El Encanto De Felisia

Sia: ¿Usted cree que yo soy una ignorante? Sé perfectamente que ha estado visitando a Stela, en el reclusorio. Como también sé, que se mantuvo en contacto con ella todo este tiempo.

Maritza: Eso es lo más lógico. Ella cargaba al bebé de mi hijo. Debía de cuidar de mi futuro nieto.

Sia: Por supuesto. Pero también eras consciente de que tal vez ese niño no podría ser tu añorado nieto. Y que por la desagradable vida de Stela, ese pobre bebé nacería con una enfermedad.

Claro que lo sabías todo, tenías completo conocimiento de toda la situación. Y fue por esa razón que deliberadamente manipulaste a Stela, para que ella se encargará del "problema" y me culpará a mí. "Así matarías a dos pájaros de un solo disparó".

__(La mujer me miraba como si quisiera sacarme los ojos hay mismo.)__

Sia: ¿Quieres saber como lo descifre.? Bueno, solo tú sabías cuando volvería exactamente Hernán de su viaje, el día todo horario. También sabías que si eras tú la que lo llamaba y le pedía ir asta cierto lugar. El no cuestionaría nada he iría sin pensarlo dos veces.

¿Por qué si no? ¿De qué otra manera Hernán iría a ese viejo edificio que no tiene nada que ver con su familia.?

En cambio, usted sabía todos mis movimientos. Gracias a la empleada que le es leal en la vieja mansión; Déjeme decirle que en más de una ocasión la encontré husmeando en mi habitación. Y escuchando a escondidas mis llamadas.

"Usted orquesto todo este show desde la oscuridad"

Pero no contaba con que yo fuera más astuta y se confió demasiado. Tal vez por sus largos años tramando cosas malas, no esperaba cometer tan estúpido error.

Me subestimo y eso le costará muy caro.

__( Maritza, se abalanza sobre mí para golpearme, pero Damián la detiene.)__

* Claro, ni loca estaría a solas con esa vieja bruja. Pero su reacción me confirmo que todas mis sospechas son ciertas.

Damián: Señora, le sugiero que mantenga la compostura. Mire que aquí hay muchos testigos, y si no quiere que su familia siga acumulando más cargos de violencia contra la señora Felisia. Lo más prudente es que se mantenga quieta. No vaya a ser que la poca dignidad que le queda al apellido Di Santos se vaya por el caño por su propia mano.

__(Maritza abandona el establecimiento como alma que lleva el diablo.)__

Damián: Está vez, te has arriesgado demasiado Felisia; Los ojos de esa mujer estaban llenos de odio. Y si yo no me encontrará aquí de seguro te golpeaba salvajemente.

Sia: ¡Lo sé! Gracias Dami, por siempre estar en mis momentos más difíciles. Por nunca darme la espalda y quedarte a mi lado sin esperar nada a cambio. Has sido tan buen amigo este último año que hay veces que me pregunto, que cosa grandiosa logré en mi vida pasada para en esta tener a tan buen hombre y colega. Hoy sin duda me salvaste la vida. Te debo una bien grande AMIGO.