Amor O Dinero

Jairo parqueó su auto un Mazda gris último modelo, y se dirigió hacia el primer piso del restaurante Asados, era uno de los pocos lugares finos y elegantes en aquel pueblo, el cual se había inaugurado hace unos pocos meses. Subió las escaleras con firmeza y seguridad al andar, miro en el interior del restaurante y finalmente al fondo los miro, sentados en una mesa pegada a la pared, junto a un gran ventanal adornado con flores de colores llamativos, Arturo hablaba con una mujer rubia que estaba de espaldas en ese momento. Se dirigió hacia ellos y de pronto, no creía lo que estaba viendo frente a él, - su niña Mary- mirándolo fríamente.

Arturo: Acaba de entrar, debes prepararte hermanita. Viene hacia acá - dijo Arturo con algo de temor en la voz.

Maryan: ya - simplemente respondió tácitamente- mientras su corazón latía más fuerte, su pulso se aceleró y comenzó a sudar levemente. No podía dejar que eso pase, él lo notaría,. Debía disimular. Lo haría de eso dependía todo. Lo tenía enfrente con aquella mirada penetrante, poderosa, vivaz y dominante. No pudo sostenerla y volteo su rostro.

Arturo dándose cuánta de ello intervino y dijo tranquila y amablemente.

Arturo: buenas tardes, don Jairo, lo estamos esperando, siéntese. Le voy a presentar a mi socia y gran amiga Maryan Arce Alcázar.

Jairo: buenas tardes, ya nos conocemos con la señora, somos viejos amigos.

Arturo: vaya! Que sorpresa no lo habria imaginado, dijo con tono de sorpresa.

Maryan: si,. Hace años y ahora la vida volvió a cruzar nuestros caminos

Jairo : si la vida - dijo con un tono de burla - mientras fijaba sus ojos negros y profundos en sus labios rojos carmesi que deseaba besar apasionadamente.

Maryan: bueno entonces siéntese don Jairo. Dijo indicándole la silla al lado de Arturo,además de ese modo estaría frente a ella y podria tener el placer de analizarla más concienzudamente.

Maryan: debemos pedir ya el almuerzo, ya es tarde, la una y media. Me imagino que aún no almuerza Jairo o si? Sabía que así distraería un poco a ese hombre, conocía su apetito y de ese modo dejaría de verla como si quisiera devorarla ahí mismo. Lo cual la inquietaba y colocaba nerviosa.

Jairo: se imagina bien,... Pero si, tengo mucha hambre contenida y ahora precisamente me dió mucha mas...dijo mientras reía pícaramente y la seguía mirando fijamente, como para no perder un solo detalle de ella.

Arturo miró su teléfono rápidamente y dijo: que pena con ustedes, se me acaba de presentar un asunto que debo atender urgentemente, los debo dejar.

Maryan: con tono de preocupación respondió- pero dime qué pasó, si te puedo ayudar en algo. Dímelo.

Arturo: tranquila no es nada grave, créeme sino tú serías la primera en saberlo. Me voy,.más tarde hablamos. Que disfruten del almuerzo.

Jairo: bueno Arturo que solucione sus asuntos.

Estaremos hablando y

dijo- mientras pensaba en lo afortunado que era,. Se quedaría solo con su niña, perfecto podría tenerla a su merced - y rio maliciosamente.

Maryan: bueno Arturito. Vete con cuidado. Adiós. Más tarde hablamos. Se despidieron dándose un abrazo de despedida. Todo estaba saliendo a la perfección se dijo ella mientras se acomodaba en el asiento y cruzaba las piernas dejando ver alguno de sus muslos a propósito.

Jairo miró aquel gesto y sintió como su miembro comenzaba a crecer de forma instantánea. Aquella niña o mejor dicho, aquella mujer porque ahora lo era, lo volvía loco de deseo. Aquel deseo que nadie había logrado revivir, se acomodó en su silla y dijo:

Jairo: que gran sorpresa volverte a ver, pensé que nunca más nos íbamos a encontrar y menos en esta situación.

