Valeria Ibarra es una chica de 19 años a punto de graduarce como medico veterinario. En una visita a su tía se entera del oscuro secreto de su origen y el culpable de la muerte de su madre. El interés que mueve a su padre no tendrá límites.
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3-Mas problemas
--No grites princesa nadie te va a escuchar.
--Ya no me digas princesa.
--¿Qué? Acaso te molesta... Princesa...
--Si me molesta por que no soy una princesa.
--Ya siéntate y descansa que mientras esté tan fuerte la tormenta nadie vendrá a ayudarnos y menos te van a escuchar… Así que mejor ponte cómoda... Princesa.
--Ahs.
(Es un idiota que solo sabe molestar, pero tiene razón por que la bodega no está cerca de las casas y aparte la lluvia está muy fuerte... Nadie me va a escuchar por más que grite y me toca quedarme aquí con este idiota que no conozco y que claro no quiero conocer por idiota... Pasan las horas y la lluvia en lugar de bajar de intensidad hace más ruido y claro tenía que ser granizo eso hace más ruido todavía... Parece que se va a caer el cielo o se va a inundar el mundo con tanta lluvia)
--Es mejor que aprovechemos bien la lámpara de nuestros teléfonos y busquemos abrigos o cobijas porque esto va para largo y pronto hará frío.
--¿Qué? No pienso ponerme nada de esto encima. Quien sabe donde estuvo antes de llegar aquí.
--Lo sé, pero es peor morir de frío teniendo aquí con que abrigarte... Anda princesa ven aquí está un abrigo para ti.
--No, yo no me lo voy a poner.
--Está bien lo dejaré por aquí para cuando tengas frío... Mientas haré una cama con estas bolsas y mira si hay cobijas tenemos suerte.
--Si tú lo dices... (Él se pone a ver que encuentra y se pone una chamarra café qué al parecer tiene peluche por dentro y pensándolo bien ya me está dando frío así que agarro el abrigo qué me dio y lo checo es un Armani y es de mi talla así que me lo pongo huele un poco a viejo, pero está limpio y para este frío cae muy bien).
--Vez, que te costaba aceptarlo desde el principio... Aquí cuando graniza se pone muy frío así que es mejor que te tapes bien o te vas a enfermar.
(Le ayudo con mi lámpara y el ya acomodó todo para acostarnos en las camas improvisadas qué acaba de hacer y encima las cobijas qué también huelen feo, pero para el frío están perfectas)
--Ya están princesa... Después de usted.
--¿Dejaras de decirme princesa?
--No.
--Eres un idiota lo sabías.
--Ya me lo habían dicho.
--Que raro... (Pasan las horas y la lluvia no cede y estamos aquí esperando a que alguien venga a ayudarnos y nada).
--Hey... Despierta ya esta amaneciendo.
--¿Que? Me quedé dormida.
--Si, nos quedamos dormidos... Espero todo este bien en casa.
--¿No han venido a sacarnos de aquí?
--No y no sé escucha ningún ruido.
--Maldita sea... Mi padre debe estar muy preocupado por mí.
(Se escucha ruido afuera).
--¿Están ahí? ¿Valeria, Javier?.
--SI, TÍO AQUÍ ESTAMOS.
--Como les dije se quedaron encerrados anoche.
--No me importa si se quedó encerrada... Solo importa con quien.
(Al fin nos van a abrir la puerta, pero se escucha que mi padre está afuera y se escucha muy molesto y como no si no llegue a dormir anoche... Me espera un gran castigo... Serán varios días sin salir de la casa y me olvidaré de visitar al tío Gerardo... Al fin salimos y antes de salir dejo todo en las bolsas y hasta el abrigo qué me sirvió anoche).
--Por fin te encuentro señorita.
--Perdón papá se cerró la puerta con el aire y...
--Y...
--¿Qué señor?
--No me preguntes que porque sabes a lo que me refiero...
--Perdón señor, pero no sé de qué habla.
--Mira muchacho no estés jugando conmigo... Pasaron la noche juntos y no me vayas a decir que no paso nada entre ustedes.
--Papá... Eso fue lo que paso... Yo no lo conozco y no paso nada entre nosotros.
--Y que... Creen que yo me cupo el dedo no.
--Papá.
--Tú te callas desvergonzada.
--Papá.
--Estoy hablando con este.
--Esteban creo que estás exagerando todo esto.
--No, yo no exagero él tiene que casarse con mi hija lo más pronto posible.
--Papá no por favor.
--Si y te callas... ¿Quién te manda a quedarte aquí toda la noche?
