El CEO Y Yo

Pasaron las noches y no vi más a ese hombre en el bar, pero no podía dejar de pensar en él

Esa mirada, esa boca...

Que se sentiría ser besada por él, muevo varias veces la cabeza para alejar esos pensamientos y seguir concentrada en mis ensayos. Todavía soy un poco torpe al bailar pero sin duda he mejorado mucho desde el primer día. Liss me a ayudado mucho al igual que Marissa y Penélope, ellas son las únicas con las que puedo contar, a las otras chicas les caigo mal y yo no sé porque.

Terminó mis ensayos y voy a casa, trato de no dejar mucho tiempo sola a mi madre, poco a poco he conseguido pagar las medicinas y una que otra deuda, se que pronto vamos a salir de esta situación...

Es de noche y ya estoy lista para salir a bailar, hoy me coloque una lencería muy sexy.

Salgo a bailar y sin pensarlo me veo buscando en el público a ese hombre que no sale de mi cabeza..

......Narra Miguel......

Ayer regrese de un viaje de negocios y no he podido sacar a esa mujer de mi cabeza, la quiero para mí, deseo tenerla en mi cama y poseer cada parte de su cuerpo.

Tengo que verla hoy o me voy a volver loco, ya hablé con mis amigos y quedamos de vernos ahí.

Voy en mi carro directo al bar, llegó un poco tarde pero ella todavía está haciendo su baile, hoy se ve muy sensual con esa lencería, ya estoy imaginando lo que voy a hacer con esa diminuta tanga que tiene puesta..

Veo a uno de los trabajadores y pido que envíen a Susej a uno de los cubículos privados.

Me pongo cómodo, con un vaso de whisky en mano espero a que llegue, me muero por besarla.

Esa mujer me está volviendo loco y solo la he visto bailar.

Entra y se me queda viendo, la música está un poco baja.

Ella comienza a bailar y yo solo la puedo mirar, se ve que mejoró su técnica de baile desde la primera vez que la vi.

No me resisto más y la tomo del brazo y la siento sobre mi, está temblando, no lo pienso más y la besó, ella responde de la misma manera que yo, es como si estuviera esperando ese beso.

Comienzo a acariciar todo su cuerpo y sé que lo está disfrutando tanto como yo, acarició sus nalgas y ella me agarra del cuello, subo mis manos a sus pechos y deslizó la pequeña tela y llevo mi boca a ellos, ella suelta un gemido que hace que mi miembro palpite dentro de mi pantalón, es tan exquisita, su piel es delicada y su aroma ese aroma al que te vuelves adicto.

Se comienza a mover encima de mí y ya no aguanto más, la dejo sobre el sofá y me quito con urgencia el saco y la corbata, ella se levanta y comienza a desabrochar mi camisa...

-Segura que quieres esto- le pregunto y ella solo mueve la cabeza en confirmación

-Necesito que me digas que lo quieres-

-Te deseo tanto como tú me deseas a mi- dice ella y con esa respuesta es suficiente para olvidar todo y poseerla a mi manera..

*Espero sus comentarios y me gustan en cada capítulo 🤗*