EL RENACER DEL AMOR DESPUÉS DE LOS 40.

Luego de salir de casa Cristian se encontraba en su auto culpándose por todo lo sucedido. Cada palabra que dijo Cristina fue verdad.

Él la culpaba de todo en silencio, creyendo estúpidamente que por su forma de ser tan libre le había dado demasiada confianza a su hija y que este era el resultado de sus malos consejos, pero nunca se puso a pensar en su vida y como él también engañaba a jovencitas ignorantes para llevarlas a la cama y luego abandonarlas sin decir más.

Ella tenía razón al decirle que los mujeriegos pagan sus karmas con sus propias hijas y que al igual que él afuera hay un montón de idiotas que solo buscan diversión a costa de mentiras baratas como el amor.

Ahora todo estaba arruinado Cristina había recordado la pérdida de su bebé y eso la lastimada profundamente y todo por una maldita confusión.

Mientras se encuentra totalmente perdido en sus remordimientos recibe una llamada de Cataleya quién lo invita a tomar un trago y pasar el rato como lo solían hacerlo muchísimos años atrás.

Sin a donde ir decide aceptar tal vez así podía acallar toda la culpa que sentía. Llegando al lugar en pocos minutos donde lo esperaba su vieja amiga de la infancia.

_ Pero mira que sí vino mi buen amigo veo que tu mujer no te tiene completamente dominado.

_ No hables así de ella Cristina no es de ese tipo de mujer

_ ¿Y de qué tipo es entonces? La verdad quiero saberlo cómo fue que esa mujer dominó por completo al magnífico Cristian Pedroso.

Cristian toma todo el trago de una sola vez.

_ Es la mujer más maravillosa que pude conocer, es tierna y bondadosa a veces actúa como una niña, pero a la vez es muy fuerte y capaz. Gracias a ella pude formar una familia feliz.

_ Vaya amigo la verdad es que no te reconozco, pero estamos en confianza. Dime de la verdad Cristian le eres 100% fiel o sigues jugando a escondidas.

_ Por qué diablos quieres saber eso.

_ Solo soy curiosa no es como que te vaya a delatar tu mujercita me cae muy mal.

_ Esa es una razón suficiente para no confiarte absolutamente nada de nuestra vida.

_ Eres un aguafiestas. Venga bebamos hasta olvidarnos de nuestros malditos problemas. Que yo si la estoy pasando muy mal.

En otra parte Malcom visitaba a sus padres dejando a Dilayla con Lorenza para tener una buena charla con su padre.

_ Padre necesitamos hablar.

_ Ya se a que vienes y mi respuesta es no.

_ No estoy aquí para pedir permiso. Me divorciare de ella a más tardar en un mes.

_ No lo permito Malcolm si estamos donde estamos es gracias a su familia que no dudo en darnos una mano en nuestro peor momento. No dejaré que la humilles así después de todo lo que a hecho por nosotros.

_ Entonces prefieres que sigamos sufriendo en un matrimonio sin amor. Prefieres que tú única nieta sufra viéndonos odiarnos.

_ Cata es una excelente mujer que incluso a cuidado de mí todo este tiempo.

_ Papá a veces creo que la quieres incluso más que a mí. Fue por tu insistencia que nos casamos fue por tu terquedad que seguimos casados después de tantos años. Yo estaba dispuesto a asumir mi responsabilidad por Dilayla sin nada que ver con ella, pero hay estabas tú siempre de su lado.

_ Era lo justo. Yo no iba a quedar mal con mi amigo de toda la vida por tu estupidez y lo vuelvo a decir Cata es una excelente mujer.

_ Una que incluso tiene un amante bien escondido. Durante todos estos años ella ha estado con alguien más y aun así la vas a seguir cubriendo papá.

_ No caigas tan bajo en ensuciarla hijo. Si ella te ha engañado ha sido porque tú no puedes sacarte de la cabeza a esa zorra. Estás desperdiciando los mejores años de tu vida en un recuerdo vacío.

_ Como sabes tanto papá.

_ Yo lo sé todo. Y te recomiendo olvidar esa absurda idea de una buena vez. Solo Cata será tú esposa por el resto de tu vida.

_ Los años te han vuelto senil padre. Buenas noches.

Maldito idiota jamás permitiré que dejes a Cataleya jamás. Eso solo sobre mi cadáver, pero antes de irme al infierno me llevaré conmigo a esa ramera barata.

No permitiré que todo mi esfuerzo sea en vano. Ya lo logré una vez definitivamente lo lograré de nuevo.

Ya de madrugada Cristian abandona el lugar hecho un completo desastre. Dejando a Cataleya desmayada en la sala VIP que compartía.

Cristina se encontraba desayunado junto a sus hijos preparando ese día. Thomas le informa que el fin de semana sería el cumpleaños de Dilayla y que todos estaban invitados a asistir ante la mirada suplicante de sus dos hijos Cristina no tiene escapatoria.

Ven llegar a Cris casi irreconocible. Quién pasa directo a la habitación sin decir nada Cristina suspira hondo y se dispone a salir al trabajo mientras sus hijos van a la escuela.

