Alejandro y Cassandra no se conocen, pero cada uno encontró el amor en otra persona y esto los llevó a un mundo de sufrimiento, por lo que se han jurado no volver a sentir amor por nadie más hasta que se encuentran.
¿Podrá haber una segunda oportunidad para el corazón de ambos?
NovelToon tiene autorización de luna infinita para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 4 - Sueños
Ya Cassandra lleva varias semanas viviendo en casa de su tío, en donde ya se han hecho la costumbre de levantarse cada día a las 5:30 de la mañana para trabajar en el huerto, después desayunar y cada día tiene una nueva actividad, lo que ha hecho que el tiempo pase volando.
Cada día Cassandra se sentía mejor consigo mismo y con su entorno, además sabia que ese cambio en su estado de ánimo era gracias a su tío y a todo el cariño que le estaba brindando, le ayudaba a tener el cuerpo cansado y la mente ocupada.
Ese día les tocaba visitar la casa hogar, sitio al cual le gustaba mucho visitar, ya que ayudaba en la preparación de la comida los niños que vivían allí, así como en su cuidado, a la vez que colaboraba con los quehaceres del lugar y eso los niños lo agradecían de la mejor manera, dándole mucho cariño.
Luego de un buen rato ya habían terminado todas las labores que tenían para ese día y ya estaban dispuestos a irse cuando el padre Joaquín y Cassandra fueron llamados a la oficina de la directora del lugar.
La mujer los recibió con una gran sonrisa y les agradeció por la ayuda que les brindaban, para después mencionarles que los niños tendrían vacaciones dentro de poco, por lo que requeriría mas ayuda en las próximas semanas.
-Mi sobrina practicó danza por muchos años y creo que será una buena profesora para las niñas – el hombre tenia una gran sonrisa y volteó a mirar al Cassandra
Ella sabía exactamente lo que estaba haciendo su tío, le estaba dando mas cosas que hacer, lo cual le ayudaría a estar mas tiempo ocupada, lo que hizo que se pusiera nerviosa ya que tenia algo de tiempo sin practicar.
De igual manera, entre su tío y la directora acordaron que daría las clases de 6 a 7 de la tarde, ella solo asintió como si aprobara la situación.
Al terminar los dos salieron de allí y se dirigieron a la casa sin pronunciar palabra, cuando entraron cada uno se fue a su habitación, Cassandra se sentía terriblemente cansada, se dio un baño y se acostó en su cama, el cansancio era tal que se quedó profundamente dormida tan solo tocó la cama.
De pronto estaba ella acompañada de Eduardo, se estaban besando y poco a poco los besos fueron subiendo de nivel, comenzó a sentir sus caricias, las cuales comenzaron siendo suaves y delicadas para después ser más pasionales y hasta agresivas.
Cassandra comenzó a asustarse y le pidió que se detuviera, aunque ella le pedía una y otra vez que se detuviera él no lo hizo y… se despertó, sentía como las gotas de sudor corrían por todo su cuerpo y las lagrimas comenzaron a salir como un torrente.
Puso una de sus manos en su pecho, mientras trataba de calmarse y de normalizar su respiración, sentía un dolor intenso en todo su ser, así que fue hasta la cocina a buscar un vaso de agua, no entendía como no pudo ver cuales eran sus verdaderas intenciones con ella.
Ahora que lo pensaba él siempre le había demostrado cuales eran sus intenciones reales con ella, el problema fue que ella no supo verlas a tiempo, él siempre quiso ir más rápido de lo que ella quería, no entendía que ella solo necesitaba vivir esa primera ilusión con calma, porque eso fuel él para ella, su primer amor.
Aun recordaba la vez en que cenaron en su departamento, él se puso de pie y la invitó a bailar extendiéndole la mano, ella se levantó y le siguió el ritmo, se sentía tan feliz de estar entre sus brazos, era la emoción más grande que podía sentir y todo cambió al sentir sus manos bajando de su espalda a otras áreas de su cuerpo.
Ella le dijo que se detuviera y le colocó las manos en su cintura, fue cuando comenzó a cambiar y su mirada ya no era la de un hombre enamorado, su mirada era seria y oscura, sin importarle sus palabras le tomó el rostro e invadió su boca, a la vez que ponía su mano en sus nalgas y las acercaba a él para que sintiera su dureza.
Cassandra solo pudo sentir miedo y con sus manos intentó separarlo de ella, intentó decirle que no se sentía lista para dar el siguiente paso en su relación.
-Eso debiste pensarlo antes de venir a mi casa, ¿Qué creías que iba a pasar al meterte en la casa de un hombre soltero? – la miró con malicia
El solo hecho de recordar esas cosas la hacían sentir mal y fue por eso que soltó el vaso que tenia en la mano, el cual al caerse hizo un gran ruido y la trajo al presente, por primera vez en su vida sintió que ese gran amor que había sentido se había convertido en odio.
Unos cuatro meses después Alejandro iba en el auto de su padre, habían ido a almorzar para celebrar un trato que acababan de cerrar con unos posibles inversionistas, los cuales le traerían grandes beneficios a la empresa inmobiliaria que tenían.
Su padre hablaba con una voz tranquila, aunque repetía una y otra vez que debía contar con su apoyo incondicional ante cualquier situación, ya hacía rato que Alejandro había dejado de escuchar el monólogo de su acompañante, solo asentía para que el creyera que le estaba prestando atención.
El auto se detuvo por la luz roja de un semáforo y Alejandro aprovechó para revisar algunas cosas en su teléfono, vio un mensaje que le había llegado y suspiró aburrido, así que levantó la mirada y comenzó a ver a las personas que pasaban por la calle cuando de pronto algo llamó su atención, eran unos ojos azules de una joven que iba caminando.
Siguió con la mirada cada paso que dio la chica y detalló cada aspecto de ella, llevaba un jean azul claro acompañado con una franela algo larga para su tamaño, además llevaba unos zapatos deportivos blancos e iba peinada con un molo alto que recogía su cabellera rubia.
La chica iba a tomar el autobús y al parecer sintió que alguien la estaba mirando, por lo que volteó justo hacia Alejandro y sus miradas se encontraron por unos segundos hasta que alguien la tropezó, haciendo que siguiera caminando y se subiera al bus.
Ella se sentó al lado de la ventana y volvió a ver al hombre de ojos oscuros que iba en un auto notablemente costoso y que era bastante guapo, pudo ver algo en él que le llamaba la atención, por lo que le regaló una sonrisa, era la primera vez que le sonreía a alguien del sexo opuesto en meses.
Porque están en ese estado tan depresivo??
Un comienzo distinto, me gusta.
veamos que sigue.