Dalia Grantt, en un momento de vulnerabilidad y despecho, hace lo inesperado y con esa acción acaba con el orgullo y con el corazón de su marido, ella luchará por ganarse su perdón, pero el orgulloso Deimon se resistirá hasta el final.
NovelToon tiene autorización de ERUMED para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
CAPÍTULO 22
__ Nada, es solo una sospecha que tengo, pero no te diré mas hasta no estar seguro.
Así que prepara tu equipaje y te vienes. No podemos arriesgarnos a que Deimon se niegue a casarse contigo, ya pronto se te va a empezar a notar el embarazado y debes tener al afortunado papa comiendo de tu mano, antes de eso.
__Pero Darío, no era mejor ¿buscar a Peytón y obligarlo a él a que me responda?
__ No digas estupideces, que te va a responder ese muerto de hambre, no es más que un simple modelito de pacotilla, solo se aprovechó de ti, si no es porque le dijiste que estaba embarazada, te hubiese dejado en la ruina total.
Pero bien sabes que si nuestro padre se entera de que será una madre soltera nos deshereda a los dos. Siempre me advirtió que tú eras mi responsabilidad y que pagaría con mi herencia por tus errores.
__ Así que mi gran amigo Deimon es el papá elegido de mi sobrino, avísame a qué hora debo ir por ti al aeropuerto el viernes.
Trata de salir temprano, la idea es que cuando yo llegue al Pent House con Deimon ebrio ya tú estés aquí.
__ Ok, adiós. Darío colgó la llamada y se fue a dormir.
Al día siguiente Deimon, se despertó con mucho dolor de cabeza, se levantó, se duchó, se vistió y se fue a la empresa, no vio a Darío, lo menos que quería era verlo.
Llego a la empresa y fue directo a su oficina, A los pocos minutos, entro Dalía sin llamar a la puerta, él fue hacia ella y la beso apasionadamente, ella trato de soltarse pero él no se lo permitió, entonces ella lo empujo fuerte y le dio una bofetada.
Él se llevó la mano a la mejilla y se sorprendió.
__ ¿Qué demonios te pasa Deimon?, ¿Haz enloquecido, o quieres enloquecerme a mí?, ayer me ignoraste, me hiciste sentir como una cucaracha, ni siquiera te importo verme con Max
__Sabia que lo habías hecho apropósito, claro que estaba furioso, pero te prometí que confiaría en ti, además Trevor estaba con ustedes.
__Maldita sea Deimon, ¿porque me mentiste? Me dijiste que te ibas al Pent House porque te sentías mal y te encuentro de lo más sonriente con tu amigo en tu restaurant favorito, donde por cierto yo había reservado una mesa para una cena romántica para nosotros.
En el fondo yo me alegre cuando te vi allí, pensé que te acercarías a nosotros, que al terminar me llevarías a mi Depa y amaneceríamos ahí.
¿Porque juegas conmigo así? Habla Dei, con tu silencio solo me dañas.
Y las lágrimas empezaron a caer por sus mejillas.
__ Ven amor, cálmate, no llores me parte el alma verte así, dice Deimon jalándola y sentándola en sus piernas.
__ tienes razón, no debí mentirte, amor yo te amo, solo que tengo asuntos de mi pasado que han venido a buscarme hasta aquí, pero por ahora solo te pido que confíes en mí, voy a necesitar que me des tiempo para resolver mis asuntos y luego poder estar juntos.
__ ¿Cuánto tiempo? dice Dalía, con lágrimas en sus ojos y se le hace un nudo en la garganta.
__ Una semana amor, solo una semana y después prometo contarte todo.
__ No entiendo, ¿es un permiso laboral?
__ No amor, yo seguiré viniendo a trabajar.
__ Entonces, ¿porque no podemos estar juntos?, ósea me estas pidiendo un descanso ¿de mí? tú necesitas que suspendamos nuestra relación por una semana, ¿es eso?
Deimon asienta con la cabeza y recibe otra bofetada.
__ maldito imbécil, como demonios uno suspende su amor, tú crees que soy un robot, que pudo pausar mis sentimientos por una semana y después apretar un botón y darle continuar cuando el señor así lo quiera. Dalía lloraba desconsoladamente.
__ No amor, no te pongas así, Deimon también empezó a llorar, tomaba a Lía por las mejillas y la besaba en los labios, no estoy diciendo que nos dejemos de amar ni por un segundo, solo que nos veamos aquí en la empresa nada más, pero hasta el viernes.
El sábado estaremos juntos otra vez y empezaremos a planear nuestra boda.
Dalía empezó a limpiarse la cara y a calmarse, de repente su mirada se tornó lejana y le dijo:
__ sabes ¿qué?, tómate el tiempo que quieras, mientras no resuelvas tus problemas, te prohíbo que te acerques a mí, solo trataremos asuntos laborales y nada más.
Ojala Deimon que cuando tú estés listo, yo todavía este esperándote.
Dalía se alejó de él y salió de su oficina, azotando la puerta.
Deimon se llevó las manos en a la cara y respiro hondo, no quería hacer sufrir a Lía y menos alejarse de ella.
Pero solo faltaban tres días para que la pesadilla terminara después la recompensaría con una hermosa boda.
Se sirvió un trago de whisky y se calmo un poco, tenía mucho trabajo así que trato de concentrarse, cuando sonó el celular, era un mensaje de Darío:
¿Dónde vamos a comer?.
En respuesta Deimon le marco al celular y le dijo:
__Darío come donde te dé la gana, déjame en paz no soy tu maldito novio para que me estés acosando, busca algo en que entretenerte y no me molestes.
Y no creo que tenga sentido que sigas en New York, no me voy a casar con tu hermana ni ahora ni nunca.
__ Cálmate, amigo como que tienes mucho trabajo, discúlpame, nos vemos en la noche, tranquilo no quise molestarte, si necesitas hablar con alguien avísame sabes que estoy aquí para ti. dijo Darío cortando la llamada.
"Eso es lo que piensas idiota, salvaras mi herencia quieras o no", pensó Darío, dándose cuenta de que Deimon no sería tan fácil de manejar como él pensaba, de aquel chico ingenuo de que él se aprovechaba todo el tiempo no quedaba nada.
Deimon ni siquiera almorzó, se concentró tanto que cuando se dio cuenta, era de noche, pero él no tenías ganas de ver a Darío, así que tomo la botella de whisky un vaso y se marchó al pequeño departamento estudiantil que compartía con Lía cuando estudiaban, era un buen refugio para el en ese momento, además ahí tenia ropa, así que no era necesario ir al Pent House a cambiarse.
Llego y el silencio fue su mejor compañero, apago su teléfono, puso un poco de música y se sentó en el piso del balcón que daba con la vista de la hermosa ciudad, se quedó ahí hasta que se terminó la botella, luego se fue a la cama, donde se encontró una pijama de Lía, este la olía y la abrazaba, ahí se quedó dormido, hasta el día siguiente.