Te Amo A Pesar De...

Paul...

Entiendo que Isabella ha sido maltratada física y emocionalmente a extremos inhumanos. Quiero matar a todos aquellos que han perjudicado de una manera u otra a mi hermosa novia. Y quisiera decir MI MUJER, pero no, definitivamente aunque cada vez que nos besamos quisiera enterrarme en ella sin piedad alguna, NO soy un maldito neandertal que no se puede controlar.

Ya han sido varias las veces en las que me he tenido que bañar con agua helada o finalmente cuando ni una bañera llena de hielo me puede ayudar, me toca usar a la vieja Manuela. Solo tengo que pensar en la intensidad de sus besos y en los pequeños gemidos que deja salir cuando mi lengua explora su cavidad bucal, para ponerme duro como vara de acero e imaginar su cuerpo desnudo en medio de mis sábanas ¡para venirme como un puto puberto!

A veces me molesta ponerme así, pero a la vez, una sonrisa lobuna y hasta un poco perversa se dibujan en mi rostro, porque el día que la agarre, la dejaré sin poder caminar por unos 3 días. Su ternura y su inocencia la cambiaré por fuego y deseo. Juro que el día que yo me coma a esa mujer tal como me la deseo comer, voy a hacer que cambie su opinión de ella misma, haré que cambie su forma de verse a sí misma y lo más importante, haré que deje de lado ese maldito concepto erróneo que le metieron en la cabeza esa sarta de víboras que tiene por familia.

Estoy casi segura que detrás de esas sátrapas, debe haber montones de secretos y basuras escondidas que no les conviene sacar a la luz. Pero para mí, para Paul Alexander Volkov NO hay nada que este tan bien escondido como para que yo no lo encuentre. Todos los que han perjudicado de una manera u otra a mi hermosa y tierna novia que pronto será MI MUJER, pagará a un precio MUY alto todo lo que le haya hecho. Quien tan siquiera la haya mirado de una mala manera LO PAGARÁ. ¡YA ESTÁ DECIDIDO!

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Mientras Paul ya está tomando decisiones definitivas y sumamente decisivas, Isabella Spinelli Di'Giacomo también está intentando controlar todos los pensamientos negativos que llevan a su mente a siempre pensar que todo lo malo le pasará a ella. Debo creerle a Paul. El sí siente algo sincero por mí. Se repetía una y otra vez. Pero lo único que lograba con eso era aumentar su ansiedad. Y es que ya le quedaba muy poco de ese mes que se había tomado de vacaciones. Eso significaba que en 1 semana ella debía volver a Italia.

Algo dentro de ella le decía que podía confiar en Paul ciegamente, pero a la vez, sus temores y sus traumas en ocasiones gritaban tan fuertemente que rompían la delgada línea de confianza que lograba construir durante días enteros en los que ellos pasaban juntos. Aunque algo si debía admitir, pasar el día con Maripau y la abuela Hannah, era como si le tejiesen una nueva red en su mente. Una donde le dejaban muy en claro que la talla de la ropa NO la hacía mejor persona que otra.

Maripau una vez le dijo... No importa si eres talla 0 en la ropa, lo que importa es de que talla tienes el corazón. Hay algunas que están tan secas y amargadas que tienen el corazón en talla -0 y otras que lo tienen tan grande de envidia, celos y maldad que son talla 20. Y también existen aquellas que son como nosotras, que tienen un corazón de talla 16 (para no ser presumidas) pero lleno de amor por nuestra familia, de unión familiar, de cuidar de los nuestros. Somos rellenas por dentro y por fuera. Me causo risa que dijera eso. Pero entonces pensé y si, definitivamente conozco perfectamente muchos ejemplos vívidos en mi vida. Creo que mi abuela sería las que son -0 por lo amargada que vive y Regina sería talla 20 en maldad, envidia y celos.

Ese día salí de allí entendiendo que aunque vemos los cuerpos y podemos decir "es gord@ o es flac@" deberíamos conocer primero que talla son por dentro. Eso me quedó grabado en mi corazón y espero siempre ser rellenita por fuera, pero aún más por dentro. Siempre pensando en los demás, dando lo mejor de mí y compartiendo todo con lo que he sido bendecida en mi vida.

Entonces la determinación llegó... NO me permitiré ser una talla 0 por dentro. Quiero ser igual de generosa por dentro que por fuera. Y, ahora decido que disfrutaré esta semana que queda aquí con Paul. Sin importar nada más. No dejaré que aún sin estar presentes, esas mujeres arruinen mi vida y la oportunidad de ser feliz. Dijo mirándose seriamente al espejo de la habitación que estaba usando en la mansión Johnson.

El abuelo Nate y el Tito habían recibido a Isa como a una nieta más. Ella era feliz compartiendo tiempo con ellos. Con el Tito Brandon salió de compras y siguió armando un nuevo guardarropa. Con Pao lo había dejado a medias, pero con el Tito definitivamente había completado uno y hasta como para 2 años tenía. Con el abuelo Nate había jugado ajedrez y este había abogado por la senilidad para no admitir que era buena jugadora la condenada.

Y así, poco a poco había comenzado a formar parte de la familia que más adelante y sin ella saberlo, matarían a media Italia si fuese necesario para defenderla.

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Entre decisiones y decisiones, en Italia también se tomaban nuevas decisiones. La más anciana había ideado junto a Regina un plan para intentar hacer firmar a Isabella un poder irrevocable donde le cedía la empresa de vinos a ellas. Dejarla en la quiebra y que tuviese que volver a ellas arrastrándose como gusano.

Cierta vieja decrépita tenía años revolcándose con el abogado de la familia. Todo con tal y las cosas se mantuvieran a su favor, y el poder que necesitaban para arruinar a Isa estuviese seguro. La otra seguía con su próspera vida sacándole dinero a cuánto suggar le metía mano y la última, pero no por ello menos importante, seguía ocultando su gusto por las mujeres. Lo había tenido que ocultar de su madre, para no ser duramente castigada, pero siempre había tenido al amor de su vida escondida, a las afueras de la ciudad en una casa que habían construido entre las 2 desde hacía casi 40 años.

Lo que ninguna de las 3 sabía era que ya en la ciudad de New York, en el computador de Paul Volkov descansaba un detallado archivo con la vida de cada una de ellas, lo que intentaban esconder y peor aún, los delitos que seguían cometiendo hasta el día de hoy. La sonrisa en el rostro de Paul era lobuna, siniestra y espeluznante. No tienen idea de quien es ahora Isabella Spinelli Di'Giacomo. Es MI novia, pronto será MI MUJER, es la futura señora Volkov y es INTOCABLE. Culminó la frase dándole click a encriptar toda la información para que nadie aparte de él pudiese moverla.