Dos caras, dos vidas ,un sufrimiento y dolor sin reparó. sin un ayer no hay un mañana y un mañana es el dolor del ayer, sin sacrificio no hay recompensa pero parece que está no es muy buena.
NovelToon tiene autorización de BRISSEE LONDOÑO para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
CAPITULO 18
Persona misteriosa: (sonríe con malicia) procedemos con la segunda parte del plan.
ISMAR : (sonríe) si, pongamos a dudar a todos y cada uno de ellos.
Persona misteriosa: (sonríe) Como tú desees. El plan de ISMAR era mandar notas que les diera sisaña, pero ISMAR sabía que todo no sería creíble para muchos, por eso también mandó a crear escenarios y acontecimientos para que todo pareciese real.
FERNANDO también se preparaba para cualquier situación, y aún para la fina. Fernando: (preocupado) ¿Por qué pienso en ella? Pero si le pasó algo o atento con ella misma... (suspira molesto) Ya me tiene harto el estar a su lado, creo que es lo peor que he podido pasar, pero es lo mejor que he conocido.
Nicolás: (suspira) Le sucede algo.
FERNANDO: (sonríe) No, no me sucede nada, o así creo.
Nicolás: (sonríe) ¿Por qué lo dice?
FERNANDO: (con tristeza) Me enamoré de la chica equivocada, ella nunca está para mí y su identidad para mí es un misterio. Es como si no fuéramos conocidos, pero tampoco cercanos. Ella sufre en silencio y no me habla.
NICOLÁS: (suspira) Tranquilo, tal vez es ella así porque ha sufrido mucho. No le preguntes, solo consolarla y ella hablará contigo.
En casa de ISMAR...
ISMAR: Ya llegaron las noticias (sonríe).
Persona misteriosa: (sonríe) Sí, ya mataron a uno de sus jefes y acabaron con tres docenas de ellos.
ISMAR: (Sonríe) Perfecto, son cuatro, murió uno, quedan tres que dudan de sí mismos. Mañana acabaremos con ellos y, por favor, prepara el avión.
Persona misteriosa: (serio) Sabes que desde mañana tomarán acciones, ya se infiltraron entre los nuestros.
ISMAR: (Sonríe) Lo sé, pero también sé que la policía los vigila y ellos dudan unos de otros. Mañana, después de enterrar, se pondrán a discutir, pero llegaremos antes de que entierren para yo enterrarlos a ellos.
Persona misteriosa: Está bien, lo dejaré en tus manos.
ISMAR: (con una expresión fría) Cuando mostrarás tu imagen... (sonríe) No creo que falte mucho para que me descubran.
Persona misteriosa: (nerviosa) No te atreves a mostrar tu imagen, ¿por qué? Si tú muestras la tuya, tendré que mostrar la mía y aún no quiero.
ISMAR: (alza sus cejas) ¿Qué te sucede? Este es mi rostro y, si yo quiero, me corto el rostro.
Persona misteriosa: (suspira) Como quieras, pero falta la acción de mañana y yo quiero participar.
Y así pasó. FERNANDO llegó al lugar, aunque estaba escondido. Un rato después llegaron los hombres de ISMAR y formaron un gran confrontación. La policía aprovechó esto para capturar a los tres que faltaban, pero no sería posible porque llegó la cereza del pastel y era ISMAR. Ella llegó en un helicóptero, disparando, mientras que esos tres hombres aún dudaban y pensaban que alguno de ellos se unió con ISMAR por el gran poder que ejercía. La policía se vio agobiada, pero aún así, FERNANDO vio esto como una gran experiencia.
ISMAR se bajó del helicóptero.
ISMAR: (sonríe) Hoy les daré un gran entierro y quiero que lo disfruten.
Fernando: (sorprendido) ¿Es ella? Pero ella los apoya o es enemiga... Pero hoy voy por su cabeza.
ISMAR se volvió muy cruel con esos hombres, pero los mató. De todas formas, era algo muy pequeño.
ISMAR: (sonríe con sangre en su ropa) Hoy me vestí de blanco para ver mi victoria en mi ropa.
Persona misteriosa: (sonríe desde la lejanía) Vamos con los policías.
ISMAR: (sonríe) Acabemos con los policías que son una molestia (gritó).
Inmediatamente, todas sus soldados empezaron a acabar con los policías y ISMAR volvería al helicóptero, pero cuando ella iría de vuelta, FERNANDO la persiguió para disparar. Pero ella, al intentar esquivar su disparo, iba a caer al mar. FERNANDO se apresuró para tomarla y quitar el velo de su rostro.
ISMAR siguió empuñando su arma y NICOLÁS le disparó. FERNANDO solo pudo quitar el velo y ver el rostro de ISMAR. Entonces, sus ojos empezaron a llorar. Pero qué pena que ISMAR nunca tuvo la intención de matar a Fernando . Ella, antes de caer, le disparó al hombre que estaba detrás de FERNANDO.
La persona misteriosa, al ver que ISMAR cayó al mar, gritó desgarradoramente, que todos fueron capaces de escuchar.
Persona misteriosa: (grita) ¡No! ¡Nosotros estamos unidos por la vida y la muerte! ¡Regresa, no!
La escena termina con la persona misteriosa gritando de dolor y desesperación, mientras FERNANDO se queda en shock al ver el rostro de ISMAR y NICOLÁS se acerca a él para tratar de calmarlo.
Inmediatamente, el espía de ISMAR sacó a todos sus compañeros del lugar, dejando muchos muertos, mientras que Nicolás no entendía el sufrimiento de FERNANDO, si se suponía que esta era la asesina que él quería apresar.
Fernando: (llora) No, no es mentira. Fernando se fue a buscar al espía de ISMAR.
Fernando: (llorando) Esa no era ella, dime que no es la asesina.
Espía: (sonríe) Era ella, ella murió, mi jefa murió por su culpa (llora).
FERNANDO: (en shock) Eso es mentira, yo no puedo ser el culpable de su muerte, ella siempre se irá y volverá, yo esperaré por ella.
Espía: (molesto) Crea lo que quiera, pero ahora, por su culpa, estamos sin una jefa y mis hermanos y yo no sabemos qué pasará con nosotros.
FERNANDO se quedó en silencio, llorando y en shock, mientras el espía de ISMAR se alejaba, dejándolo con más preguntas que respuestas.
NICOLÁS: (confundido) ¿Qué sucede? Ya tenemos que irnos, la policía de aquí seguirá el asunto.
FERNANDO: (entre lágrimas) Usted vio el rostro de la mujer.
NICOLÁS: (confundido) No, no lo vi.
FERNANDO: (llorando) Justo como pensaba, maté a la persona incorrecta... pero no recuerdo que ella se fue... (pausa) ¡Ella se fue!
De pronto, FERNANDO corrió para tirarse al mar y NICOLÁS fue detrás de él y lo tomó del brazo.
NICOLÁS: ¿Qué te sucede? ¡Fernando, no!
Pero al ver que FERNANDO insistía en tirarse, NICOLÁS no tuvo más remedio que noquearlo para que no cometiera tal locura.
FERNANDO se desplomó en el suelo, inconsciente, mientras NICOLÁS se arrodillaba a su lado, preocupado.
NICOLÁS: (susurrando) ¿Qué te pasó, amigo mío? ¿Qué te hizo reaccionar de esta manera?