Reach The Stars

El día había comenzado como cualquier otro, con la rutina habitual de ensayos y reuniones, pero el ambiente en la agencia se sentía más tenso de lo normal. Había un murmullo constante, una sensación de que algo estaba a punto de estallar. Mientras me dirigía al estudio, noté a Jinwoo hablando en voz baja con el equipo de relaciones públicas, sus rostros serios y preocupados. Sabía que algo andaba mal, pero no tuve tiempo de preguntar antes de que la primera notificación de noticias apareciera en mi teléfono.

Abrí el enlace y sentí cómo se me helaba la sangre: "Yeon-Jun de ELIXIR involucrado en un accidente de tránsito mientras conducía ebrio". Mi mente intentaba procesar las palabras, pero era como si cada línea me golpeara más fuerte que la anterior. El artículo detallaba que Yeon-Jun había sido detenido por manejar bajo la influencia del alcohol, y que había causado un accidente mientras conducía su auto. Las imágenes mostraban el rostro de Yeon-Jun pixelado, pero aún reconocible, mientras la noticia se propagaba como pólvora.

Era imposible. Conocía a Yeon-Jun lo suficiente como para saber que jamás se pondría al volante ebrio, y menos aún arriesgarse a lastimar a alguien. Mi corazón se aceleró mientras seguía leyendo, y noté las inconsistencias en el reporte: mencionaban un automóvil de lujo, una colisión con otro vehículo, y todo se sentía tan exagerado, tan fuera de lugar. Necesitaba hablar con él, necesitaba escuchar su versión de lo que había pasado.

Tomé mi teléfono y le envié un mensaje rápidamente.

Jia: Acabo de ver las noticias, Yeon-Jun. ¿Estás bien? Por favor, dime que todo esto no es cierto.

Minutos después, mi teléfono vibró con su respuesta. La pantalla mostraba sus palabras, pero lo que leí me dejó más desconcertada.

Yeon-Jun: No es lo que dicen, Jia. Sí, me detuvieron, pero no fue como lo están pintando. No estaba manejando un auto, estaba en un scooter. Había bebido, pero no como para causar un accidente. Todo esto está fuera de control.

Cerré los ojos, tratando de asimilar lo que decía. Los medios habían tomado la historia y la habían transformado en algo completamente diferente, haciendo que un error se convirtiera en un escándalo mucho mayor. Sentía una mezcla de enojo e impotencia, sabiendo cómo los titulares estaban manipulando la realidad para vender una historia más sensacionalista.

Jia: Lo siento mucho, Yeon-Jun. Sabía que no podía ser verdad. ¿Hay algo que pueda hacer para ayudarte?

La respuesta llegó rápido, y podía sentir su frustración a través de cada palabra.

Yeon-Jun: No lo sé. Los medios ya se están haciendo con la narrativa. Intenté explicar, pero nadie escucha. Dicen lo que quieren y ahora parece que soy el villano de la historia.

Mientras seguíamos intercambiando mensajes, la situación solo empeoraba. Los noticieros y las redes sociales repetían la misma versión inflada del incidente: Yeon-Jun manejando borracho un auto, causando caos y peligro en la carretera. Los fans estaban divididos; algunos defendían a Yeon-Jun, alegando que todo era una exageración, mientras que otros, decepcionados y confundidos, pedían explicaciones.

Los comentarios de odio y críticas no se hicieron esperar, y cada vez que abría una nueva noticia, parecía que la imagen de Yeon-Jun se hundía más. El equipo de relaciones públicas de ELIXIR estaba haciendo todo lo posible por controlar la narrativa, pero la bola de nieve ya había comenzado a rodar cuesta abajo.

La situación alcanzó su punto más crítico cuando uno de los programas de entretenimiento más vistos decidió abordar el tema, dedicándole un segmento completo al "escándalo de Yeon-Jun". Las imágenes de él en el scooter, distorsionadas y repetidas una y otra vez, eran acompañadas por un comentario sarcástico del presentador que no ayudaba en nada.

—Es decepcionante ver a figuras públicas comportándose de esta manera. Y lo peor, tratando de minimizar su irresponsabilidad como si fuera algo menor. ¿Qué sigue, una disculpa en Instagram? —decía el conductor con una sonrisa mordaz, mientras el público en el estudio se reía.

Apagué la televisión, sintiendo una mezcla de rabia e impotencia. Todo se estaba saliendo de control, y Yeon-Jun estaba siendo retratado como alguien que no era. Sabía que él estaba lidiando con todo esto solo, y la idea de no poder hacer más para ayudarlo me carcomía por dentro.