Ese día será uno largo y más sabiendo que tendrá una charla con Malcolm. Se siente nerviosa y piensa en retirarse antes de que el llegue pues no es un buen momento mucho menos ahora que su esposo le dejo saber que está celoso y confundido.

Pero antes de que pueda huir Malcolm llega en el preciso momento impidiéndole irse.

_ Ya te ibas Cristina acaso olvidaste nuestra cita.

_ Claro que no lo olvides señor Sangenis, pero quiero aclararle que esto no es una cita.

_ Bueno si vemos el lugar se puede decir que sí lo es puede tomarme como un paciente más que viene a hablar de su dolorosa vida.

_ Muy bien tome asiento y hablemos.

_ Gracias Cristina. Primero que nada quiero decirte que ese día que nos separamos yo recibí una llamada urgente de parte de mi madre me informaba de una tragedia y básicamente me arrastraron del lugar mandé a buscar por ti, pero tú ya no estabas en el hotel.

Todos estos años te busqué, pero nunca pude dar con tu paradero. Tal vez fue porque te casaste no mucho tiempo después.

_ ¿De verdad me buscaste todos estos años? ¿Lo hiciste en persona?

_ No. Tenía demasiado trabajo y me era imposible dejar la ciudad por el estado de salud de mi padre. Estoy seguro de que alguien nos quiso separar, pero aún no sé quien o porque.

_ ¿No dejaste una nota para mí en el hotel en aquel tiempo?

_ No. Me noquearon para poder traerme de regreso, ya que yo me negaba a dejarte atrás. ¿De qué nota hablas?

_ De una que estaba escrita donde me decías que gracias por la diversión y un poco de dinero supongo que por mi servicio de acompañante.

_ Cristina como puedes pensar que yo haría algo así. Mi amor, nuestro amor era sincero.

_ No me lo creí en absoluto no hasta que te vi con mis propios ojos casarte con ella. Aquel día yo estaba afuera de la Iglesia cuando ustedes salían felices del lugar.

Malcolm queda asombrado por la información. La busco por dos décadas y ella siempre estuvo tan cerca. Ambos tienen una charla muy larga donde sacan conclusiones de que fue lo que realmente sucedió aquel día.

Ya habían descartado a Lorenza y Cataleya aún quedaban dudas de Abel, pero Malcolm lo había mandado a investigar años atrás y estaba limpio. De su padre ni hablar después de dejar el hospital nunca salía de cada por su salud.

_ Cristina no crees que tu encuentro con ese hombre fue demasiado oportuno.. No quiero culparlo de nada, pero que justo en tu momento más vulnerable aparezca una buena persona que se toma tantas molestias por una desconocida es muy raro.

Mucho más si me dices que fue él nuevamente quien te ayudo el día de mi boda sacándole del lugar.

_ No puede ser. Cristian no sería capaz de algo así. Yo lo conozco muy bien.

_ ¿Lo amas?

_ Si yo lo amo y he sido muy feliz junto a él todos estos años.

_ ¿Lo amas como me amaste a mi?

_ Malcolm... Nunca podría amar a alguien más como te ame a ti, pero la vida siguió y yo también tenía que seguir no podía quedarme estancada en el mismo lugar por siempre.

_ Yo lo hice. Yo si me estanque y no supe como seguir sin ti en mi vida. En todos estos años no hubo ni un solo día en que no te recordara Cristina. Ni uno solo.

Cristina queda de piedra por su declaración. Sabe que no miente lo puede ver claramente en sus ojos. Esos ojos que se notan tan casados y tan tristes.

Ahora se cuestiona absolutamente todo. No puede ser que todos estos años vivió engañada y que todo fue fríamente calculado por alguien tan cobarde que se esconde tras las sombras.

_ Malcolm aunque nosotros ya no podamos volver a lo que aguna vez fuimos debemos encontrar quien fue el culpable de toda esta desgracia. No podemos dejar que se escape.

_ Lo sé. Lo encontraremos pase lo que pase, pero que aras si descubrimos que tú esposo tiene algo que ver después de todo.

_ Yo me encargaré de él. Es mi esposo así que es mi deber enfrentarlo.

Con un propósito ya marcado y una decisión tomada ambos planean como seguir de ahora en más sin siquiera imaginar el gran golpe que les esperaba solo días después.

Mientras ellos intentaban desenredar esta telaraña bien construida Thomas y Dilayla pasaban todo el día juntos planeando su fiesta de cumpleaños y disfrutando de un sentimiento prohibido que comenzaba a crecer.

En ese momento Thomas vuelve a ver a aquella mujer que salió del despacho de su padre el otro día.

_ ¿La conoces Thomas?

_ No. La vi el otro día, mi padre me dijo que es una vieja conocida, pero hay algo en ella que me es muy familiar.

_ ¿Como familiar?

_ Sus ojos son muy parecidos a los de mi hermana Tania. La misma forma y el mismo color.

_ Tal vez no es una amiga sino más bien algún familiar de tu padre y por eso quizás tiene similitudes con tú hermana.

_ Puede ser eso. Luego le preguntaré mejor. Vamos princesita que todavía queda mucho por comprar.