudar al emperador?

Antonia- ¿Vieron cómo me miró?.

Simona- Estaba molesto.

Antonia- Exacto!. Yo amablemente lo quiero ayudar, pero viendo como es, que se las arregle solo.

Simona- ¿Y eso no está mal?

Aurora- Claro que no. Ellas no son nada a la par de nuestra emperatriz. El problema es del emperador.

Antonia- Véanlo así. Puede correr sangre si mi familia llega y ve que el emperador trajo a sus concubinas a vivir al palacio.

Marcos- ¡¡ANTONIA!!. Ven YA!!.

Antonia- Aquí vamos de nuevo. 🙄

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