La Sombra Del Mal

...Narrador...

Cecilia Whop, se detuvo con ambas manos sobre la pared a su lado derecho. El miedo era el sentimiento más visible en su rostro.

Aún más que el dolor que sentía en su pie derecho a causa de la herida provocada por el afilado cristal.

Cerró los ojos por un corto momento. Respirando agitadamente por la nariz. La incertidumbre de no saber donde estaba, era una emoción indescriptible.

Si era de día o ya era de noche. Sin saber quién más estaba ahí. El ambiente al interior de la habitación era frío, como el de un témpano de hielo.

Sus ojos se volvieron rojos, y no había llorado lo suficiente. Era solo el comienzo del infierno que le esperaba durante una semana si lograba sobrevivir al encierro.

Moverse de la cama no era una opción, podría salir de nuevo herida, tampoco mantenerse con los brazos cruzados. A nadie le convenía tener una participante que no de espectáculo.

Lo que no sabía Cecilia y ninguna de las participante, es que son vigiladas por miles de personas con mente enferma.

Al a ver salido, heridas a las pocas horas de haber entrado a "la mansión antigua". Como le suelen decir los apostadores.

Las dos hermanas Whop, tenían pocas posibilidades de salir con vida de esa mansión. Las apuestas no les favorecían a ninguna de las dos.

Al parecer había alguien muy poderoso moviendo los hilos y deseaba ver a las hermanas sufrir mucho antes de morir.

Mientras en la otra habitación. Lilit Whop recibió la visita de una de las encargadas de llevar a su máximo miedo a cada una de las participantes.

Entró al cuarto de Lilit Whop, mirando inesperadamente las sábanas manchadas de sangre.

Era por demás decir qué, las heridas en las piernas de la chica eran profundas. Por lo cual le sería imposible poder llegar al día siguiente.

______ Quienes son ustedes. _____ Lilit no mostró ni un poco de miedo frente a la mujer y sus dos escoltas.

_______ El mismo demonio... ____ Respondió sin ninguna expresión en su rostro.

_______ ¡Vaya! Esto se queda pequeño para ser el infierno. ______ Lilit pensó que si no se mostraba débil delante de sus verdugos tendría una posibilidad de escapar de ahí.

______ Crees qué porque mataste ya, eres igual a nosotros. ¡No seas tonta, niña estúpida!

_______ Si tuviera un arma en este momento te dispararía y no sentiría ningún remordimiento. _____ Expresó Lilit mirando directamente a los ojos a la mujer.

Sintiendo el poder, la mujer llamada Melissa se acercó a la cama, donde la joven de cabello morado se encontraba atada de sus pies.

Mostró sus largas uñas negras, y sin ninguna piedad las clavó en la barbilla de Lilit. Gotas de sangre salieron de la piel blanca de la chica.

No confirme con eso, Melissa soltó a Lilit y enseguida le dio un fuerte puñetazo en su rostro.

A pesar de que sentía un inmenso miedo. Mantuvo una postura de superioridad. Eso enfurece a la mujer, la cual tenía prohidó lastimar de más a cada participante.

_____ Tu muerte será lenta y muy dolorosa. _____ Expresó Melissa; abandonando el cuarto donde estaba Lilit.

Caminó por el pasillo hasta la otra habitación. Donde se encontraba Diana. La chica fue encerrada en un sitio espantoso. Su mayor temor eran las arañas.

Rodeada de Tarántula, la chica no dejaba de gritar. Sus gritos de desesperación eran música para los oídos.

..."Melissa vuelve a la celda de Lilit Whop, herir las palmas de sus manos. Que sienta tanto dolor que deseé morir en ese mismo momento"...

Melissa escuchó la orden de su jefe por el audífono en su oído. Una ligera sonrisa se dibujó entre sus labios negros. Pero antes de volver a la habitación de Lilit, necesitaba visitar a Cristal.

La chica a diferencia de las demás participantes. Tenía una recámara de lujo. No, solamente, era la favorita para ganar, sino que también era extremadamente famosa.

El poder y el dinero contaban en todo, los apostadores la veían como la ganadora. Al entrar a la recámara.

Melissa inclinó su cabeza delante de la hermosa Cristal.

______ Señora, el conde desea verla en una hora.

Cristal sonriente voltea a ver a Melissa. No sabía quien era el conde, pero la idea de verlo y que la ayude a vencer a las otras chicas era buena.

_____ Traigan mi ropa y arreglen la tina. Aceites aromáticos y perfumes.

Melissa no se atrevió a decir nada, con obediencia, salió de la habitación y escogió el vestido rojo más hermoso.

Era un lujoso vestido antiguo. Abundante de la parte inferior, y ajustado de la parte superior. Con un corcel, ajustado a su cintura.

Su largo cabello rojo, caerá como cascada por sus hombros. Melissa volvió a la recámara de Cristal dejando el vestido sobre la cama.

Al darse la vuelta para salir, ve unas gotas de sangre en la alfombra. El rastro daba al baño. Caminó hasta donde terminaban las gotas de sangre.

Llamó a la puerta que se encontraba cerrada por dentro.

..."Señorita Favela"...

..."Señorita Favela"...

No importa cuanto Melissa llame a la puerta. No escuchó ni una sola respuesta de Cristal. Temerosa de que algo malo le haya sucedido a la chica, trató de abrir la puerta a la fuerza.

El viento helado sopló, alertando a Melissa de que la ventana que daba al jardín trasero se encontraba abierta.

De inmediato se acercó, mirando a lo lejos una silueta alejarse. De la nada se pierde entre las sombras de la noche.

______ ¡Guardias!

_______ ¡Guardias!

Al escuchar los gritos de desesperación. Loa dos hombres que se habían quedado afuera entraron.

_______ ¡Abran esa puerta!

Los dos hombres obedeciendo la orden de Melissa, empujaron la puerta del baño. Fue derrumbada a los pocos intentos.

Melissa ingresó al interior del baño. Siendo testigo de las heridas en el cuerpo de Cristal. La joven modelo se encontraba en la tina, fue atacada mientras se daba una ducha.

No le dieron tiempo de reaccionar, y fue atacada hiriendo de gravedad su cuerpo.

_______ ¡Qué esperan! ¡Saquenla de ahí y llevarla a la cama!