Nuevos Comienzos

-Por donde empiezo...- me tome un momento para acomodar mis ideas y lo que recordaba, ya que muy pocos sabían de los planes que teníamos con Kev de irnos...

-Bueno More... - tome un poco de aire y comencé a contarle.

-Hace un año a Kev le salió la oportunidad con su empresa, de viajar a una de las subsidiarias que se encuentra en otro país, y estuvo trabajando durante un mes, Kev es técnico informático, y en esta subsidiaria les faltaba gente, por eso le ofrecieron que fuera para ayudarlos y sin que él lo supiera, o capaz que si lo sabía,, pero no me lo dijo a mí, ahora ya no sé que pensar, le hicieron una prueba para ver su desémpeño allá y la superó con creces, él es muy capaz siempre estuve maravillada de su capacidad para hacer su trabajo, con tanta emoción y haciéndolo parecer tan fácil... me estoy yendo de tema, la cuestión es que le ofrecieron un cargo más alto, con mejor suéldo y con un grupo de personas a su cargo. La única cuestión es que le pusieron ciertas condiciones, una es estar casado y dos es vivir en esa ciudad... debía mudarse, yo estaba muy feliz cuando volvió y me contó todo con una emoción que salía de sí, y en ese momento me propuso irnos a vivir allá, y una vez que nos mudamos nos casemos. No fue una propuesta romántica, pero para mí fue perfecta, porque me dio la impresión de que me quería junto a él, y en su futuro.

Después de esa propuesta y de presentarme todos sus planes, a pesar de mis dudas por el hecho de tener que irme a otro país y dejar todo atrás, estaba muy dispuesta y feliz, lo charlamos y decidimos contarles a todos una vez que consiguiéramos la casa donde nos íbamos a quedar, para que no empezaran con el interrogatorio y la presión de tener que explicar que tan preparados o no, estábamos para afrontar todas las dificultades a presentarse futuras... estuve de acuerdo, desde entonces estuvimos buscando una casa y ahorrando para poder irnos más cómodos y más tranquilos.

Conseguir la casa fue mucho más complicado de lo que esperábamos, porque los dueños no estaban dispuestos a alquilar sino veían al inquilino en persona, así que Kev debía viajar por lo menos una vez cada mes para ver varias casas, la cuestión es que, los que alquilan eligen a sus inquilinos entre varias opciones, y a pesar de que Kev tenía un trabajo estable y asegurado yo no, entonces no les dábamos tanta confianza como otras parejas que tenían ingresos los dos...

Hice una pausa para poder tomar algo porque ya tenía la boca seca y para poder ver como iba la reacción de mi mejor amiga, que tan enojada o preocupada estaba, pero claramente ella me conoce y sabe que si empieza a retarme o increparme ahora voy a cerrarme y no voy a poder seguir contando, pero me mira esperando que termine, claramente se le nota la tristeza en su mirada de sentir que no tenía la suficiente confianza en ella para contarle mis planes...

-Sigo contándote, resulta que cada vez que volvía discutíamos un poco, más que nada por mi inseguridad, y por el hecho de que sentía que lo estaba frenando en sus sueños, aunque él siempre lo negaba y me trataba de hacer sentir bien y demostrarme que no era así... en él momento yo le daba la razón y desplazaba esos miedos a un costado y seguíamos en la búsqueda... hace 2 semanas el viajo a ver una casita, era la casa de nuestros sueños, no muy grande, pero perfecta, cocina comedor, dos habitaciones, una de ellas con un vestidor donde no cabía mucho, pero era un vestidor, un baño con bañera, un pequeño jardín al frente con una cerca blanca, muy de película.

Tenía mucha Luz natural, y la ubicación era muy cerca de la empresa donde Kev iba a arrancar a trabajar, y nos dijeron que si, no dábamos más de felicidad, teníamos que mandar unos papeles y hacer algunos trámites acá, pero ya lo habíamos conseguido, nuestra propia casita, nuestro pedacito de cielo en este basto universo, yo venía mirando el precio de los muebles para saber que debíamos comprar y que llevar de acá, y a pesar de que Kev decía estar muy feliz lo notaba raro, como si algo lo atormentara, yo pensé que podía ser por todo el proceso que ya estaba más cerca de suceder, en 2 semanas más deberíamos dejar todo y comenzar nuestra vida juntos. Yo había conseguido una escuela para terminar de aprender el idioma... todo sé nos estaba dando, hasta ayer que las cosas se complicaron o se vinieron a pique, donde todo ese futuro que creía tan brillante se volvió tan sombrío como la noche afuera... me tuve que detener porque se me quebró la voz, sentía que algo quemaba mi garganta y las palabras no salían, More me abrazo y no aguante más, rompí en llanto, no sé nuevamente cuanto tiempo pase llorando, pero me dolía la garganta, sentía los ojos hinchados y ya no salían las lágrimas, en ese momento sentí que algo en mí se apagó, y seguí contando mi historia como si de otra persona fuera, como si el interruptor de mis emociones se hubiera apagado.

