SÁLVAME

Ese día Valentina hizo todo lo que había planeado y a la hora del almuerzo se reunió con su padre en el restaurante que le gustaba a su madre.

Así fueron pasando los días, para Valentina todo estaba tranquilo, pues Sara y su madre se habían mantenido extrañamente tranquilas.

…

Valentina.

Con mucha tranquilidad habían pasado los días, y el día del ingreso a la universidad había llegado, tenía una mezcla de emociones, entre alegría y miedo, pues era la primera vez que enfrentaba a un ambiente como ese.

Pero estaba decidida a lograr mi cometido y convertirme en toda una profesional, capaz de hacerse cargo de la empresa de mi madre.

El día inicio yo me organice para ir a la universidad, el desayuno lo tome en compañía de todos, mi padre se veía nervioso, hasta podría decir que más de lo que yo estaba.

_ Estás lista.- me pregunto.

_ Como nunca.- le conteste con una sonrisa.

_ Bien, hoy te llevaré, es tu primer día, así que quiero asegurarme que todo esté en orden.- me dijo.

_ Gracias papá.- le dije.

A las siete de la mañana salimos de casa, durante el camino papá me hablo de los cuidados que debía tener, era innecesario, pero aun así lo escuche, sabía que él tenía miedo de que la fuera pasar mal, así que lo entendía a la perfección, cerca de media hora después llegamos.

_ Ya sabes, si necesitas algo, solo debes llamarme.- me dijo.

Lo sé, así que no tienes de que preocuparte.- le dije tomando a su mano. Estaré bien.- él me sonrió y beso mi frente.

Luego subió al coche y despidió desde la ventana con la mano, así inicio mi nueva vida como universitaria. Al ver el coche de mi padre desaparecer con la distancia, me dirige a la entrada principal de la universidad.

La verdad era que podía sentir muchas miradas encima de mí, no sé si es que era la única persona con discapacidad o que, lo cierto fue que ignore cada una de ella.

Fui a la oficina en donde me dieron las indicaciones que necesitaba, como lo eran mi horario y el número de cada salón de clase.

…

Valentina llegó al primer salón donde tendría su primera clase, ella estaba emocionada, pero para su mala suerte, allí ya se encontraban las dos chicas con las que había tenido en pequeño encuentro el día del examen de ingreso.

_ Veo que si lograste pasar.- dijo una de ella.

Valentina las ignoró y se acomodó en el que sería su lugar ese día.

_ Oye, no escuchas que te están hablando.- dijo Ana.

Valentina la volteo a ver con cara de pocos amigos, la verdad era que no tenía intención de establecer alguna clase de conversación con ella y mucho menos si eran con malas intención.

_ Te escucho a la perfección, pero que crees no me interesa hablar contigo.- le contesto Valentina.

_ Vaya que eres idiota, deberías de estar agradecida de que nos acerquemos.- dijo Cintia.

_ Como digas, ahora si me disculpas, podrías dejarme.- finalizo Valentina.

Cintia iba a volver, ha hablar, pero en ese momento llego el profesor.

Buenos días, muchachos, mi nombre es Esteban Brown y estaré a cargo del área finanzas.- dijo el hombre de unos treinta años. Como ya no son unos niños, creo que está de más, decirle lo que no se tolera aquí, pero si hay algo que quiero que tengan presente es que a mi clase se viene a estudiar, de lo contrato se pueden retirar.

Esteban Brown era uno de los profesores más jóvenes de la universidad y se caracterizaba por ser estricto, pero era uno de los mejores, pues más de uno peleaba por poder tener una clase con él, sobre todo las chicas, quienes no pasaban por alto lo guapo y atractivo que era. Esteban dictó su clase, pero su atención se centró en la hermosa chica que estaba sentada en la primera fila.

_ Bueno, eso es todo por el día de hoy.- dijo el hombre.

_ Gracias.- dijeron todos.

Esteban se acercó al lugar en donde Valentina se encontraba, ella estaba recogiendo sus cosas para dirigirse a su siguiente clase.

_ Hola.- dijo Esteban.

Valentina subió su mirada para ver de quién se trataba.

_ Hola profesor.-Valentina le dio una pequeña risa.

_ Tú debes ser nueva, es la primera vez que te veo en una de mis clases.- dijo este.

_ Lo soy, mucho gusto Valentina Carvajal.- Valentina le tendió la mano y este la estrecho sin dudar.

Mucho gusto Valentina, Esteban Brown.- le dijo este. Cuéntame que tal te pareció mi clase el día de hoy.

_ Estuvo excelente.- le contestó esta.

Es bueno escuchar eso.- Esteban sonrió ampliamente. Espero verte en mi próxima clase.

_ Cuente con eso.- dijo Valentina.

Esteban se alejó y Valentina salió del salón, su siguiente clase era contabilidad, una de las materias que más les gustaba. Al llegar al salón en el que le tocaba, se encontró con Javier, quien al verla le hizo seña para que se sentara cerca de él.

_ Hola, pensé que no te vería el día de hoy.- le dijo él.

_ Hola, pensé igual.- le dijo ella, un poco sería.

_ Pasa algo.- preguntó él.

_ No, porque.- le dijo ella mientras sacaba de su mochila su libreta.

_ Es que te noto un poco seria, hay lago que te moleste.-. Le dijo este.

_ Para nada.- Valentina esquivo su mirada.

 Al ver que Valentina se negaba a decirle lo que pasaba, Javier decidió dejarla, quizás era algo de lo que no quisiera hablar. La clase estuvo tranquila, tanto el cómo ella se centraron en prestar atención hasta que la clase termino.

_ Qué clase tienes ahora.- pregunto él.

_ Economía.- contesto ella.

_ Que bien, vamos, yo también tengo esa.- le dijo.

Valentina asintió y salieron juntos para su siguiente clase, en esta se encontraba tanto Cintia y Ana, como Jonathan,

_ Hola linda.- le dijo Jonathan a Valentina cuando la vio.

Valentina lo ignoro, y se acomodó en el lugar que ocuparía, Javier se sentó a su lado, pero antes miro a Jonathan y le dio una mirada de advertencia.