Maryan: yo igual pero ya ves como es la vida, da muchas vueltas. Pero bueno pidamos la comida y seguimos charlando tengo hambre.

Jairo asintió sin decir nada más, aunque en su mente tenía mucho que preguntar y saber.

Maryan: bueno debes preguntarte porque volví a estas tierras y a buscarte a ti específicamente.

Jairo: si, aunque sospecho algunas razones.

Maryan: bueno no sabría decirte si estás acertando con tus sospechas, yo simplemente quiero invertir un capital en un buen negocio y aprendi que el transporte terrestre lo era, sobre todo en esta zona del país, y tú eres una persona con mucha experiencia y conocimiento en el ramo, además que posees una gran ambición al igual que yo.

Jairo escuchaba atento mientras ella hablaba, había algo distinto en ella, había seguridad, desenvolvimiento y algo más... Algo que no sabía definir aún.

Jairo: así es. Pero hay muchos otros que podrían ayudarte y ser tus socios en este nuevo proyecto.

Maryan: seré sincera, creo en aquel refrán que dice: más vale malo conocido que bueno por conocer. Así de simple Jairo.

Jairo: hummm... Vaya crees que soy malo. Te equivocas.

Maryan: tengo presente que cuando necesite de ti, simplemente desapareciste. Mientras que yo hacía hasta lo imposible por ayudarte en tus negocios haciendo.que ganaras más dinero del que tenías, así sea que... Dudo en continuar.

Precisamente en ese momento el interrumpió y con algo de enojo dijo:

Jairo: no digas cosas que no son, te ayude y me ayudaste, luego dijiste que necesitabas un nuevo amor, entonces me dejaste.

Maryan: jummm esa ayuda que me brindaste... en fin... tome la decisión de alejarme de ti porque pensé que así verías lo que perdías y decidirías buscarme, ayudarme... Era aún ingenua, confiaba en ti, te admiraba... Y te amaba. Y continuo diciendo con algo de enojo reprimido- Bueno fueron errores que cometí y que ya no importan hoy en día. Ya todo eso pasó y cada uno siguió su camino. Hoy lo único que necesito es alguien dentro de coonascol y así poder invertir mi dinero porque algo tengo claro y es que ahí hay dinero, pero también mucha corrupción y maldad, de modo que necesito un aliado y de ese modo proteger mi capital y hacerlo crecer a través de los medios que sea necesario.

Jairo: claro te puedo ayudar con todo lo que necesites, siempre te considere alguien especial Marysita, paso su mano por encima de la mesa y cogió su mano, en ese momento pasó una corriente de energía a través de ambos.

Maryan: apuro a soltar su mano de su agarre y continuo diciendo con voz calmada: quizá sea así, no lo s,, pero de cualquier modo, lo primero en que necesito tu ayuda es contactando a los hombres que les quede debiendo el dinero de la paga diario. Necesito hacerlo para negociar con ellos el pago, se que tienes contactos en los bajos mundos y de ese modo puedo hacerlo sin temor a que me maten, además si saben que tú me apoyas y proteges es mejor.

Jairo: ya veo, eso es delicado, pero si tienes el dinero se puede negociar. dejame ver qué puedo hacer.

Maryan: gracias, y también a contactarme con el viejo zorro del Húmedo, porque necesito pagarle esa plata que también le quede debiendo y limpiar mi imagen en algún porcentaje en coonascol. Se que al final mi hermano le iba a pagar; sin embargo, no sé si lo hizo realmente.

Jairo: en eso te puedo ayudar más fácilmente, tranquila ahora que esté en Montezuma hago esa investigación y te aviso. Por ciento te llamé y escribí muchas veces, pero ese teléfono ya no está en uso.

Maryan: tengo otro número, debía cambiarlo por muchos motivos. Cometí muchos errores por tonta, pero ahora pretendo corregir todos esos errores. Espero que por ese aprecio que dices sentir me ayudes ahora y bueno al fin y al cabo tendrás también más dinero del que ostentas, ya que nuestra sociedad será muy fructífera.

