Una maldita casualidad me hizo acabar casada con el tío de quién juraba amarme. Todos me mintieron, me usaron y me manipularon a su antojo. Ahora serán ellos los que deban pagar por su osadía.
Fui una ingenua, alguien que creyó ciegamente en todos pero luego me di cuenta de que nada es lo que parece. El demonio se oculta detrás de las más hermosas y pacíficas personas.
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Capítulo 6 SANGRE
...DORIAN CERVANTES...
-Así que querías irte, las lágrimas aquí no valen nada después de haberte metido a mi cama- la ví con enojo, así tuviera que apuntarle con una maldita arma le sacaría la verdad a como diera lugar
-No sé cómo llegué aquí, quiero a Iván, no a ti- y ahora mencionaba a mi estúpido sobrino
-¿Esperas que te crea? ¿Cuánto quieres?- me miró ofendida y desconcertada
-Quiero irme al último rincón del mundo si es preciso y si no me crees es tu problema- la ví frotarse el vientre, se veía enojada pero las personas como ella suelen mentir muy bien
-Yo no te toqué y esperas que yo crea que eras virgen como dicen tus padres- me rei en su cara virgen y novia de Iván que se tira hasta un palo con falda, si como no
-¡ME IMPORTA UNA MIERDA LO QUE CREAS!- gritó con furia
-Y a mí lo que tú me digas, tienes sangre- miré su entrepierna y se teñía de rojo
-AHHH MALDITO DÍA, NO ME MIRES- la miré enarcando una ceja- QUE NO ME MIRES MALDITA SEA
Se encerró en el baño y yo pedí que trajeran más ropa para ella, la sangre tenía explicación. Además de eso se ponía de mal humor, ¿Cómo espera que esté yo? ¿Feliz?
Abrí la puerta del baño cuando me entregaron otro cambio de ropa para ella y me gritó más que enojada.
-LARGO DE AQUÍ
Luego de meterse a mi cama se hace la inocente palomita y además vergonzosa. Que día de mierda.
La charla que tuve con sus malditos padres me hizo hervir la sangre y aún me enfurece a cada segundo que pasa. Quisiera sacarla del baño por los cabellos y tirarla a la calle pero no puedo hacerlo, al menos no por ahora.
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Minutos Atrás...
Luego de vestirme y ordenar ropa para la mocosa que se atrevió a meterme en éste problema fui a hablar con esos dos imbéciles que esperan y me trague el cuento de "hacerme responsable" de su hija quien tiene los ojos llorosos como si no conociera las de su clase. Las mujeres han llegado a hacer de todo para amarrarme pero ésto es el colmo.
-Se aprovechó de nuestra hija- me dijo la maldita vieja fingiendo indignación
-Le recuerdo que su hija estaba metida en mi habitación, en la casa de un hombre soltero además- la miré a los ojos, que ni piense que me iba a intimidar
-Aqui había una fiesta y ella estaba con Iván, seguro la drogaste para aprovecharte de ella- el viejo se creía con más confianza para dirigirse a mi como si fuéramos cercanos
-Yo no toqué a su hija- era la verdad
-¿Y como explicas la sangre?- buena pregunta, ni yo lo sabía- Tienes que casarte con ella
-Ni que estuviera loco, seguro están buscando dinero- puse mi chequera sobre la mesa, se que tengo muchísimo más que ellos
-Es tu deber pagarnos por tal humillación, ademas no esperarás que nos encarguemos de los gastos de la boda nosotros sin tu colaboración- la vieja permanecía callada asintiendo a todo lo que su esposo decía
-¿Y si no me caso que va a pasar?
-En ese caso haremos inmediatamente un análisis a nuestra hija, además la sangre en las sábanas y varios testigos presenciales dirán que te aprovechaste de ella, tienes más de treinta años y ella apenas acaba de cumplir la mayoría de edad. No creo que te convenga un escándalo- miré a ese tipo con furia, tenía razón
-Esto es todo y se largan- les di un cheque generoso y se levantaron para irse pero antes de salir me miraron satisfechos y con arrogancia
-Aun debes responder por nuestra hija- alcé una ceja
-Lo haré pero será a mi manera- asintieron satisfechos y se fueron los hijos de puta
(........)
La mocosa salió del baño con los ojos rojos e hinchados, así que siguió llorando, como si eso me fuera a convencer.
-Harás lo que yo te diga- la miré fijamente y aunque se asustó no retrocedió ni me evadió, interesante
-Ni que fueras mi padre- me retó usando el mismo tono que yo
-Te casarás conmigo aquí en una semana, no tienes permitido salir y cuidado con lo que haces- abrió la boca sorprendida
-Se te perdió un tornillo, ni loca. Jamás me casaría contigo- quiso salir del cuarto pero yo había cerrado con seguro la puerta
-Puedes llamar a tus padres para saber que opinan al respecto- le ofrecí mi teléfono
-TE ODIO- gritó e intentó golpearme
Volvió a encerrarse en el baño para que no la vea llorar, esto es tratar con niños. No sé si me irrita más ella o sus padres.
Aunque hay algo extraño aquí en todo ésto. En su brazo derecho hay marchas, parece como si alguien hubiera ejercido presión. Alguien la sujetó, esto cada vez me gusta menos.
