¿Puede una mujer ser adicta al se*o?
¿Qué es la ninfonania? ¿Tiene cura esa enfermedad?
¿Qué problemas futuros acarrea una viol*ción?
¿Puede un hombre ser el veneno y antídoto de una mujer?
William no supo que le pasó, conecto la mirada con la pequeña mujer y quedó hipnotizado, ella supo como provocarlo, la manera como se balanceó y levantó las piernas mostrando la pequeña tela que cubría lo que él deseaba ver lo puso nervioso y hasta excitado, por un momento se le antojó bajarla del escenario, llevársela y castigarla por alterar el orden de su mie*bro.
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¡DETENTE!
"Maiky, haré un privado" Dijo la chica entrando a la oficina del hombre.
Mike se alarmó "No fueguito ni lo pienses, el grandote de tu novio se entera, capaz y cierra mi club ¿Crees que no me di cuenta como oscureció su mirada el día que despertaste de tu sueño bella durmiente, y luego Fernando te miró? Casi lo mata y es su amigo ¿Qué puedo esperar yo?"
"Maiky no se enterará, te lo juro, solo será con este cliente" Rogó la pelirroja.
"¡Vaya! Pensé que ahora solo tenías ojos para tu príncipe ¿Volverás a tus andanzas? Porque si lo vas a hacer fueguito que sea fuera de aquí y no con mis clientes" Advirtió Mike.
La pelirroja soltó una carcajada "Que malo eres Maiky" La mujer salió hacia el cuarto privado.
Cuando la niña iba a empezar su espectáculo, Mike ingresó al cuarto oscuro y dijo "Esto está cancelado, salen inmediatamente de este sitio"
La sala que solo iluminaba a la pelirroja en el pequeño escenario, con un tubo en el centro, fue irradiada por Mike, que encendió la luces.
Mike aunque no gustaba de Lombardi, creyó que la niña estaba enamorada del empresario, ahora que se había enterado de que la mujer era menor de edad no quería que anduviera en las mismas.
También imaginaba al grandote cerrando su club si alcahueteara una infidelidad, lo pagaría muy caro.
Mike se sorprendió al ver al cliente "¿Tú?, no sabía que se trataba de ti, con juicio Fueguito, nos vemos más tarde"
Mike al ver de quien se trataba no le quedó más opción que permitirlo.
La pieza musical dance for you de Beyoncé resonó por toda la habitación.
Yo sólo quiero
Mostrarte cuanto te aprecio
Quiero mostrarte cuan dedicada estoy a tí.
Quiero mostrarte cuan leal por siempre seré para tí.
Quiero mostrarte cuan bien haces sentir a tu enamorada.
Quiero mostrarte cuanto eres para mi, ¿Entiendes?
Quiero mostrarte cuanto valoro cada cosa que dices.
No sólo eres leal sino que eres paciente conmigo bebé.
Quiero mostrarte cuanto me interesas, corazón.
Quiero mostrarte cuanto odio estar separados.
Mostrar-mostrar-mostrarme hasta que creas en mí.
Amarte es todo lo que tengo en mente
Y no hago nada que no sea pensar en hacerlo día y noche.
Quiero hacer ese cuerpo temblar, siéntate y observa.
Esta noche voy a bailar para tí (oh uh oh ah)
Esta noche voy a bailar para tí (oh uh oh ah)
Esta noche pondré mi cuerpo sobre el tuyo
Bebé me gusta cuando me miras.
La noche se vendrá abajo..
Rockearé sobre ti bebé, rock-rockeando sobre ti bebé
Dando vueltas sobre ti bebé, vueltas vueltas sobre ti bebé
Baby, déjame poner mi cuerpo sobre el tuyo.
William observaba a la pelirroja detalladamente mientras escuchaba la letra de la canción que lo estremeció, era tan profunda, se preguntaba si la chica la había escogido intencionalmente o era un simple tema.
William no era experto en Pole Dance, pero, había descubierto atravez de Luisa que era un arte.
El empresario persibia un toque mas sensual y perverso por parte de su novia. No buscaba la dificultad en los movimientos, ni la consecución de determinadas figuras. Se centraba en la sensualidad, en la seducción, haciendola ver extremadamente sexy, atrevida, provocadora, con una confianza en si misma verdaderamente cautivadora.