Jairo: vaya ahora ya lo tienes claro, está muy bien. El dinero es la base de todo y sin él solo somos unos don nadie. Por medio del dinero, todo se puede conseguir y pues en mi élso, tengo mucho y sé aprovecharlo al máximo. Además, el poder que da el dinero es indescriptible e imprescindible.

Maryan solamente lo escuchaba en silencio, ese era él, un hombre materialista, egoísta, ambicioso y vil. Pero al mismo tiempo un hombre justo, sincero a veces y con matices, algo que ella había logrado conocer. Que complicado sería todo esto. Pensó amargamente.

Maryan entonces comenzó a comer y él siguió su ejemplo. Se quedaron callados sin mirarse.

Jairo la miraba pensativa y lejana. Iba a ayudarla por dos motivos muy especiales: dinero y deseo.

Sentía como su deseo por ella aumentaba, la deseaba igual o más que antes, estaba perdido en su fragancia, en su belleza... seguía siendo tan atractiva como en aquel entonces, sabía que era inteligente, que podía lograr lo que quisiera y tenía ese corazón tan generoso, era una buena chica... algo que él usaría para dominarla y manipular, ese era su actuar con todas las personas, su intuición no le fallaba, si ella estaba ahí era por el..... Aún lo amaba...su niña todavía era suya. Sabía cuál era el paso a seguir, saciar su deseo y el de ella porque se notaba en sus ojos, aquella llama de pasión y deseo que solo el conocía y lo hacía estremecer.

Jairo comió ansiosamente su carne al carbón mientras, yo ahí estaba intentando también almorzar mi ensalada de verduras y atún, me decía para mis adentros que era una estúpida por estar ahí, con él. Arturo tenía razón era peligroso, podía salir nuevamente herida, meterme a la boca del lobo otra vez era demasiado arriesgado. Pero entonces mire por la ventana una familia compuesta de tres personas, papa mamá e hijos seguramente, felices riendo y jugando...sería acaso imposible eso para mí obtener...y amor pasión además, quizá eso existía aún con el y podria ser algo más ... de pronto salí de mis pensamientos, el me decía algo.

Jairo: ya regreso. dijo voy al baño y a cancelar la cuenta.

Maryan: pero aún no hemos concretado nada.

Jairo: ahora hablamos y me das tu número para estar en contacto socia. dijo coquetamente.

Mire como iba, cancelaba la cuenta y se dirigía al baño, de modo que había decidido llevarme fuera de mi sitio seguro, perfecto entonces adelantemos los planes - se dijo a sí misma.

Me fui levantando de la mesa y me dirigi a las escaleras que iban al garaje, estaba bajando cuando lo sentí a mi lado. De pronto paso su brazo por mi cintura, lo cual me hizo estremecer todo el cuerpo, volví a sentir su perfume y su olor. Bajamos en silencio. Cuando llegamos al auto de la nada se acercó y me dijo:

Jairo: ahora que estamos solos necesito de ti. Son muchos años sin sentir lo que solo tú puedes hacerme sentir. Mientras me acorralaba contra el auto y la pared que había allí, estaba oscuro y solo. Acercó sus manos a mi cintura y me apretó contra el, se acercó a mi boca y me beso con pasión.

Jairo como el mujeriego que era, conocía como envolverla y llevarla a sus brazos, lo haría allí mismo, ahora no importaba que alguien los viera, era en lo último que pensaba. Necesita de ella… De su cuerpo.

Maryan no sabía cómo detenerlo y menos si queria que lo hiciera...con esfuerzo balbuceo: déjame, solo te necesito para el negocio,...por favor.

Jairo la escucho y respondió - para esto también me necesitas y mucho dijo. Se que sientes lo mismo que yo, nada a cambiado entre los dos. Mira como tiemblas.

Maryan sabiendo que ya no podía resistirse y que tenía razón, solo logro pensar en su reputación y dijo: entremos al carro entonces.

Jairo la soltó dejándola libre para que quitará el seguro del carro, abrió luego la puerta de atrás primero entro ella y luego el de manera ágil y rápida, allí se entrelazaron en besos y caricias , dando inicio a una locura de pasión y sexo.

