LA HERENCIA

Maria: Los días pasaron Alejandro estaba todo el tiempo conmigo, incluso llevaron una cuna para Jimena pregunte por Kane pero dijo que no sabe nada de él pero conozco su mirada en fin, puedo notar que no le quita la mirada a la maleta. Ya sabes que tengo la computadora.

Alejandro: si.

Maria : entonces ya sabes lo que dice.

Alejandro: deje mi trabajo aun lado y me senté con ella en la cama tomo su mano, suspiro hise mal en quitarte la carta y pues la computadora es tu ya, así que no tocaré tus cosas. Solo debes saber que leas lo que leas lo único cierto es que te amo.

Maria: espero que cumplas y empieza por soltarme gracias. Levantó las manos y siguió con su trabajo, los días pasaron por fin me dieron de alta pero Alejandro me dijo que todas mis cosas estaban en su casa, yo me negué a ir pero el me dijo que adónde iría, a casa de mis padres donde no me quieren o estaría sola sin cuidados así que eso no tiene discusión alguna, en parte tiene razón. Cuando llegamos el nos dejó en casa y se fue por qué había estado lejos de la oficina mucho tiempo, Germán aún sigues aquí.

Germán: mucho tiempo sin verla señorita, dígame qué habitación gusta que le prepare o se quedará en la de su hermana.

Maria: en la de mi hermana no creo, Alejandro querrá ocuparla.

Germán: el sigue ocupando la misma habitación de siempre.

Maria: la que esté cerca ala de Jimena.

Germán: entonces será la de su hermana por qué está justo a lado.

Maria: no que sea una frente a la de ella en la habitación de alado que la niñera se instalé.

Germán: como usted ordené.

Maria: recorrí la habitación de mi hermana parece como si ella aún estuviera viva todo limpio y acomodando, las cortinas son muy oscuras a diferencia del resto de la casa, su perfume aún prevalece en el aire incluso podría decir que puedo verla caminar por toda la habitación, unas lágrimas escaparon de mis ojos, luego fui ala habitación de Jimena es bonita pero las fotos son de Laura sola, en toda la casa no hay fotos de ellos juntos está lista su habitación señorita. Germán quien decoro la habitación de Jimena.

Germán: nadie más que su hermana. Sus cosas estan acomodadas así que me retiro para que descanse.

Maria: gracias Germán, las ventanas son grandes y la luz entra muy bien, pero el detalle es que da gusto ala entrada de la casa eso quiere decir que cada ve que Alejandro llegue podré escucharlo y verlo de lejos. Me recosté a descansar pero sentí que alguien rosa mi cabello dejándome un beso en la frente abrí los ojos rápido pero que sorpresa era mi padre. Que haces aquí?.

Salomón: vine a verte le dije frío y sin expresión, me alejé para quedarme parado junto ala ventana saque un cigarro y comence a fumar.

Maria: odio el olor a tabaco.

Salomón: lo sé, eres mi hija y te conozco.

Maria: por qué me odias.

Salomón: por qué crees eso.

Maria: siempre has sido así frío conmigo a diferencia de Laura.

Salomón: no te odio.

Maria: y entonces por qué nunca te he importado.

Salomón: quien dice que no.

Maria: me fui de la casa y no me buscaste para regresar.

Salomón: no te odio solo que eres tan parecida a mi.

Maria: entonces explícame.

Salomón: te quiero a mi manera.

Maria: vaya manera de querer, un poco extraña.

Salomón: escucha bien lo que te voy a decir por qué no lo repetiré, sabes que soy hijo ilegítimo de tu abuelo.

Maria: si se que eres adoptado, de una pariente lejana.

Salomón: eso es una mentira, soy su hijo bastardo al cual se negó a reconocer durante 20 años.

Maria: por qué?.

Salomón: por qué el tenia un hijo legitimo de su matrimonio.

Maria: sigo sin entender.

