Esperanza es una organizadora de bodas que dejó de creer en el amor y los finales felices cuando siempre por una u otra razón sus romances perfectos acababan abandonandola en el día más importante de su vida, su boda. Sus padres le concretan un matrimonio pero quién sería su esposo escapa dejándola en el altar y en lugar de ser el hazme reír la otra familia pone en lugar de su hijo a su sobrino del cual poco se sabe pero mucho se comenta. Entre ellos habrá una loca historia, un contrato y muchos problemas. ¿Me acompañas a descubrirla?
NovelToon tiene autorización de SilvinaTracy para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 20 FIESTA
...ESPERANZA...
Al no poder hablar con mis padres ni con la familia de mí esposo me levanto de la silla decorada magníficamente y me dirijo a Analía.
-¿Estás bien?- me pregunta preocupada y no se ni como responder
-¿Cómo estarías si tu prometido contratado huyera y te ponen al primo mafioso en su lugar?- su mirada compasiva me lo dijo todo
-¿Hablaron de algo o se han aplicado la Ley del hielo?- preguntó y en susurros decidí contarle
-Me dijo que el primo se casó con la novia y huyó así que lo pusieron a él, que no juegue con su tolerancia podría decirse y que pasaremos la noche juntos seguro porque eso es lo que se espera en una luna de miel o noche de bodas- Analía no sabía que decir
-El tiene razón, lo siento pero tu también lo sabes. Creo que puedo ayudarte. Sabes que mí esposo es amigo del dueño del hotel que está en la Avenida Clarín así que podría pedirle que reserve una habitación para ustedes, una doble que tenga dos cuartos comunicados con una puerta, al menos así no compartirían la cama- comenzó a explicar y creí que tenía razón así que le diría a mí esposo la buena noticia
-Gracias Ani eres la mejor- le di un abrazo y volví a la mesa
Me senté al lado de Mariano otra vez y después de tomar el valor suficiente hablé.
-Puedo conseguir una habitación en un buen hotel, es doble y no tendríamos que compartir la cama, ¿No es genial?- lo miré con duda porque yo parecía la única entusiasmada de los dos
-¿Que tiene de genial eso? Causaría más sospechas, primero el cambio de novio y después habitación doble cuando tendríamos que tener sexo toda la noche- me miró con fastidio
-Ella pueden esperar lo que sea pero no es lo que pasará- respondí ofendida con la situación y su manera de hacerme desanimar, al menos yo estaba buscando la salida de ésta locura pero el permanecía con elegancia sentado sin preocuparse
-Dejame entender una sola cosa. ¿Crees que una boda que une dos familias importantes no fue bien planeada? Realmente eres estúpida si piensas eso, ¿Y eres organizadora de bodas?- soltó su sarcasmo al final
-Soy organizadora y muy buena. La boda la planearon pero no entiendo el punto
-Seguro ya reservaron un hotel o un avión para irnos de inmediato y unas vacaciones en algún lugar donde habrá una cama- me miró como si fuera estúpida y hasta yo creí serlo
Decidí quedarme callada, siempre hay planes y con dos personas que provienen de una familia adinerada es lo que se espera. Aún viajar con Analía me resultaba atractivo, tal vez hasta sola sería mejor pero no con éste hombre que miedo.
Nos llamaron para seguir el protocolo de la boda. El pastel, el brindis después de mencionar algunas palabras, por nuestra parte esperamos que alguien más hablara porque al menos yo no sabía que decir y él no era un hombre de muchas palabras.
El baile de novios llegó. Su agarre en mí era firme, fuerte pero su manera de moverse suave y elegante. Si tan solo dejara de intentar cortar la circulación de mí mano todo sería mejor.
-Me duele la mano- le dije y aflojó su agarre un poco- ¿Planeas marcarme después del baile? De ser así sigue apretándome
-Demasiado delicada para mí gusto- me dijo dejándome en una pieza
-Demasiado bruto para el mío, de todos modos no esperaba algo diferente de alguien como tu- hice referencia a los rumores de ser un mafioso
Tal parece que el carácter de mí esposo no es el mejor porque la sonrisa malvada que me dedicó y esa mirada extraña me estremeció de miedo y encima en plena pista donde no podría hacer nada para huir de él sin levantar chismes ni sospechas de nada.
Pasaron unos segundos y él me dió una vuelta antes de entregarme a mí padre que venía caminando en mí dirección para bailar conmigo y cuando estuvimos frente a frente me besó con rudeza y me inclinó hacia atrás sin dejar de besarme como en las películas.
(Así)
Debí sostenerme de él porque sentí que me caería y el más presionaba sus labios para que se volviera apasionado. Era un salvaje, más que eso. Un desgraciado que disfrutaba ponerme más que incómoda y encima en público donde no podía hacer nada.
Acabó el beso y cuando me enderezó me volvió a besar apemas uniendo su boca a la mía pero sujetando mí rostro con las dos manos y recién ahí le dió a mí padre mí mano para bailar.
-Estás loco- le susurré molesta sonriendo para disimular
-Si estamos metidos en eso aprende a hacer las cosas bien- me dijo y bailó con su tía