Terminado su encuentro amoroso, dijo el rompiendo el silencio que los rodeaba: estás más hermosa, que antes. Después cogió mi celular y dijo: desbloquea y dame tu número.

Y sonrió pícaramente, cerro sus ojos por un momento rememorando y sintiendo como volvía a ser como antes y aún mejor pensó para si. Sintió como ella le arrebataba nuevamente el celular y la escucho decir:

Maryan: regálame el tuyo, y te timbró y así guardas mi contacto.Decia esto mientras desbloqueaba su celular.

Jairo: ven...cogió nuevamente mi celular y lo grabó rápidamente.Me llamas, ya sabes en horas laborales, es mejor evitar problemas.

Nuevamente con aquello, si tan solo cumpliera con lo que dice, pero nunca lo hizo y ahora sabía que tampoco lo haría. Volverian los celos, la persecución e investigación constantes. Seguía siendo el mismo hombre celoso y posesivo de antes. Al cual le importaba poco, hacer las cosas de manera cuidadosa. Pero aún sentía aquella felicidad, ese latido fuerte del corazón , ese algo que la dejaba sin respiración. Que tenía ese hombre que la hacía sentir así, como lo odiaba por hacerla sentir débil y sumisa. Eso no volvería a pasar, se lo había jurado y lo cumpliría.

Jairo por su lado tenía una sonrisa de lado a lado, pensaba en todos aquellos momentos que a solas le había hecho el amor en su mente.Ella hacía su vida mejor, le daba esa chispa que necesitaba para soportar tantas cosas. Cuando la miraba sentía el inmenso deseo de poseerla y

de tenerla solo para el. Ahora estaba aqui y nuevamente, había sido suya. Recordó su error provocado por el éxtasis y la locura, no quería más hijos, era algo imperdonable. Pero bueno lo hecho, hecho estaba y que bien la había pasado. Volvería a repetirlo muchas más veces, las que el quisiera.

Maryan: y eso que ahora fuiste descuidado, es raro. Nunca lo fuiste, recuerdo que más de una vez dijiste que no querías tener más hijos.

Jairo: fue un desliz, me deje llevar por la pasión. Me provocas demasiado. Continuo diciendo debemos pasar una noche completa, no lo crees.

Maryan: no creo, esto fue un error que no pienso repetir, los negocios y el sexo no deben mezclarse. Eso ya lo aprendí.

Jairo comenzó a vestirse apresuradamente y le respondio fríamente: bueno entonces. Pero estuvo bueno o me lo vas a negar, este encuentro inesperado fue de lo mejor.

Maryan que ya había terminado de vestirse, bajo del auto y dijo: ojalá nadie haya escuchado lo que pasó, que vergüenza.

Jairo bajo por el otro lado del carro y dijo: no creo, sino pues ya pasó y no importa. Para la próxima toca tener un sitio más adecuado, lo cual dijo con gran seguridad.

Maryan: estás muy seguro que abra una próxima vez, pues te cuento que estas equivocado. Será mejor que se haga el negocio a través de Arturo. Ahora organizo con el lo referente al negocio de ese modo tu y yo no tendremos contacto alguno.

Jairo: como quieras pero algo si te digo, esa estrategia no te durará mucho tiempo. Más pronto de lo que crees estarás conmigo. Y le pico el ojo maliciosamente.

Maryan: Definitivamente, sos un patán de lo peor. sigues siendo el mismo de antes. Te odio. Dijo enfurecida. Y prosiguió diciendo: Mejor me largo de aquí. Paso al puesto del conductor rápidamente, encendió su auto, y salio del parqueadero. Por el retrovisor miro como el se despidió de manera burlona.

Había salido todo como lo pensaba, ahora estaba nuevamente obsesionado con ella, y más al parecer. Un ejemplo de eso era que había olvidado su regla de cuidarse para no tener más hijos, porque eso era un peligro, salir embarazada era lo peor. Y hoy allí estaba aceptando que por mi había olvidado algo tan vital.

Lo haría enamorarse perdidamente de ella, la amaría, lo haría. Esa era su meta y la alcanzaria con los métodos que fueran necesarios.