EL REGRESO DE ELIZABETH

Antuan se lleno de ira, quería buscar a jenkins y asesinarlo con sus propias manos.

-Bernard _ seguí investigando mas atrás y encontre que Jenkins era un hombre pobre, no tenia ni un peso en el bolsillo para regalar esa cantidad, y entonces me pregunté ¿de donde salió el dinero?.

El busco una carpeta en el especial y sacó una carta y fotografías.

-Bernard _ Jenkins encontro una carta donde su madre le confesaba quien era su padre, el lo investigó y descubrió que tu abuelo era rico, pero su avaricia y su odio hacía tu abuelo por haberlo dejado crecer en la pobreza eran muy grandes, así que busco a André Dufour y le ofreció parte de el dinero si le ayudaba a quitar a tu padre de el camino y así ser su único heredero. Pero al no obtener nada de tu abuelo comenzó con las amenazas.

-Antuan _por eso los cheques al portador.

-Bernard _ exacto. Y después de que te nombraran el próximo sucesor, tenia que deshacerse de el mayor problema,Tu abuelo.

Antuan se tallo el rostro con frustración. Elizabeth se acerco a el para abrazarlo.

-Bernard _ ese hombre tiene tratos con la mafia francesca desde entonces. Es peligroso señor Le Roux.

-Antuan _ bueno, jugaremos sus cartas entonces, solo así podremos acabar con su poder.

-Elizabeth _ ¿a que te refieres Antuan?, ¿que piensas hacer?.

-Antuan _ A Dufour solo le interesa ganar y a mi vengar a mi familia.

Antuan pensaba bien su siguiente paso, pero necesitaba primero proteger a Elizabeth, sabia que Jenkins iría tras ella en cuanto se quede sin nada.

Después de unas horas Antuan y Elizabeth salieron de el restaurante. En el auto de camino a su hogar Antuan no decía una palabra, su semblante era frío y sus manos eran empuñadas con rabia. Al llegar a su hogar Antuan camino con pasos largos dándose prisa para llegar a su despacho, para después cerrar la puerta detrás de el.

Los ruidos de la cosas rompiéndose en el suelo se empezaron a escuchar por toda la casa. Elizabeth asustada se apresuró a llegar al despacho, cuando abrió la puerta lo vio arrojando todo al piso con rabia.

-Elizabeth _ Antuan..

Antuan levantó la mirada hacia ella y comenzó a revolver su cabello con frustración.

-Antuan _ vete Elizabeth.

Elizabeth negó con la cabeza y se acerco a su lado para abrazarlo. Las lagrimas de Antuan comenzaron a bajar por sus mejillas. Elizabeth las limpio con el pulgar de sus delgadas manos sin hacerle una pregunta, en su mirada tenia la respuesta. Ella entendía su dolor. Lo tomo de la mano entrelazándo sus dedos con los suyos y lo guió hasta su habitación. Lo sentó en la cama y se arrodillo a sus pies para ayudarle a despojarse de sus zapatos para después continuar son su ropa. Ella camino hacia el baño y se deshizo de su ropa para ponerse un camisón blanco, al salir camino hacia la cama para subirse en ella y se acomodo su lado recostandose en su pecho. Se quedaron abrazados en silencio hasta que a ambos los venció el sueño.

Antuan despertó en la madrugada sintiéndose mas tranquilo, Elizabeth estaba dormida a su lado, con sus manos en su vientre entrelazadas con las suyas Con mucho cuidado de no despertarla se soltó de ella para levantarse y camino hacía la pequeña terraza de la habitación, necesitaba pensar en tantas cosas y a la vez en nada.

-Elizabeth _¿estas mejor?

Antuan voltio y la miró parada detrás de el. No pudo evitar recorrerla con la mirada, sus piernas se veían mas largas con el camisón corto que llegaba hasta sus muslos, la tela blanca se pegaba a su piel clara y rozaba el borde de sus pezones. Llevaba su cabello largo, suelto y ligeramente rizado. Ella se abrazaba a si misma por el viento fresco que entraba por la terraza.

-Antuan _Lo siento, te desperté..

Elizabeth negó con la cabeza. Antuan camino hacía a ella y extendió su mano para acariciar la piel de sus brazos.

-Antuan _ ¿tienes frío?.

-Elizabeth _ un poco..

-Antuan _ ven..

El le extendió la mamo, Ella la tomo entrelazándolas acercándose mas a el, sus ojos tenían un brillo de deseo. Ella se recargo en su pecho y rodeo con su brazos su cintura, podía escucha como el corazón de Antuan latía desbocado. El la tocó con la yema de sus dedos y comenzó el recorrido de su piel, de sus hombros hasta su clavícula.

Deslizo con paciencia el primer tirante que sostenía el camisón, dejando ver la parte superior de su pezón. Sus generosos pechos subían y bajan por la respiración acelerada. El con la palma de su grande mano apretó su ceno, rosando con su pulgar el botón saltado de su pezón.

-Elizabeth _ Ahhh!.

Elizabeth jadeo de placer al sentir su toque, obligándola a cerrar con profundidad sus ojos.

Con la otra mano el repitió la misma acción, dejando caer el camisón al pisó. Se quedo admirándola por un momento, sus ojos estaban embelesados con las curvas de su cuerpo desnudo.

Elizabeth posó sus manos delgadas en el duro pecho de Antuan y las deslizo lentamente hasta llegar al borde de la orilla de su boxer y comenzó a descender la tela hacia abajo, dejando libre la endurecida virilidad de el hombre.

El la tomo en sus brazos y la acostó en la cama con delicadez, como si de algo frágil se tratara. Se subió encima de ella lentamente y recorrió la piel de sus piernas con las palmas de sus manos, amoldandolas a su cuerpo. Llego hasta su vientre y después descendió a su intimidad masajeando su zona sensible. Elizabeth jadeaba entre cada toque y Antuan sentía placentera la humedad que dejaba entre sus dedos.

-Elizabeth _Ahhh!...Antuan...

La tomo de sus muslos y los apretó sin lastimarla, se sentía al borde de la excitación. Se acomodó en la entrada, de la cavidad de su intimidad y de una sola estocada entro en ella.

-Antuan _ Ohhh!..

-Elizabeth _ Ahhh!..

Antuan empezó a moverse lento, prolongando así el placer por un tiempo. Elizabeth cerró los ojos hundiéndose en el placer. Antuan aumento sus estocadas haciéndolas mas precisas y constantes, llenándose de placer al sentirla apretar su virilidad.

Elizabeth se retorcía debajo de el, empuñando las sábanas entre sus manos. Los gemidos de ambos cada vez se escuchaban mas fuertes. Antuan la miraba extasiado y el sudor recorría su pecho y su frente.

Elizabeth no pudo mas y dio un grito sonoro de placer, al sentir como cada musculo de su cuerpo se tensaba dándole paso a un fuerte orgasmo. Antuan gruñó dejándose llevar en el arrebatado orgasmo de Elizabeth, liberando su semilla dentro de ella.