- Ayer Kev me pidió que escaneara unos papeles y se los enviara a la titular de la casa que estábamos por alquilar así el podía preparar él contrato, como mi computadora estaba desarmada ya, porque había comenzado a embalar todas las cosas que usaba poco o que eran muy grandes para hacerlo a último minuto decidí usar la de el... la cuestión es que cuando trato de abrirla noto que tiene una contraseña, algo muy extraño, pero como siempre nos dábamos las contraseñas y él me dijo que la suya siempre iba a ser 220320, la fecha en que nos conocimos, pero al intentar me decía que era incorrecta, decido llamarlo y estaba en él trabajo ocupado, entonces me la dice rápido 170423, y corta, me pareció raro porque no era una fecha importante en si... o eso creía, la cuestión es que me pongo a escanear las cosas, pero no me fije en donde guardaba los archivos la impresora así que me puse a revisar, y en la carpeta de imágenes había 3 carpetas distintas. Abrí la primera donde claramente había imágenes de su trabajo, cables y computadoras y cosas que no entendía, en la segunda no había nada, y en la última estaban las imágenes del escáner, pero también había una carpeta que decía Solcito... ese es el nombre de su ex o por lo menos el apodo que el le decía... yo no se que se me ocurrió, pero abrí esa carpeta para encontrar fotos... fotos de ambos, sonriendo, cenando y paseando, y también fotos subidas de tono, donde se veía todo sin dejar algo a la imaginación... primero me enoje y respire profundo, me puse a pensar que tal vez eran fotos viejas que el olvido borrar... que se le pasaron, porque no suele usar mucho la computadora de casa, o simplemente olvidó su existencia... en ese momento no se que pensar o hacer, estuve como 10 minutos hasta que decidí fijarme la información de las fotos, para saber cuando fue la última que subió, me temblaba la mano y mi mente iba a mil por hora, rogaba a todos los santos o a quien séa que sean viejas, que no sea verdad, que sea puros castillos en el aire creados por mí y mis inseguridades, para mi sorpresa, la última foto la subió el día miercoles 17 de mayo de 2023... sentí como si se me desplomara el mundo, como si se partiera la tierra y me tragara una oscuridad inmensa, fue justo cuando volvió de su viaje hace un año... para ese entonces llevábamos dos años saliendo y ese mismo día me propuso que nos casáramos... la última foto era de ellos besándose en una cama semi desnudos, el dolor se me hacía imposible de aguantar, pero después llego el enojo, estuve a punto de eliminar todo, pero sin pruebas como podía enfrentarlo, decidí reenviar esa foto a mi celular.

Decidí no enviar los papeles para el contrato de alquiler, necesitaba una explicación, apague todo y me senté en la mesa a esperar la hora a la que llegue Kev de su trabajo.

pasaban las horas, veía como lentamente la sombra del florero en la ventana se estiraba y luego se encogía como una escena de película, nunca entendí esas escenas donde la protagonista ve girar las agujas del reloj sin moverse, ahora más que nunca las entendía... esa sensación de que si das un paso caes al vacío era tan grande que incluso cuando me dio sed y hambre preferí no moverme.

Kev siempre llegaba a las 20.30 hs, cuando escuche la puerta abrirse y el su muy bien conocido

-Llegue Arti, no sabes el día largo que tuve. no veía la hora de volver a casa para abrazarte- y se fue acercando lentamente me abrazo por los hombros desde atrás y beso mi cabeza, al ver que yo no le respondía me mira extrañado, pero de pronto una duda cruzo por su mente y me pregunto preocupado

-pudiste enviar lo dél contrato, si No lo mandábamos hoy era posible que perdamos la posibilidad de nuestra casita- me dice alejándose, mientras se acerca a la héladera y abre para ver que podía comer, yo seguía sin responderle a lo que asoma su cabeza por sobre la puerta de la heladera y habla de nuevo

-Amor, pudiste? que comiste hoy? no quedó nada para mi?- cierra la puerta y decide sentarse frente a mí al ver que mis únicas acciones eran seguirlo con la mírada, y me mira fijamente con una sonrisa de lado, como si estuviéramos jugando a un duelo de miradas, en ese momento sentí que si seguía sentada mirándolo me iba a largar a llorar y lo que más odiaba es que él me vea llorar, varias veces me dijo que yo lloraba haciéndome la víctima para que cortar las peleas cuando sentía que iba perdiendo, pero más que hacerme la víctima lo sentía como una represa de emociones agolpándose en mi mente, donde trataba de acomodar las palabras para que salgan, pero al no poder, me hacía sentir frustrada y del enojo lloraba, y en estos momentos me sentía así... me levante y fui a la cocina, empecé a llenar la pava de agua para hacer algo con las manos antes de explotar y empezar a revolear cosas que se podían romper, y le respondí,

-No almorcé vi un par de cosas que me sacaron el hambre...- hice una pausa para las siguientes palabras, sabía que podía haber sido muy impulsiva a la hora de no haber enviado lo del contrato pero ya era tarde para arrepentirme

- y tampoco envié los papeles del contrato, necesito que hablemos seriamente antes-

prendí la hornalla, puse la pava y me di vuelta a verlo para enfrentarlo, en ese momento se levantó de la silla enojado y levantó un poco la voz, nunca fue violento físicamente y tampoco verbal, pero cuando se enojaba se nublaba y decía cosas hirientes... el momento que tanto temía había comenzado