Tomé el teléfono y volví a escribirle, desesperada por encontrar una manera de apoyarlo.

Jia: Sé que esto parece imposible, pero tienes que mantener la calma. La verdad siempre sale a la luz, y la gente verá que todo esto es una mentira. Estoy aquí para lo que necesites, Yeon-Jun. No estás solo. 💪

Hubo una pausa antes de que él respondiera, y su mensaje fue un reflejo de la batalla interna que estaba librando.

Yeon-Jun: Gracias, Jia. Me siento perdido, pero saber que estás de mi lado hace que todo esto duela un poco menos. No sé cómo voy a arreglarlo, pero lo intentaré. No puedo fallarles, a los chicos, a los fans... ni a ti.

Sus palabras me conmovieron más de lo que podía admitir. Sabía que él estaba cargando con más de lo que debería, y que el mundo estaba siendo injusto. Pero también sabía que Yeon-Jun era fuerte, incluso en los momentos en que no lo creía.

Mientras la tormenta mediática continuaba, solo podía esperar que la verdad eventualmente se abriera paso entre las mentiras. Porque, a pesar de todo, confiaba en él y sabía que, juntos, podríamos superar cualquier cosa.

Yeon'sPOV

La sala de conferencias estaba cargada de tensión. Las luces brillaban demasiado, como si quisieran resaltar cada error, cada mirada nerviosa, cada palabra que se estaba a punto de decir. Me senté en la punta de la mesa, intentando mantener la calma mientras el equipo de relaciones públicas, los mánagers y los representantes de la agencia debatían a mi alrededor, sus voces elevándose en un torbellino de opiniones.

—Esto no puede quedarse así —decía el jefe de relaciones públicas, su tono severo mientras repasaba los titulares de los medios en su tablet—. Necesitamos controlar la narrativa antes de que se salga de nuestras manos.

Supe que estaban tratando de mantener la compostura, pero la tensión en la sala era palpable. Cada uno de ellos sabía que este no era solo un simple incidente; estábamos enfrentando una crisis de imagen, y yo era el epicentro de todo.

—Los medios están diciendo que fue un accidente de tránsito con un auto. —La mánager de ELIXIR, Seon-Yeong, me miró con una mezcla de preocupación y desaprobación. Era como si estuviera buscando una forma de ayudarme, pero sin saber por dónde empezar—. Necesitamos aclarar los detalles, pero también tienes que ser sincero, Yeon-Jun. La gente quiere oírlo de ti, no solo de nosotros.

Asentí, sabiendo que tenían razón. Me sentía como un niño que había sido llamado a la oficina del director, incapaz de justificar lo que había hecho. Había cometido un error, uno que se había magnificado por la lente insaciable de la prensa. Todo el mundo tenía una opinión, y el peor crítico en este momento era yo mismo.

—Sé que lo arruiné —dije finalmente, sintiendo el peso de cada palabra—. Fue una estupidez de mi parte, y lo último que quería era involucrar a ELIXIR o ponerlos en esta posición. Pero... no estaba manejando un auto. Estaba en un scooter, y me caí cerca de mi apartamento. No fue algo intencional, no hubo ningún daño a nadie más que a mi propio orgullo y... mi licencia vencida.

La habitación quedó en silencio, y todos los ojos se centraron en mí. Era como si estuvieran esperando a que dijera algo más, algo que pudiera explicar mejor lo que había hecho. Pero no había más que añadir. Lo que había sucedido era simple, pero las consecuencias estaban siendo devastadoras.

—Lo sabemos, Yeon-Jun, y confiamos en ti —respondió Seon-Yeong, tratando de sonar tranquilizadora—. Pero necesitamos manejar esto de una manera que no agrave la situación. Los fans y los medios están mirando cada movimiento, y lo que decidas decir tendrá un impacto enorme.

La directora de relaciones públicas, una mujer de mirada aguda y voz autoritaria, tomó la palabra. —La estrategia aquí es reconocer el error, pero también aclarar la verdad. Necesitamos un comunicado público. No podemos dejar que los medios sigan distorsionando la historia, pero tampoco podemos parecer que estamos minimizando lo que pasó. Tienes que ser honesto, mostrarte arrepentido y tomar responsabilidad.

Escuchaba cada palabra, pero dentro de mí, la frustración crecía. No era solo la presión de la agencia, era la realidad de ver cómo un simple error se había convertido en un espectáculo nacional. Había trabajado tanto para mantener una imagen intachable, y en una noche, todo se estaba desmoronando.

