Juntos A La Felicidad

El otoño llegó al fin, aún que afuera hacia frío en el corazón de Alison había calor, se aferró con todas las fuerzas de su cuerpo, estaba agradecida con este hombre, le ha ayudado en todo desde el momento en que se conocieron. El beso se estaba prolongando, y en consecuencia el cuerpo de Hugo se lleno de calor y deseo, apoyo sus manos al rededor de ella sobre la cama, trato de lucir calmado pero su deseo se estaba apoderando de él,

- Alison, no sigas o no podré contener mi deseo por ti

Ella no escucho las palabras de advertencia de su esposo en cambio profundizó aún más el beso, poco hizo él para terminar con la acciones de ella, las ropas fuero arrancadas de sus cuerpos, él no podía esperar para estar por fin con ella, fue una larga noche para Alison, por más que el trato de ser cuidadoso, a la segunda vuelta el perdió el control y la hizo suya por completo, a su manera, se escucharon algunos gemidos y una que otra vez quejas de ella, pero jamás escucho que ella pidiera que se detuviera.

Ya era más de las diez de la mañana cuando ella comenzó a sentir incomoda la luz del día, su cuerpo se sentía muy cansado, la cintura dolía,

- ¡No tuvo piedad de mi!

Ella se estaba quejando sin darse cuanta que al rededor de su cintura estaba el brazo de Hugo su esposo, es tarde y él sigue en la cama, parecía como sí estuviera en un sueño profundo,

- Fuiste tu la que no pidió que parara

La voz de él la sorprendió, ¿no estaba dormido? Pero aún permanece con sus ojos cerrados,

- Estas..despierto...

- Claro que si,

- ¿No vas a ir a la oficina? Ya es tarde

En eso su cerebro hizo clic, ¡Debe ir a trabar! Como pudo se levantó de la cama, debía estar presente hoy, mañana será el día que el nuevo CEO por fin tome cargo, por la prisa que llevaba no se dio cuenta de cómo se encontraba, camino de un lado para otro, busco sus documentos y su ropa, Hugo quien la veía no podía evitar sonreír, esa mujer de verdad acabó con su resistencia, él también se levantó de la cama, camino hacia el baño, no sin antes jalar a ella de la mano para entrar juntos al baño, ella se encontraba desconsertada, ahí fue donde se dio cuenta de que paseo por toda la habitación sin una sola prenda en sima

- Debes tener cuidado, hace apenas unas horas cosumamos nuestro matrimonio, no creo que resistas una vez más,

Ella no dijo nada, solo trato de cubrir su delgado cuerpo con sus manos, mientras sus cara se ponía roja de la vergüenza, una sonrisa de ternura se hizo presente en la cara de Hugo, es tan lindo verle en ese estado,

- Vamos, tomemos un baño ,

Solo fue un baño entre pareja, no hay nada más que contar, él sabía lo doloroso que fue para ella seguir su ritmo, por lo que la dejo por hoy, le ayudó a bañarse y la llevó en brazos a la cama donde ella se quedó dormida nuevamente, estaba más tranquila, él se había tomado la molestia de avisar que no iría a trabajar, ambos pasarían el día juntos.

...

En una mansión en medio de la ciudad, estaba el abuelo de Alison, este estaba esperando la llegada de su esposa; Amelia, quien se encontraba de viaje

- ¿Porque me haz hecho volver?

- Debemos hablar de algo importante

La mujer de edad avanzada se preocupo al ver la cara seria de su esposo, dejo sus maletas a un lado y se sentó frente a él

- ¿Qué sucede?

El hombre entregó la carta que recibió la noche anterior, ella también reconoció la letra, sus manos temblaban, y sus ojos llenos de dudas lo miraban, trataban de obtener una respuesta de él; él solo asintió, debía leer la carta si quería que sus dudas fueran resueltas, empezó a leer la carta no entendía nada del contenido, ¿Quién era Alison? ¿Y dónde estaba?

- ¿De dónde sacaste esto? ¿Donde está el dueño de esta carta? ¡¿DONDE ESTA MI HIJA?!

Habían pasado tantos años que la mujer ya había perdido casi toda esperanza de volverla a ver, el hombre la entendían, pero ahora como explica que su hija, su pequeña mariposa había muerto hace muchos años

- Ella murió hace 12 años,

- Dime que no es verdad, ella no, no, ¡Nooo!

La mujer lo pudo con la desesperación, lloro a mares, tantos años guardando esa pequeña esperanza para que al final el destino se la arrebate de esa manera tan cruel, el hombre también lloro en silencio, sus lágrimas mojaba sus mejillas, la mujer no pudo más y se desmayo, fue una noticia demasiado fuerte para alguien con salud delicada, unas horas pasaron hasta que ella finalmente pudo estar tranquila, el médico de cabecera que siempre estaba en la mansión le había dado un fuerte calmante después de despertarla del desmayo, ya que se la paso negando a gritos la muerte de su hija,

- Amelia, debes ser fuerte, ella dejó una hija, debes verla, es casi idéntica a nuestra mariposa

- Una...hija...? ¿Tengo una nieta?

Octavio asintió con la cabeza, le enseñó una fotografía de ella, él la mandó a investigar después del encuentro, quería saber sí la historia que le había contado concuerda con su información y efectivamente, ella era la hija ilegítima de los Hills, nadie sabía de su existencia hasta hace unas semanas, con el incidente que hubo en el banquete de cumpleaños de la anciana Hills fue expuesta la identidad Alison. Octavio le contó la historia de Alison, la mujer reaccionó de la misma manera que él, estaba horrorizada con los eventos contados por él

- ¿Como puede ser tan cruel? No le vasto con destruir nuestra familia, también quiere acabar con la vida de esa niña ¿Donde está ella? ¡Quiero verla! ¡Traía ante mí!

La mujer estaba más qie furiosa, su único consuelo ahora es tener serca a esa pobre niña, la que a sufrido tanto como ellos

- Querida debes calmarte, tu salud no es muy buena, deja que mañana tome cargo de CEO en estrella Filmes, después la verás

El ya tenía planes para vengarse de la familia Hills, si ellos se metieron con su hija, él también haría los mismo, sí su hija fuera inocente tal vez no la involucraría pero es tan malvada como ellos.