"En el silencio de una boda forzada, un corazón late con miedo y desesperanza. La novia, con un vestido blanco que contrasta con su alma oscura, se siente atrapada en una vida que no eligió. Su mirada seria esconde un secreto, un dolor que la consume por dentro. ¿Podrá encontrar la fuerza para liberarse de las cadenas que la atan, o permanecerá atrapada para siempre en este matrimonio sin amor?"
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capitulo 4 PRUEBAS EN SU CONTRA
Elena se dirige al estudio de Alejandro, decidida a hablar con él
_Elena_
Alejandro, necesito hablar contigo.
_Alejandro_
¿Qué pasa, Elena?
_Elena_
Sofía se enteró de lo que pasó entre tú y Valeria. Y no está contenta.
_Alejandro_
¿Qué? ¿Cómo se enteró?
_Elena_
No importa. Lo que importa es que te alejes de Sofía. Ahora.
_Alejandro_
No puedo hacer eso. La amo.
_Elena_
Te alejas de ella, o vas a pagar las consecuencias.
_Alejandro_
No me importa lo que hagas. No me alejaré de Sofía.
_Elena_
Muy bien. Pero no digas que no te advertí.
Elena sale del estudio, pero no se da por vencida. Comienza a planear una manera de incriminar a Alejandro
Elena se reúne con Martín, abogado de la familia Montenegro y le pide que fabrique pruebas falsas para incriminar a Alejandro de estafa y no sé qué otros cargos.
_Martin_
Elena, esto es ilegal. No puedo hacerlo.
_Elena_
Por favor, hazlo. Necesito proteger a mi hija.
_Martin_
Está bien. Pero si nos descubren, nos meteremos en un lío grave.
Elena asiente y el abogado comienza a fabricar las pruebas falsas, pues así ella confía que su hija por fin va estar mejor sin ese hombre en su vida.
Los días pasan y Alejandro es arrestado por la policía.
_Alejandro_
¿Qué pasa? ¿Por qué me arrestan?
_Policía_
Alejandro Martínez es acusado por el delito de estafa y otros cargos en su contra
_Alejandro_
Esto es un error. No he hecho nada.
Pero las pruebas falsas son convincentes y es llevado a la cárcel.
desde la cárcel, llama a Sofía por teléfono
_Alejandro_
Sofía, por favor, ayúdame. Me han acusado de algo que no hice.
_Sofía_
¿Cómo puedes pedirme ayuda después de lo que me hiciste? Me engañaste, me traicionaste... ¿cómo puedes esperar que te ayude?
_Alejandro_
Sofía, por favor, escúchame. Me han tendido una trampa. Necesito tu ayuda para salir de aquí.
_Sofía_
Cada palabra que me dices es como un cuchillo en mi corazón. ¿Cómo puedes ser tan cruel? Me amabas, ¿verdad? ¿O fue todo mentira?
_Alejandro_
Sofía, no, por favor... te amo. Haré cualquier cosa para recuperar tu confianza.
_Sofía_
No, Alejandro. No te creo. Todo lo que me está pasando es porque tú te lo buscaste. Tú te mereces todo lo que te está pasando.
_Alejandro_
Sofía, por favor... no digas eso...
_Sofía_
Aléjate de mi vida, Alejandro. No quiero saber nada de ti. No quiero verte nunca más.
Alejandro se queda en silencio, escuchando cómo Sofía cuelga el teléfono
_Alejandro_
No, Sofía... por favor...
Sofía no podía parar de llorar. La traición de Alejandro la había destrozado por completo. Se sentía como si su mundo se hubiera derrumbado. No podía creer que el hombre al que amaba fuera capaz de engañarla de esa manera.
Mientras tanto, Alejandro en la cárcel estaba sufriendo por la ausencia de su amada. No podía parar de pensar en Sofía y en lo que había hecho. Se sentía como si estuviera en un infierno.
Gabriel, por su parte, estaba haciendo lo necesario para poder hablar con Leonardo y pedirle que le perdonara la deuda. Sabía que no era fácil, pero estaba dispuesto a hacer lo que fuera necesario para proteger a su familia.
Después de varios días de intentarlo, Gabriel finalmente logró hablar con Leonardo. Le explicó la situación y le pidió que le perdonara la deuda. Leonardo se mostró comprensivo y le dijo que estaba dispuesto a perdonarle la deuda, pero a cambio de algo.
