Solo Quiero Que Me Ames

Alex comenzó a preguntarse qué había sucedido, no era lo que esperaba de Elizabeth, pero él realmente pensó en tratarla de la misma forma como ella lo trata a él, entonces Alex llegó a la conclusión de que Elizabeth también amaba alguien, había alguien que se ganó su corazón antes que él, pero se sentía tan confundido y pensó, quizás solo eran sentimientos encontrados porque Elizabeth siempre fue la chica que Alex soñó, y que la tenga a su lado como su esposa es algo irreal.

Narra Alex

Me prohibieron trabajar así que me dieron un mes de vacaciones por recién casado, debía aparentar delante de los demás, pero ahora como dire que mi esposa no pasó conmigo ni siquiera la noche en el mismo lugar, ja!, que risa, iba hacer lo mismo que ella, que es esto, mi orgullo dañado quizás.

Mande a Raúl mi secretario a comprarme un ramo de flores para dárselo a Liliana, fui a visitarla a su departamento, no sabía que iría así que es buena idea sorprenderla, entonces me acerqué poco a poco hasta la puerta pero sentí algo extraño en mi pecho, sentí como si algo no estuviera bien, así que me apresuré y toque la puerta y una voz de hombre me sorprendió, cuando abrió la puerta estaba solamente en ropa interior, tenía todo el cabello desaliñado y me miro fíjamente y solo dio una sonrisa burlona, giro y le grito a Liliana, “amor creo que te buscan” , ella respondió con un “ ¿quien cariño?” En ese momento me sentí como un completo idiota, tan idiota, en cuanto ella me vio, se sorprendió tanto que quiso explicármelo, pero toda la explicación estaba dicha, ellos pasaron una apasionada noche juntos a lo que pude ver, tiré el ramo al piso y caminé para salir de ahí, ella fue detrás de mi y me abrazó dijo que no era verdad, que el abuso de ella y muchas mentiras mas, me lloro inocentemente pero, porque todo cambio, porque no dolió tanto como esperaba, quizás porque en el fondo sabía la verdad y sabía que mi familia tenía razón, pero me negué en aceptarlo, la solté de su agarre y salí corriendo, ella quería ir detrás de mí así que Raúl la detuvo, estaba tan furioso, sentía que quería matar a alguien, mucho dolor en mi pecho, tenía tantas ganas de llorar porque al fin ví la realidad que estuvo tanto tiempo cegándome que me perdí.

Le pedí a Raúl que me llevara de vuelta al hotel donde estaba y que me hiciera una profunda investigación sobre Liliana, me di un buen baño y me fui a mi habitación, quizás esto era lo que necesitaba de antemano. No e sabido nada de Elizabeth desde anoche, pero quizás ni le importa avisarme. Quien sabe que este haciendo.

Narra Elizabeth

Mi boda salió como se planeó, todo salió al pie de la letra sin ningún error, Dios porque me pasa siempre esto a mi, le dejé en claro las cosas a Alex sobre nuestra relación, se que tiene alguien y todo va a estar bien, dos años con eso tengo para que mis padres me dejen en paz con este tema, dios me siento furiosa conmigo misma y me odio a más no poder. En cuanto termino de poner las cosas claras, me entra una llamada súper importante de él, Dios mío me preocupe tanto, porque jamás me llama al menos que sea grabe, lo deje solo y me puse lo primero que encontré, sali corriendo del hotel, tomé un taxi y me dirigí al hospital Júpiter, donde estaba alguien muy importante para mí. Corrí por los pasillos hasta llegar a su habitación, y ahí está él, la persona más hermosa del mundo y el amor de mi vida Héctor Haddison. Estaba tan débil que lo vi sufriendo, con su tono de voz tan débil solo dijo..

- Héctor: Viniste.. - dijo esas palabras con una sonrisa sincera.

- Porque crees que no iba a venir, si se trata de ti - respondí con un poco de gracia.

- Héctor: lamento molestarte el día de tu boda Elizabeth … - voz débil.

- Por favor no hables más, tú sabes bien que es una boda que yo no quice desde el inicio, jamás hubiera aceptado si tú no me lo hubieras pedido -

- Héctor: Elizabeth, mi niña hermosa y encantadora, que afortunado soy de tenerte a mi lado, le debo una disculpa a tu esposo por robarte en este día -

- Basta Héctor por favor no sigas, tu estarás mejor y todo saldrá bien, en dos años me divorciaré de Alex y yo… -

- Héctor: ¿Porqueeeeee? *Sorprendido*

- Él puso esa condición y voy a respetarla- por Dios Héctor cada vez estás más pálido, se que no quieres comer pero, pero…

- Héctor: oh es una lástima, si es así te buscaré otro -

- Basta!!! Héctor solo te quiero a ti - no debí de alzar la voz, pero estaba completamente furiosa ya no quiero escuchar esto y solté unas lagrimas.

- Héctor: ¿Por qué lloras?, no lo hagas, no vuelvo a molestarte Elizabeth -

- Porque querías que me casara con otra persona, dijiste que estaríamos juntos, ves esto, llevo puesto nuestro anillo de compromiso, pero tú -me aferre a él y me recosté en su pecho..

- Héctor: Ay mi niña hermosa, no sufras, Elizabeth sabes bien que él cancer me está matando, moriré y es oficial, no hay nada que pueda hacer cariño, solo tengo poco tiempo y lo sabes, quiero dejarte en manos de alguien que sé que te protegerá y te amará como yo lo hago, es mi último deseo - me levante a verlo y tomo mis manos y las beso, tan débil ver al amor de mi vida en este estado tan cruel y yo no puedo hacer nada, solo me recosté a su lado y comencé a llorar en silencio, él pudo dormir toda la noche pacíficamente solo porque estaba a su lado.

A la mañana siguiente debía irme así que no quice despertarlo y solo le di un beso en la frente y le susurré al oído que lo amaba, pero mis ojos vieron una escena que me partió el corazón, comenzaron a salir lágrimas de sus bellos ojos y entendí que para él también es muy difícil, así que debía poner de mi parte y dejar de reclamar toda esta situación.

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