Luisa disfrutaba de su sensualidad y de su cuerpo, le gustaba lo que hacia, sus factores más importantes eran la fluidez en los movimientos, de manera que se unian en transiciones suaves y los resultados finales eran elegantes y limpios.
Los movimientos de la chica eran increíblemente magníficos, junto con el vestuario revelador pero sexy, William agradecía que la dedicatoria hubiese sido privada, no soportaría que ese baile lo disfrutara otro hombre.
La música se detuvo, la niña bajo del escenario con una respiración agitada y William recordó aquella noche entre sus brazos donde estaba como ahora o incluso más inconstante, también recordó que era una menor de edad y que habia cometido un error.
El castaño recordó que su entrepierna estaba como iceberg y cruzo las piernas para no ser descubierto, pero había sido demasiado tarde la pelirroja disfrutó de sus ojos cambiantes y esto le indicó que el hombre estaba más que excitado.
"¿Dónde aprendiste todo eso?" Preguntó el empresario con una mirada complacida.
"Cuando era pequeña en la escuela practique en danza, gimnasia y teatro al llegar aqui aprendí otras cosas y la universidad aunque no tiene Pole, me ha pulido" Respondió entrecortada la pequeña con una enorme sonrisa.
"Hoy te sentí distinta o es que ¿Todos tus privados son asi?" Dijo el castaño queriendo descubrir las intenciones del baile, temia de sus palabras, la niña era sincera y se iba sin tapujos.
"¿Celoso Sr. Lombardi?" Soltó una carcajada la hermosa niña.
William no se inmutó, ¿Acaso era asi? ¿Estaba celoso? Continuó mirándola esperando una respuesta.
"Es la primera vez que hago Pole Exotic
requiere cierta habilidad acrobática"
"Hoy realicé una amplia variedad de movimientos aéreos en el tubo, como el carrusel, el chopper, el crucifijo, el layback, el invertido y muchos más"
"Estos movimientos se pueden realizar con una variedad de posiciones del cuerpo, hoy me viste por primera vez usar las piernas y los brazos para sujetar a la barra y realizar movimientos de torsión y división de manera mas senxual, solo para tí, tú me inspiras"
¿Escuchaste la canción? Es mi favorita y también es para tí" Concluyó la pelirroja.
"¿Tuviste sexo aquí?" Preguntó seriamente el empresario.
"¿Qué? ¡No!, No está permitido, si deseaba tener sexo debía irme a otro lugar fuera del club" Contestó nerviosa la niña.
"Me gustó Lu, pero no te enamores de mí porque no soy bueno con las relaciones" Dijo William.
"¿A qué le temes? ¿Te preocupa enamorarte de mi?" Preguntó la pelirroja perversamente.
"No me enamoró Lu, las mujeres me gustan y mucho, pero nada es más importante para mi que mi trabajo" Dijo el guapo hombre.
"¿Y por eso estás tan duro? Me querrás William Lombardi y no podrás sacarme de tu cabeza, ni de tu corazón nunca" Luisa dijo esto y lo besó montandose encima del empresario.
William le correspondió y como no hacerlo, si ese pequeño demonio lo tenía a mil, el empresario tocó su cintura y la presionó y dijo aún entre sus labios "¡Detente!"
La mujer se detuvo sin levantarse de el, sintiendo su hombría en medio de la pequeña tela que la separaba de la perdición.
El hombre se recuperaba, tenía la respiración agitada y un dolor extremo en sus testículos "Lu ve a vestirte ¡Nos vamos!"
"Está bien gruñón, la confesión del día de hoy será responder preguntas ¿Te parece?" Dijo la niña de manera divertida.
El hombre asintió y preguntó "¿Fecha de nacimiento?"
la niña inocentemente respondió "14 de mayo"
"¿De que año Lu?" Dijo el hombre de manera intimidante.
Luisa empezó a sudar y su corazón fue a dar un paseo "Dos mil..."
William la tocó y la niña temblaba "Lu cálmate, he decidido que de ahora en adelante las confesiones serán con preguntas y como cumple en menos de un mes te obsequiare algo"
La pelirroja sonrió nerviosamente y sin decir ni una palabra fue a los vestidores.
"Si le dijera a William que soy menor ¿Me perdonaría por no decirle? Aunque siento que lo sabe" Pensó la mujer.