—Voy a hacerlo —dije, finalmente encontrando mi voz en medio del caos—. Escribiré el comunicado, seré completamente honesto sobre lo que pasó. Pero también quiero que sepan que no fue como lo están diciendo. No quiero que la gente piense que soy alguien irresponsable o que no me importa lo que hago.

Seon-Yeong asintió, su expresión suavizándose un poco. —Es la mejor decisión. Si eres sincero, la gente lo verá. Y nosotros estaremos aquí para manejar la parte mediática, para asegurarnos de que la verdad llegue a todos.

El equipo empezó a esbozar un plan, discutiendo cómo y cuándo se publicaría el comunicado, qué palabras usar para transmitir sinceridad sin parecer que solo estábamos controlando el daño. Me quedé sentado, escuchando, sintiéndome como un espectador en mi propia vida. Era extraño ver a tantas personas trabajando para reparar algo que había causado yo solo. Mi error había dejado de ser solo mío; ahora era un problema compartido.

Mientras se ultimaban los detalles, no podía dejar de pensar en mis fans. Sabía que muchos estarían decepcionados, y eso era lo que más me dolía. No quería ser una fuente de vergüenza para ellos, no quería ser otro ídolo más atrapado en un escándalo. Quería ser mejor, para ellos, para mis compañeros, y para mí mismo.

—Voy a hacerlo bien —repetí, más para mí que para los demás—. Lo siento mucho por haberles puesto en esta situación. Prometo que haré todo lo posible para enmendarlo.

La reunión terminó con una mezcla de alivio y tensión. Teníamos un plan, pero el verdadero desafío estaba por venir. Mientras caminaba de regreso a mi sala de ensayos, sentí la presión del mundo sobre mis hombros. Sabía que no sería fácil, pero también sabía que no podía permitirme fallar otra vez. Mis fans, mis compañeros y mi propia integridad estaban en juego.

Weverse Post - Yeon-Jun de ELIXIR

Hola a todos, soy Yeon-Jun. No es fácil para mí escribir estas palabras, pero creo que es necesario ser honesto y transparente con ustedes, especialmente con todos los que me han apoyado durante tanto tiempo. Sé que mis acciones recientes han causado preocupación y decepción, y lo lamento profundamente.

Quiero aclarar lo que realmente sucedió aquella noche. Después de una larga cena de trabajo con el equipo, en la que bebí un poco, tomé la decisión de regresar a casa. No quería causar problemas, y mucho menos ser un peligro para nadie, así que decidí usar un scooter eléctrico para recorrer el corto trayecto hasta mi apartamento.

Estaba a pocas cuadras de mi casa, y mientras daba la vuelta en una esquina, perdí el equilibrio y me caí. No había alcohol suficiente en mi sistema como para estar completamente desorientado, pero sí lo suficiente como para no ser tan cuidadoso como debería. Me sentía avergonzado y confundido, y antes de que pudiera recomponerme, dos policías que patrullaban la zona se acercaron para ayudarme a levantarme.

Los agentes fueron amables, pero al verme en esa situación, me pidieron mi identificación y licencia de conducir. Fue entonces cuando descubrí que mi licencia estaba vencida. Un error estúpido, lo sé, pero uno que nunca había revisado y que, sumado a la situación, complicó las cosas más de lo que podía imaginar.

Los medios han reportado que estaba manejando un auto, que hubo un accidente mayor y que puse en peligro a muchas personas. Eso no es cierto. No hubo ningún coche involucrado y, afortunadamente, nadie resultó herido aparte de mí mismo. Sé que eso no justifica lo que pasó, pero quiero que sepan la verdad de mi propia boca.

No intento excusar mis acciones. Como figura pública y, más importante, como ser humano, sé que tengo que ser más responsable. He decepcionado a muchas personas, incluyendo a mis compañeros, a mis fans, y a mí mismo. Estoy trabajando para corregir mis errores y asegurarme de que algo así no vuelva a ocurrir.

Quiero pedir disculpas sinceras a todos ustedes. Lamento que mis acciones hayan causado tanta preocupación y decepción. Estoy profundamente arrepentido, y aunque no puedo cambiar lo que pasó, me comprometo a aprender de esto y a ser una mejor versión de mí mismo.

Gracias por tomarse el tiempo de leer esto. Espero poder seguir contando con su apoyo y, sobre todo, espero poder recuperar la confianza de cada uno de ustedes.

Con todo mi corazón,

Yeon-Jun.