Salomón: cuando cumplí 20 años mi padre me busco para darme su apellido, me dijo que sentía administración de saber hasta donde había llegado sin su apoyo, pero que ya era hora de que me reconociera, que me daría su apellido y que un día sería su heredero. Sabes en ese tiempo yo era como tú alegre, lleno de vida y tenía un amor ella se llamaba Maria.

Maria: queeeeee😲 me puso el nombre de su ex. Genial y conmigo desquita su frustración.

Salomón: cuando fuimos al cambio de apellidos estaba feliz, por fin tendría el apellido de mi padre y su amor que tonto fui, al llenar los papeles dijo que sería una adopción me sorprendió lo que dijo pero me explico que era para que la gente no hablara a mis espaldas o me tratarán mal por ser un bastardo, cuando me dio una fiesta para presentar me ante sus amistades dijo que yo era hijo de un pariente lejano , no dije nada en ese momento pero cuando todos se fueron pregunté por qué hacía eso por qué me negó, y el dijo que si su hijo no hubiera muerto jamás me hubiera reconocido que los hijos bastardos existían en su familia solo en caso que la esposa quedará sin posibilidades de tener más hijos por qué su apellido solo podía llevarlo su sangre aún que fuera un bastardo como yo.

Maria : pudiste irte.

Salomón: lo intente pero tú abuelo me dijo que mi madre y María no estarían esperándome cuando yo llegará con ellas, si entiendes verdad.

Maria: si y por eso me odias.

Salomón: que no te odio, acepté todo lo que el dijo con la condición que ellas estuvieran bien, al poco tiempo me dijo que me casaría con tu madre, yo no quería me negué pero mi madre me dijo que María desapareció así que no tenía que pensar mucho. Después de saber eso acepté casarme con tu madre unos días después de la boda el cuerpo de María aprecio en un río murió ahogada eso decían pero yo sabia la verdad, así que jure vengarme de tu madre haciendo la sufrir y de tu abuelo dejándolo en la calle después que tome el control de todo que para eso falta poco.

Maria: entonces tú no amas a mamá.

Salomón: así era la principio pero luego ella me gano solo que ya no podía reparar nada, cuando Laura nació estaba contento la carge ella solo dormía y tiempo después llegas tu pero todo fue diferente contigo en cuanto te cargue abriste tus ojos y tu sonrisa iluminó mi mundo así que decidí que te llamarías cómo mi amor por qué gracias a ti todo cambió. Conforme crecían las dos era diferentes Laura era tranquila mitras que tú eras un torbellino que pasaba dando alegrías. Entonces decidí que tenías que ser más fuerte que a ti no te pasaría lo mismo que a mí.

Maria: fuerte ?.

Salomón: lo que más extrañe cuando te fuiste era verte bailar por el pasillo con esa canción que siempre ponías al llegar de la escuela, subía a escondidas y te veía ir por el pasillo cantando, bailando Laura se unía a ti eras como un imán que jalabàs alegría.

Maria: pero tú subías y apagabas la música.

Salomón: si lo hacía cuando estaba por terminar y siempre corrías a esconderte al cuarto de tu madre, sabes que cuando te fuiste sentí tristeza pero también estaba feliz por qué tu dejarías está jaula de oro y podrías volar para reliazar los sueños que yo jamás pude hacer, por eso cuando regresaste me enojé tanto por qué yo te prefería lejos pero feliz no viviendo en este infierno de oro.

Maria: papá no sabía, siempre pensé que no me querías.

Salomón: eres mi hija claro que te quiero, pero ahora tú abuelo quiere casarte con el hijo de un socio para fortalecer la familia, por qué Laura no está ya así que perdimos el apoyo de la familia de Alejandro.

Maria: pero yo no quiero.

Salomón: lo sé, y no voy a obligarte se dónde esta tu corazón. Cuando naciste te jure que te apoyaría, tu decides aquièn amar aún que no me guste.

Maria: mi padre me dio un beso y me dijo que me quiere, pero que ahora tenía que volver hacer ese hombre frío frente a todos por mi y se fue.