Alfa, Yo No Seré Su Amante

Cuando la señora despertó, ya era nuevo día y al ver la habitación, estaba confundida sin saber en dónde estaba, ya que lo último que recordaba, es como una buena muchacha la defendió de esos cobradores malvados.

– Señora, que bueno que ya está despierta – dice Marcel sonriendo con amabilidad.

– Niña gracia por ayudar a esta pobre mujer que no tiene como pagarte el favor, por cierto mi nombre es Nuria – dice la señora.

– Un gusto, mi nombre es Marcel Dávila. Señora No se preocupe, no tiene que pagarme, si gusta puede seguirme a dónde tengo que ir, y así tiene un lugar para vivir y comida para cada día, puede también si desea, trabajar para la mansión, y así más adelante tener su propio dinero – dice Marcel

– Voy contigo hija, ya una anciana como yo sin familia, no tiene muchas exigencias, 65 años pesan para cualquier plebeyo sin familia, en realidad, yo solo quería comer, y esos hombres me prestaron hace dos días unas dos monedas de cobre, y como no conseguí limosna, no puede pagar nada – llora la pobre mujer, ya que al perder su familia en un accidente de coche, tuvo que sobrevivir por sí misma, pues su esposo tenía muchas deudas y los cobradores la echaron en cuanto vieron que ella no podía pagar siquiera una renta, eso la obligó a vivir en la calle y a pedir limosna para poder comer.

– Ya no se preocupe por esos hombres, creo que nunca más la molestaran – dice ella, mientras deja algunas palmadas en la espalda de la señora.

–¿Les pagaste mi deuda?– pregunta está confusa, mientras deja de llorar.

– No, le di una descarga eléctrica, y no creo que ellos recuerden ni siquiera sus nombres – ríes está y la señora se asombra.

– ¿No me digas que eres una maga de rayo? – pregunta la mujer aun sin creer lo que escucha.

– Claro y también de luz, pero eso debe de ser un secreto entre nosotras – le guiña ella el ojo a la señora.

– Yo también soy una maga de la naturaleza, pero hace años dejé de practicar magia, ya que porque no quise ir con el templo, las personas decían que yo era una bruja, y por eso sellé mi magia _ dice ella con disgusto, por el hecho de que desde que se supo en el imperio que las que usan magia fuera de los dominios del templo son brujas del mal. Por el momento ella ya no puede usar su magia debido a que hizo un trato con la madre naturaleza.

– Qué situación tan mala, en fin Las personas y sus prejuicios. Bueno, puede ir con nosotros, yo en unos meses daré a luz y una compañera más en la mansión me haría bien – dice ella y la mujer empezó a olfatear a su alrededor y sintió el aroma de la muchacha un poco raro, como a pino y madera, un aroma totalmente masculino.

Ella la vio de pies a cabeza y no encontró rastro de que ella es una mujer loba, pero parece, como si llevará a uno en el vientre, lo que significa que ella está embarazada de uno, pues un hijo no se hace solo.

Ella, como una portadora de los poderes de la naturaleza, nació con sus sentidos del olfato desarrollado, y por esa razón, fue que pudo darse cuenta sobre ese hecho. Una persona normal no sentiría el olor de la joven.

–¿Niña en dónde está el papá de tu bebé?– pregunta la señora.

La joven sintió vergüenza por esa pregunta y solo bajó la cabeza, y con eso fue suficiente para la señora entender la situación.

– Señora, no sé quién es el padre de mi hijo, pero por el momento, no creo que eso sea relevante, ya que mi hijo es solo mío – dice, está con una mirada determinada.

_ Ya veo, pero tarde que temprano, el destino te llevará a dónde debes estar, su encuentro es algo inevitable, y está destinado a suceder – dice la señora, pues si ella se embarazó de un hombre lobo, significa que es la destinada de uno, y más por el fuerte olor que proviene de ella, parece que el lobo aun sin marcar a esa niña, la reclamó como suya, ya que su olor permanece en ella, para que ningún macho ya sea hombre, o lobo la tenga para él, y por el olor, se da cuenta de que esa niña tiene olor a lobo alfa

"Qué lobo tan descarado, me gustaría ver cómo termina esta historia de amor, ese alfa es un calenturiento. Los lobos solos existen en el imperio de Azulea, y allí solo existe un alfa, y el hombre no tiene buen carácter, a través de la naturaleza he escuchado de lo que es capaz de hacer con sus enemigos, esto es interesante" – piensa ella para luego decir

–No te preocupes por nada ahora, lo que importa es que estés tranquila, olvida mis palabras – dice, está tomando las manos de ella con cariño.

En ese momento, la Nana, quien había salido a resolver lo de la salida, llegó y anunció que ya se tienen que ir de la posada para así continuar el viaje.

Marcel le comunicó que se llevarían a la señora con ellas, cosa que agradece la Nana Mary, pues ahora tendrá una amiga con la que conversar de la vida.

Tal como lo planearon, todos se prepararon para dejar la posada y siguieron con el plan original.

Unos dos días después de eso, en horas de la noche, todos llegaron a la mansión de las fronteras.

El mayordomo estaba informado de la situación, y siempre estuvo alerta, por eso, cuando el carruaje paso por la puerta principal, este ya estaba afuera esperando, y con él estaban algunas personas que allí trabajaban para el marqués.

Cuando el carruaje se detuvo, Marcel y su gente salieron de él, y fueron recibidos por el mayordomo, quien era por cierto un hombre amable.

– Sean todos bienvenidos a esta mansión, señorita Marcel, estoy a sus servicios – dice este y todos los que lo acompañaban se postraron en una reverencia y saludaron también.

Luego de esos, el mayordomo le pidió que lo siguiera, y en poco tiempo, ya estaban en la habitación que iba a pertenecer a Marcel, y la Nana, su doncella y la señora que lo acompañaba, estaban siendo atendidos de buena manera por los sirvientes, y hasta cena le habían traído en la habitación.