--Papá... Eso... Eso fue un accidente... Yo no planeaba quedarme aquí... Es más intentamos salir y no pudimos porque la puerta solo se abre por fuera y...
--Te acabo de decir que te calles... Esto será una vergüenza para la familia y tienen que casarse.
--Señor entre su hija y yo no paso nada se lo juro.
--¿Pasaron toda la noche a solas y me dices sinvergüenza que no paso nada entre ustedes?
--Así es señor.
--Quien te va a creer eso, si ya todo el pueblo estuvo alerta buscándolos. Al medio día seremos el chisme del momento.
--Papá por favor.
--Se van a casar y tú vas a afrontar esto y como hombre vas a responderte a mi hija.
--Está bien señor... Lo entiendo y si me casaré con ella.
--¿Estás loco? No... No quiero casarme... Soy muy joven para eso Papá... Por favor no me hagas esto.
--Se van a casar y es la última vez que lo digo y ya el muchacho este lo acepto así que vamos a la casa qué tenemos que hablar muy claro de esto.
--Tío por favor convence a mi padre de que no haga esto yo no quiero casarme y... Menos ahora, por favor.
--Tu padre está cegado hija y en este caso no se puede hacer nada... Dejemos que las cosas se enfríen y después iré a hablar con él.
--Si tío gracias.
(No quiero casarme soy muy joven y no quiero casarme con un asesino, no quiero vivir aquí, no quiero... No... Espero poder convencer a mi padre de que no me obligue a casarme con él, sería muy malo que nos relacionen con un asesino... Si eso es... Eso es lo que le diré... Aparte no vivimos aquí y nadie lo sabrá si nos regresamos mañana mismo a Estados Unidos... Nadie lo sabrá y por mi parte no volveré aquí jamás... Ya en casa mi padre me lanza una bofetada de esas que te obligan a moverte de tu lugar y te reinician la vida del madrazo qué sentí).
--Papá... Tú... Tú jamás me habías pegado.
--Pues hice mal y hasta ahora me doy cuenta... Te consentí demasiado porque no tenías a tu madre cerca y ahora me pagas con esto.
--Papá.
--¿Qué pasó porque le pegas?.
--Se quedó a dormir con un fulano toda la maldita noche y ahora tiene que casarse con él.
--Papá ya te dije mil veces que no quiero casarme y no lo haré.
--Lo vas a hacer aunque no quieras... ¿Quién chingados te manda a meterte con un pendejo muerto de hambre y para acabarla asesino?
--¿Qué, como que asesino?.
--Si, como lo oyes. Esta tonta se metió con un pinché asesino y ahora tiene que casarse con el yo mismo los encontré en la bodega de mi hermano.
--¿Qué? No puedo creer eso.
--Pues considéralo.
--Papá vámonos de aquí regresemos a Estados Unidos yo no quiero casarme con él.
--¿No le dijiste?.
--En que momento se lo digo si pasa esta clase de cosas que hace que me decepcioné de ella... Sabes que me voy a dar una vuelta... Tengo que pensar bien en esto.
--Papá.
--Imagínate la vergüenza que le harías sentir a tu madre con esto... Se volvería a morir.
--No, Papá no me diga eso.
--Y tu abuelo a quien... Al igual que tu madre se va a morir de la vergüenza... O no, eso es lo que querías desde el principio no... Que se muera el viejo, pero sabes que si se muere eso va a quedar en tu conciencia... Te veo más tarde.
--Sonia... Por favor ayúdame a convencerlo de que no me obligue a casarme.
--Lo siento Valeria, pero tu padre cuando se le mete una idea en la cabeza no hay poder en la tierra para que desista de eso... Así que mejor ya no protestas si y acepta tu nueva realidad.
--Pues no quiero... (Subo al cuarto y empiezo a empacar todo... Dejo algo para cambiarme porque este olor a viejo y a humedad me siguió así que me meto a bañar y al salir término de alistar todas mis cosas para irme de aquí, ya en el camino le hablaré a mis amigas para que me reciban en su casa unos días en lo que mi papá y Sonia deciden regresar. Mi padre le informa a mi tía todo lo que paso y mi tía le dice que ya todo el pueblo está enterado que me metí con el asesino y que mi padre ahora pide que nos casemos por favor viven el siglo pasado... Ya en la noche empiezo a bajar mis maletas, son varias maletas... Que pendeja debí traer solo una, pero como mi padre me dijo que trajera las maletas que yo quisiera pues hay me ven con cinco maletas... Adelanto dos luego las demás y así voy avanzando despacio, pero nadie se dio cuenta de que me salí de la casa).
--¿A dónde vas a esta hora?
...
Preocupen pero no es para que la regañes