La Niñera Latina.

Fernanda: Papá, ¿qué haces aquí?.

Fabián: Vine a hablar contigo Fernanda, Quiero verte a los ojos mientras te digo todo lo que te amo hija mía.

Dijo acercándose a ella quien aún seguía sentada en la silla del comedor.

Fernanda: Que ha cambiado para que ahora vengas aquí.

Fabián: Tu madre en realidad, ella quiere hablar con Mónica para que así le quite a Tatiana, la verdad no sé cómo es su plan por qué no me lo dijo completo, yo la amo con todo mi corazón, pero por años la puse a ella antes que a ustedes y ya no más, sé que no merezco tu perdón por todo lo que has tenido que pasar, pero quiero esforzarme para tener un lazo contigo hija.

Fernanda: ¿No crees que es muy tarde para eso?.

Tú siempre hiciste lo que Tamara te pidió y aunque que sé que fuiste tú el que me ayudó a escapar de esa nefasta boda, no lo agradezco primero porque de todas maneras pensaba hacer y segundo por qué era lo menos que podías hacer por mí a ver cómo mi madre me quería casar con ese hombre.

Solo quiero que me respondas algo.

Fabián: Lo que tú quieras hija.

Fernanda: ¿Tamara fue capaz de matar por esa dichosa herencia?.

No quiero que me salgas con respuestas largas es un sí o un no.

Fabián: Es un sí, Pero ¿cómo sabes?.

Fernanda: Te recuerdo que estoy casada con unos de los hombres más poderosos de toda Asia la información llega sola cuando el dinero está de primero, es solo que me cuesta creer que haya sido capaz de matar a su propio tío, sinceramente quería pensar que solo fue un error del detective.

Fabián: No lo es, Pero no tengo pruebas de nada, lo descubrí por coincidencia, ella hablaba con su tío que aún estaba vivo, Pero el pobre debido a un derrame cerebral no podía hablar ni mover parte de su cuerpo.

Aún recuerdo ese día y me duele el corazón, el señor Gabriel fue como un padre para mí y me enseñó todo lo que sé del mundo de los negocios.

Fernanda: Siéntate conmigo a desayunar y me contarás todo lo que escuchaste y viste, no quiero que omitas nada.

Fabián: Está bien.

Ambos se sentaron y les trajeron el desayuno mientras Fabián comenzaba su relato.

Flashback.

Fabián: Yo iba subiendo las escaleras para la habitación de Gabriel ese día llegaba más temprano de lo habitual y quería darle la noticia de que gracias a un trato que había hecho nos expandiríamos a nivel internacional.

Pero al llegar a la puerta y abrirla un poco pude escuchar a Tamara hablando con él, al principio pensé en entrar y ya, pero escuché algo que me dejó helado.

Tamara: Cuando te piensas morir tío Gabriel, ya estoy cansada de tener que vivir con lo que nos das al mes, Fabián por respeto a ti solo gasta lo que tú le dijiste que se podía gastar y ya me estoy cansando de todo esto.

Me molesta que para los niños si no pusieras restricciones, pero a mí sí.

Pensé que con el medicamento que te he estado dando desde hace rato ibas a morir de ese derrame, Pero aquí estás vivo y molestando mis planes.

Fabián: Yo no podía creer lo que escuchaba, mi corazón latía tan rápido y fuerte que pensé que me daría un infarto ahí mismo.

Tamara: Pero bueno estando así como estás no puedes decir nada de mí que hoy te he dicho y tengo que admitir que se siente bien ya no cargar con ese secreto.

No me mires así, ya falta poco para que te vayas al infierno y así yo pueda disfrutar de todo tu dinero y ya no ser más la sobrina pobre que vive de la miseria que me da su tío.

Contigo muerto Fabián manejará todos tus bienes y yo podré darme la vida que me merezco, así que mejor termínate de morir para que así yo pueda llorar a mi pobre tío por unas cuantas semanas y ya después vivir mi vida de reina.

Fabián: Después de escuchar eso como pude volví a cerrar la puerta y corrí al cuarto de invitados que era el que estaba más cerca, me encerré en el baño y me tire al piso a llorar, tuve un ataque de pánico y estuve encerrado ahí por más de 2 horas.

No le dije nada por qué esperaba conseguir pruebas que la culpen del asesinato de su tío, pero resulta que hizo un buen trabajo, yo mande a hacer la autopsia de Gabriel y no encontraron rastro de nada, busque por toda la casa cuando ella no estaba, incluso le regale un viaje a París para que pasara su luto tranquila para así buscar libremente y ni así conseguí ninguna prueba, cuando tocó leer el testamento se puso furiosa porque no la dejo dueña de todo como ella quería.

En cambio dejo un documento donde yo manejaría las empresas que ya tenía tiempo manejando y la otra parte de su fortuna era para ustedes, pero con la cláusula que tenían que estar casados para poder recibirla y en caso de no quererla pasaría a ser de ella.

No entiendo por qué esa cláusula, yo por mi parte no puedo pasar las acciones que están bajo mi poder a ella, básicamente le dejo comodidades, pero no poder que era lo que quería desde un principio.

Tal vez al ustedes presentarse y pedir la herencia se sepa porque el dejo todo así, además su madre los quería casar con gente de dinero para que así le den esa herencia sin problemas.

Fernanda: Papá y no era más fácil hablar con nosotros y decir que ella quería la estúpida y el dinero y nosotros sin pensarlo se la hubiéramos dado, pero Mónica no es una mujer de dinero.

Fabián: No, Pero tiene algo que otras mujeres no y eso es las mismas aspiraciones de tu madre por el poder y el dinero, no me dijo nunca que le prometió o que le dio, además tu hermano ha sido muy exitoso por su cuenta sin necesidad del dinero que poseemos.

Fernanda: Sabes de alguna manera agradezco que nos cuidaras desde las sombras, Pero no borra lo vivido durante todos estos años.

Fabián: Lo sé hija mía y de verdad lo siento mucho, quiero cuidarlos desde ahora aún cuando no me necesitas con Tomioka cuidándote.

Fernanda: Eso explica porque extrañamente no quiso desayunar conmigo está mañana, sabía que vendrías.

Fabián: El me dio la oportunidad de acercarme a ti y no la voy a desaprovechar.

Fernanda: Te quiero papá, voy a creer en ti.

Ambos se dieron un gran abrazo como señal de unión familiar, se necesitaba esa conversación para de alguna manera tratar de reparar lo que se había roto.