Gracias a un matrimonio forzado, después de 2 años Valentina por fin siente libertad.
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Capítulo 3
Increíblemente, estoy en el mismo lugar donde conocí a esa chiquilla mal educada, ¿Será que la vuelvo a ver?
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Joder como odio chocar con las personas y lo peor han arruinado mis zapatos.
Diego... Joel? Busca algún sitio donde puedas reemplazar mis zapatos, y apresúrate.
Joel... si señor, y de que marca los desea?
Diego... en este lugar dudo que sepan de marca, solo procura que sean cómodos y me hagan ver bien con el traje.
Joel... como diga señor.
Diego... espera un momento, justo quiero de esa tienda.
- Se lo digo apuntando a la tienda donde veo a esa mujer, de lo más cómoda.
Joel... ¿Esta seguro que desea de ahí?
Diego... claro que sí, ve por un par.
- Espera, mejor y la traes hasta el auto, no sé cómo lo hagas, pero la quiero aquí, y sino ya sabes.
Joel... ok señor.
Joel es bastante atento y sabe como arreglárselas, aparte de ser un buen asistente lo considero como a un amigo.
Después de rato vuelve con esa mujer, pero al parecer no se acuerda de mí, << no sé en qué estaba pensando al venir aquí, si ni siquiera se acuerda de mi >>
Valentina... ¿Qué le parecen estos zapatos, señor.?
Diego... ja a eso le llama zapatos? Se nota que no sabes nada de zapatos.
Valentina con cara de pocos amigos.
Valentina... Le parece estos? o quizá quiera una selección de modelos desfiladas por su asistente?
Diego... ¿Tienes carácter para responderme así? Muy bien, tráeme algo que vaya mejor con mi apariencia.
Valentina... claro, señor 😈
Se fue, pero que mujer, tiene una lengua muy afiliada, sin duda es la candidata perfecta.
Al rato vuelve con una caja.
Valentina... No hace falta que los vea, créame que son justo como usted me los pidió y caen muy bien con su apariencia, ha y no hace falta que me los pague, tómelo como una recompensa por su chaqueta.
Diego... que, pero que..
Esta mujer me volvió a dejar con la palabra en la boca, pero quien se cree que es.
Diego... Joel?.... ¿Acaso te estás divirtiendo?
Joel... No señor, jamás lo haría.
Diego... Me pareció que si, en fin, quiero toda la información de esa mujer, a más tardar para la noche, ¡vámonos!
Joel... si señor, a donde lo llevó?
Diego... vamos a casa, quiero descansar.
Bendito día, y pensar que no se acordaba de mí.
Pero que diablos me dio esa mujer? 😡
Ni crea que esta se la voy a pasar, "zapatos de acuerdo a mi apariencia"
estúpida mujer, se está metiendo con mi poca paciencia.
* Después de dos horas por fin Diego estaba leyendo la información de Valentina, sin darse cuenta de que una pequeña chispa había crecido en su corazón.*
Vaya, así que no termino sus estudios por falta de dinero, eso lo podemos solucionar, con una buena oferta no solo ella gana, sino que yo también, es hora de actuar.
*Al día siguiente, Diego elabora un contrato muy tentador para Valentina, puesto que no tendría como negarse*
En la oficina de Diego...
Diego... Hoy estaré muy ocupado, puedes encargarte de todo mientras yo soluciono un asunto, y hasta mi regreso no me pases ninguna llamada.
Joel... pero hoy tiene junta con los inversionistas, la licitación ya está lista.
Diego... Carajo, me había olvidado, a que hora es la reunión.
Joel... A las 3 de la tarde, señor.
Diego... Falta 2 horas, alista todo que antes de eso estoy aquí y si es posible con una esposa.
Joel... Esposa? Se refiere a la señorita Alondra? O a..
Diego... Exacto, a ella me refiero, que esto no salga de aquí, solo es entre tú y yo.
Joel... muy bien señor y felicidades si lo aceptan.
Diego... gracias y dile a los guardaespaldas que hoy no los quiero.
Joel... si señor.
Ahora falta lo más importante, espero y acepte.
Media hora después, en el local de Valentina.
Diego... ¿Disculpe podría hablar un momento con usted?
Valentina... ¿No tendría un motivo del que usted y yo podríamos hablar, además estoy ocupada no ve?
Diego... Solo será un momento, por favor.
Luisa... Ve hija, atiende al señor, yo me ocupo de todo aquí.
Diego... Gracias, señora.
Minutos después en la cafetería de siempre.
Valentina... ¿De que quería hablar, acaso me va a pedir una disculpa por ser prepotente? Entonces soy todo oídos,
Diego... ¿Disculpa? La que se pasó de la raya fue otra, y no, no he venido por eso, sino por esto.
Le extiendo el contrato..
Valentina... ¿Y que se supone que es? Puede hablarlo.
Diego... Verás, soy un hombre importante de negocios y que su tiempo es limitado, por lo que hoy a ser directo contigo, quiero que te cases conmigo.
Valentina..........................
Diego... Necesito una esposa antes de este fin de mes, y si tú me ayudas, yo estoy dispuesto a cumplir con cada cláusula que está en dicho contrato.
Valentina... ¿Usted realmente está loco, acaso perdió la cabeza? O ¿se le zafaron las tuercas? Si es así, hay solución, voy por un destornillador y se las vuelvo a colocar.
Diego... Eres más testaruda de lo que me había imaginado, y no estoy loco, enseñarte contrato especifica todo, solo será un matrimonio que te favorecerá a ti tanto como a mí, los dos salimos beneficiados, si quieres tiempo, piénsalo.
Valentina... Que dijo usted, a esta con palabras dulces ya la envuelvo, pues fíjese que no y no acepto su propuesta, si no tiene nada más interesante me retiro.
Diego... ¿Hazlo por tu madre, ya esta cansada de trabajar, no te gustaría tenerla en una linda casa donde pueda relajarse sin preocupaciones?
- Mira esta es mi tarjeta, piénsalo y me llamas, te doy hasta el fin de semana y sino me has llamado lo entenderé.
Valentina ya fastidia con tanta tontería.